Todo llega.

Capítulo 16 Todo llega.

TODO LO BUENO LLEGA SIEMPRE, TARDE, PERO LLEGA.

Lo sé tiene su parte graciosa y su parte de para nada graciosa.

Todos queremos que nuestros problemas se arreglen en un abrir y cerrar de ojos, y nunca se logra, pero ¿sabes por qué?

Yo te lo explico, es muy sencillo. Si nuestros problemas se arreglaran de la noche a la mañana no serian verdaderos problemas, ya que la vida en si, fácil no es, con lo cuál nuestros problemas menos.

Siempre me he preguntado por qué a las buenas personas la vida nos pone tantos obstáculos por el camino, tantas montañas que escalar y tantos malos momentos que superar.

Sé que este libro lo vais a leer tanto creyentes en Dios como ateos, y está bien, digamos que yo he estado en ambos lados durante mi vida.

Siempre me preguntaba eso mismo y cuando las pasaba canutas, me preguntaba que porqué Dios no me echaba una mano para salir de todo aquel mal.

No tengo mucha idea si existe o no, a veces incluso pensaba que mi conciencia era una guía de él para poder salir, tener una vía de escape.

A día de hoy no se si realmente existe, pero es algo en lo que me puedo apoyar si las cosas van muy mal.

Un ejemplo muy bueno, de mi vida, es cuando quise morirme, me intenté suicidar en más de una ocasión y como por arte de magia, en mi cabeza aparecían personas que me amaban y que sabía que mi muerte les sentaría fatal. Eso era lo que me impedía irme al otro mundo.

Y funcionó, no me podía rendir, en ese momento yo no tenía amor propio ni nada, pero las tenía a ellas y eso ya era mucho, sino iba a seguir por mí, por ellas si que iba a seguir viviendo.

Más adelante, fui a diferentes psicólogos, la mayoría me querían dar pastillas, pero yo me negaba.

¿Por qué me negaba? Primero, no le puedes dar a una persona pastillas cuando lo único en lo que piensa es en quitarse la vida, y segundo, no quería tomarme las pastillas, porque eso significaba estar drogada sin sentir nada durante 8h, pero es que así, no se iban a ir mis problemas nunca, debía solucionarlo de otra manera.

Pasaron los años, me cambié de psicólogos y psicólogas, un montonazo de veces, hasta encontrar a una que decidió escucharme de verdad y darme otras soluciones que para nada era medicarme.

Aprendí muchas cosas, aprendí a conocerme, aprendí a amarme, aprendí a decir que no, etc.

Gracias a todos esos problemas, aprender de los errores y sobre todo a quererme y ponerme como prioridad, soy la persona que escribe este libro para poder echarte una mano y que por fin vivas una vida feliz.

Muchas veces, me decía una persona importante en mi vida que la felicidad no existe, son momentos cortos.

Yo te digo que la felicidad si existe y dependiendo como tu actitud y tu manera de vivir sea, tendrás más momentos felices o menos. Todo depende de cuan positivo seas en tu día a día y siempre amándose a uno primero.

No sabes la alegría que dar, ser feliz con tu soledad, que no te de vergüenza ni ansiedad, a hacer cosas tu solo al mundo, como por ejemplo: Salir a un bar a tomar algo tú solo.

Cuando lo experimentes, sabrás que vas por un buen camino.

Yo creo que las buenas personas que sufrimos tantos malos momentos y problemas tan fuertes, incluyendo problemas de salud mental como los tantos que ya conocemos, somos como ángeles guerreros, puestos aquí en la tierra para que el mundo se vea de una forma más positiva y haga las cosas de una mejor manera. Quizás me equivoque y cambie de parecer más adelante, pero esto es lo que creo en mi presente.

Recuerda que todo llega, de los problemas se sale, siempre y aunque cueste, pensando de manera positiva.

Intenta no guardar rencor ni ser vengativo, sólo inténtalo, para no andar pensando tanto en el daño que te hicieron, así sólo serás la mitad de feliz. porque la otra mitad estará pensando venganza por todo el mal recibido anteriormente.

Lo sé, es súper difícil, pero ya sabes que imposible no es.

Recuerda que sino te rindes, saldrás de esta batalla y de muchas otras que se te pongan delante, si esta batalla no la ganas, no pasa nada, sigue intentándolo que cuando llegues a la guerra, la persona que triunfará si serás tú.

También recuerda que al aprender a no ser rencoroso ni vengativo, así dejarás que el karma haga su trabajo en general.

Y eso no es vengativo, el karma hace su función tanto de bien como de mal, según lo que haga cada uno, con esto quiero decir que, el Karma actúa de bien con las personas buenas y de mal con las personas malas. Siempre se acaba situando de alguna forma, tú dale tiempo y deja de preocuparte por los que te hicieron mal.