El Engaño

Los frutos del duro trabajo

—Discúlpeme por haberlo hecho esperar, pero estaba un poco ocupado— le indico que siguiera y tomara asiento

—No se preocupe, vine para saber cómo van con la investigación

—Le tengo una buena noticia, el testigo que presencio la muerte del joven Nathan, recordó que vio a un niño salir corriendo en la dirección contraria, ya estamos investigando la zona para ver si alguien lo ha visto o si saben en qué dirección se fue

—¿Eso significa que Joseph está vivo?— dijo Albert aliviado

—Es lo más posible

—¿Y Catherine? ¿Han descubierto algo sobre ella?

—No, de ella si no tenemos ningún rastro, pero si descubrimos que Ray Grant tenía varios enemigos que lo estaban buscando, estamos investigando si ellos también estuvieron involucrados

—¿Y han descubierto algo más sobre Charles y su familia?

—Nada extraño, confirmamos que habían estado trabajando para los Foster desde hace cinco años y antes de eso, habían estado viviendo en un pequeño pueblo trabajando como carpinteros

—¿Nada más?

—No, sé que sigue sospechando de ellos, pero como le dije, no hay nada que indiqué que ellos tuvieron que ver con el incidente, todo apunta a que Ray Grant y Douglas Bates, fueron los que tramaron todo, ya que también descubrimos que la empresa de la que el señor Bates decía ser dueño, era solo una fachada.

—¿Y qué va a suceder con todos los bienes de Richard?

—Me temo que tendremos que hacer cumplir el poder que dejo el señor Foster, todo quedara en manos del señor Charles Wells, hasta que aparezca el joven Joseph Foster

—No pueden hacer eso, por lo menos esperen a que encuentren a Joseph

—Hasta donde sé, hay varias personas que dependen del trabajo de la empresa del señor Foster, alguien necesita hacerse cargo de todo para que la empresa siga funcionando, de lo contrario tendrá que cerrar

—Mi padre era socio de Richard, nosotros podríamos hacernos cargo mientras encuentran a Joseph

—En ese caso tendrá que hablar con su abogado, él ya se está haciendo cargo de los documentos del señor Foster

Albert salió de la oficina de inmediato, tenía que evitar que Charles se quedara con todo. Aunque todavía no habían encontrado al investigador, el hecho de que Joseph pudiera estar con vida, fue un gran alivio para Albert, solo esperaba que lo encontraran antes de que le dieran todo a Charles.

—Puede seguir, el señor Parker lo está esperando— dijo su secretaria cuando Albert se presentó. Al entrar a la oficina, un hombre robusto y bien vestido lo recibió

—Albert— dijo cuándo lo vio entrar —Estaba pensando en llamarlos, ¿Robert no viene contigo? — pregunto al verlo solo

—No, solo vine yo

—Siéntate, estaba revisando los documentos que la policía saco de la casa de Richard

—¿Qué has encontrado? — pregunto tomando asiento

—La verdad es que estoy sorprendido— se sentó en su escritorio —No tenía idea de que Richard estuviera estafando a sus clientes

—Eso es mentira, Richard sería incapaz de hacer eso

—Yo pienso lo mismo, pero no podemos negar estas pruebas— le entrego los documentos —Estuve investigando sobre las entregas que se mencionan allí y ninguna se realizó, el dinero fue entregado, pero los automóviles nunca llegaron a sus destinos

—Eso no puede ser, tiene que haber un error— dijo mirando los papeles —Esto no es verdad—  repitió negándose a creer que Richard fuera capaz de hacer algo así

—Créeme que para mí también es difícil de asimilar que estuviera estafando a sus clientes, pero me temo que Richard no era la clase de persona que creíamos conocer

—Por favor, no le vayas a decir nada a mi padre—  dijo dejando los documentos sobre el escritorio —Tenemos que evitar que esto llegue a la prensa, no podemos permitir que se dañe la imagen de Richard y su familia, por lo menos hasat que pueda demostrar que esto no es verdad

—Te entiendo, haré lo posible por evitar que esto se sepa

—¿Y entonces que sucederá con todos sus bienes, con la empresa?

—Richard dejo un poder en donde dejaba a Charles Wells como responsable de todo, así que no tenemos de otra que hacerlo cumplir

—¿No hay nada que podamos hacer?

—Me temo que no

Albert no sabía si contarle lo que el investigador le había dicho, ya que era posible que le dijera lo mismo que el oficial, que necesitaría pruebas para poder anular ese poder, así que no le quedaba de otra que no perder más tiempo y ponerse a buscar esas pruebas.

 

La noche había llegado y Francis estaba en la entrada de la casa, llego justo a las diez y Alice ya lo estaba esperando. Francis vio que tenía los ojos rojos e hinchados, pero no le pregunto nada, no estaba de humor para hablar.

—Trata de no hacer ruido

Le dijo mientras subían las escaleras. La casa estaba en silencio, como lo había dicho Alice, ya todos se encontraban en sus cuartos. Una vez entraron a la habitación de Alice, Francis no perdio el tiempo, comenzó a besarla y a desvestirla, la llevo hasta la cama, pero en ese momento Alice comenzó a llorar.

—¿Y ahora qué te pasa?

—Lo siento, es que hoy estuvimos recordando el tiempo que pasamos con…

—Nathan, no podías pasar un segundo sin hablar de él—  se recostó a su lado —Porque no me dices de una vez que sigues enamorada de él

—No, yo estoy enamorada de ti—  se giró para abrazarlo —Pero no puedo evitar sentirme triste por lo que paso, deberías entender como me siento, me entere de que tu también perdiste a tu padre ese día—  Francis no dijo nada, se le había olvidado que debía aparentar sentirse mal por su muerte, pero lo único que sentía al recordar cuando le disparo, fue alivio 

—Entonces será mejor que me vaya

—No, quédate por favor, no quiero estar sola esta noche, te necesito

—Está bien

Alice lo beso y luego apoyo su cabeza sobre su pecho abrazándolo. Así no era como pensaba pasar la noche con Alice, pero su pierna había comenzado a dolerle por haber caminado hasta su casa y le dolio aun mas con cada movimiento que hacia, así que igual no podía hacer nada, además de que así tampoco podía regresar a la posada. Definitivamente, tendría que recuperarse primero antes de volver a pasar una noche con ella. Después se encargaría de que Charles se las pagara por haberle disparado en la pierna. Francis se despertó antes de que amaneciera, el descanso había aliviado su dolor, así que ya podría regresar.




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