Eva
Me miro al espejo por quinta vez, hoy saldré a cenar fuera con Charles, sé que parece loco, dije que no tendría nada con este pero en estos meses a su lado nos acercamos más y me di cuenta de que no es el patán que creí que era, ¡y ese beso! Por Dios, fue magnífico ese beso. Sonrío como tonta hasta que mi madre carraspea, al voltear quedo frente a esta que está cruzada de brazos.
—¿Saldrás con ese engreído?
—¡Mama! —chillo, ella bufa
—¿Qué Eva?, vas a volver a caer, ¿que no ves que solo te usa?, él es rico, de una familia poderosa, no es como nosotros.
—Estás juzgando
—No soy yo quien mantiene en secreto a su hijo —mi sonrisa logra borrarse, ella tiene razón —hija —mi madre toma mis manos —no quiero que sufras, ya has pasado por muchas cosas.
—Lo sé mamá pero
—Sé que te gusta, pero ten cuidado, Charles no es bueno, si lo fuera no te mantuviera como su sucio secreto a ti y a tu hijo, solo quiero que
—¡Mamá! —grita mi hijo sobresaltándonos a ambas, yo salgo corriendo del cuarto, al llegar a la sala él está llorando.
—Mi amor qué pasa
—Mira mamá, es papá —miro hacia el televisor, siento que mi alma me abandona en ese momento mirando las últimas noticias —dime que es mentira mamá —ruega sin dejar de llorar —dicen que papá está muerto.
El poderoso hombre de negocios Charles Greyson sufre un fatal accidente junto a su hermano, noticias de última hora nos confirman que el millonario ha muerto mientras que su hermano Cédric Greyson está en coma, la familia...
Me desconecto totalmente y dejo de escuchar, mi hijo me abraza mojando mi ropa con sus lágrimas, yo siento las mías salir de mis ojos como si fueran lava, quema, mi corazón parece querer salir de mi pecho, grito abrazada a Caleb. No, no, tiene que ser mentira, un error, no ahora, la vida no puede ser tan injusta. ¿Qué clase de broma es esta? Años esperando al padre de mi hijo, años esperando Caleb por su padre, y ahora que todo parecía bien la realidad nos golpea quitándonos la oportunidad de ser felices.
Las horas transcurren lentas, es como si el tiempo no pasara, por suerte mi hijo termina dormido en mis brazos luego de tanto llorar, yo seco mis lágrimas y salgo de la habitación.
—¿Hija a donde vas? ¡Eva! —no respondo, simplemente tomo las llaves del auto y salgo a toda prisa, necesito verlo, necesito saber si es cierto, él no pudo dejarnos, dijo que no volvería a abandonarnos.
Como loca camino por el hospital, las personas me miran con lástima, claro, mi rostro está bañado en lágrimas, encuentro a una doctora.
—Necesito ver a Charles Greyson, yo
—Señorita tranquilícese
—Necesito información sobre él
—¿Es pariente? —la mujer me mira con curiosidad.
—Yo... yo soy su novia, la madre de su hijo, yo
—¿Qué usted es qué? —me giro para encontrarme con la madre de Charles, sé que es ella porque la he visto por televisión antes, camino hacia esta que no parece haber perdido a un hijo, ya que todo su maquillaje está en perfecto estado.
—¿Charles está bien? —me mira horrorizada —dígame que está bien, que los medios mientes y que está vivo, por favor.
****
La mujer deja una tasa de té frente a mí, estamos en un cuarto de hospital, solas, yo no he dejado de llorar y ella.. ella solo me mira como si fuera un bicho raro con su aire de superioridad.
—Así que Charles tenía un hijo
—Caleb, tiene cinco años, es... es igual a él —sonrío recordando a mi pequeño.
—No lo sabía
—Nadie sabe —miro a la señora —Charles quiso mantenerlo en secreto y
—Y así seguirá siendo —demanda con autoridad —nadie debe saber que mi hijo tuvo un hijo con alguien como tú, sería indignante.
—¿Cómo dice?
—Por algo mi hijo lo mantenía en secreto —ella ríe —¿Eva verdad? —asiento —mi hijo está muerto y desde hoy ustedes también, no quiero que vuelvas a decir la tontería esa de que Charles es el padre de tu hijo
—Pero
—O voy a destruirte —me amenaza con tanto odio que me estremezco por completo —nadie puede saber, puedo aplastarte a ti y a tu familia como las cucarachas que son.
—Charles acaba de morir y usted
—Yo solo velo por el bienestar de mi familia, la imagen de mi hijo no quedará afectada por un claro error cometido, quiero que te largues, necesitas dinero? Te daré el que pidas, pero no dirás nada sobre esto.
—Usted..
—Acepta el dinero Eva, es lo mejor —ella sonríe
—No necesito su dinero —me pongo de pie, la mujer viene hacia mí.
—Entonces te vas a quedar callada, con solo mover un dedo puedo matarte a ti y a tu familia —mis ojos se abren en demasía —te acabaré si dices que tienes un hijo de Charles, nadie puede saber, una sola palabra llegas a decir y mueres junto al bastardo —me alejo de ella y salgo corriendo de ahí, ¿qué clase de monstruo es esa mujer?
★★★
Mientras Eva corría lejos del Hospital y sus lágrimas salían como un mar de sus ojos, la lluvia comenzaba a caer en la ciudad, un hombre bueno había muerto, pero, no era quien Eva pensaba, el padre de su hijo luchaba por su vida conectado a diversas máquinas, su corazón quería latir, sabía que debía vivir, sabía que había hecho una promesa de no dejarlos otra vez solos.
Muchos sufren por la pérdida, pero una mujer poderosa se niega a derramar lágrimas, eso es de débiles según ella y ella, ella es muy fuerte, Cinthya Greyson tiene un corazón de hielo, pero no crean que no le duele la muerte de su hijo, le afecta más de lo que demuestra, pero la imagen va ante todo y antes muerta que quedar en ridículo con un bastardo pobre en su familia.
—Quiero que hagas algo por mí —le susurra a su hombre de más confianza lejos del resto de la familia.
—Usted solo diga, señora.
—Eva Carson —murmura el nombre con asco —busca todo sobre ella, quiero saber hasta sus malas notas en el colegio.