-Gracias por venir - dice Eva a Reynaldo dejándolo entrar en la casa.
-Cuando me hablaste con tanta urgencia - adentrándose en la casa.
-Puede que exageré - algo apenada dice. - Pero tuviste la razón, las niñas han vuelto.
-¿Cómo puedes estar tan segura? Ingrid te lo contó.
-No, me encontré con Mr. Coco.
-¿Mr. Coco? - confundido, repite.
-Sí. Mr. Coco regreso y en su lugar desapareció Mr. Remington.
-Perdón, ¿De qué hablas? No entiendo nada, ¿quiénes son Mr. Coco y Mr. Remington?
Riendo, Eva le explica:
- Son los peluches de las niñas, sus favoritos. Cuando se vieron por última vez los intercambiaron. Mr. Coco es el perro y Mr. Remington es un osito de Klarrisa.
-¡A!, ¿Y han regresado a sus dueñas?
-Sí.
-Cuando lo dices así, Klarrisa nombraba algún peluche que no quería que Ingrid olvidará.
-Misterio resuelto, después de tanto tiempo niñas regresaron a estar juntas/vuelven a unirse.
-Esto no le va a gustar a Sandra - con preocupación dice.
-Yo diría que le molestaría más la otra
-No, no la conoces. No es ni la sombra de la que fue ahora, solo piensa en el dinero y en el estatus, esto no le gustará ni un poco.
-Tengo una idea. ¿Qué planes tiene Baldo cuando termina la temporada?
-No lo sé. ¿Por qué?
-Investigarlo. Puede que al menos mitad podríamos esconder.
-¿Me lo cuentas?
-Tú entérate y te lo cuento. Ahora debo irme han venido clientes.
-Hola - acercándose a Baldo en la playa, dice Klarrisa.
-Hi - devuelve el saludo con la sonrisa enamorada acercándose le.
-Parece que Ingrid tiene un plan, pero le interesa, ¿qué planes tienes tú con el fin de la temporada?
-No crees que es arriesgado platicar aquí - dice Baldo verificando que no los están observando.
-No, no te preocupes si alguien pregunta diré que es lo que es plática sobre que después en fin prácticamente soy la dueña.
-Está bien, no, no tuve un plan. Sé que mi contrato termina con el fin del verano, sin embargo, todavía no decidí que cuando termine. ¿Qué quiere Ingrid con esa información?
-Eso no lo sé, no me lo quiso contar. La voy a ver esta tarde y la pregunto, ¿Quieres venir?
-Te lo digo más tarde, tengo que trabajar - dice antes de irse con el cliente.
-¿Estamos seguras aquí? - pregunta Klarrisa mirando alrededor.
-Si, no te preocupes aquí, no te puede ver nadie de tu mundo - le asegura Ingrid sentadas en un pequeño café en la playa.
Asintiendo con la cabeza, Klarrisa deja la preocupación a un lado:
- Hablé con Baldo y dice que todavía no tiene nada planeado.
-¿En serio? - Sorprendida pregunta Ingrid. - Ok. Bueno, yo pensé que pudieras meterlo a alguna escuela que a tus padres no les parecerá tan mal partido.
-Ni voy a obligar a Baldo estudiar algo que no le gusta solo por mis papás.
-Bueno, como quieres apenas comenzamos. Es lo primero que se me ocurrió.
-Y te lo agradezco, se lo platicaré a Baldo. ¿Tú no tienes a nadie?
-¿A quién, al novio? - con sorpresa pregunta y responde - Noooo - negando y con la cabeza.
-¿Por qué? ¿Tan mal sabor te quedó por lo de tu papá?
-Yo no tengo padre.
-¿Veto dices?
-No es necesario porque simplemente no se tiene que decir. No lo escucho, ni lo veo desde que se fue.
-Lo siento.
-A mí no. A veces creo que la vida es mejor sin hombres.
-Yo no estaría de acuerdo ni tú, si, en cambio, de tener a Eva por mamá, tienes la mía bendecirías que tienes a papá.
-Bueno, el tuyo no es malo.
-Puede que no, sin embargo, estoy aquí, ¿qué no? Lo que significa que no es tan divino. En fin, para cortar toda la plática de los padres, el mío siempre está en la parte de Sandra.
-Y ella es la que manda - constata Ingrid.
-Hola chicas - dice Baldo sacando la silla.
-Hola amor - sometiendo ambas saluda Klarrisa con un rápido beso.
-¿Cómo estás Baldo? - pregunta Ingrid.
-Muero de trabajo, no tiene nada de chistoso trabajar en el sol.
Riendo, Ingrid dice:
-Bueno, el mío está cubierto por una caja en la que estoy encerada. Oye cuando lo pienso ni no es una caja es redonda - haciéndolos reír a ambos.
-Bueno, ¿Qué es ese plan?, que me dijo Klarrisa que tienes.
-Ok, no lo tomes a mal, primero procesarlo, se trata de que te escribas en una escuela bastante buena que los distinguidos Rodozo tiñen menos argumentos en tu contra si ven que tienes un futuro de dinero...
-Lo entiendo - dice Baldo con la mirada en la mesa.
-Sé que puede sonar mal o caro, pero es lo primero que se me ocurrió y seguiremos buscando, solo que tienes que tener en la mente que si esa familia empeoró con los años no será nada fácil si no tenían corazón contra unas niñas menos contra un hombre.
-Puedes dejar esa historia.
-Que no hago nada. Únicamente lo advierto de la verdad, no podemos escapar de eso. Mira - dice enfocando su mirada en Klarrisa. -, supere lo que pasó de verdad, el tiempo juntas me hizo ponerlo en el pasado. La vida es así, éramos pequeñas para poder hacer algo y esas informaciones y sabiduría nos ayuda ahora para este caso.