El Espejo de Mis Pensamientos

Te superé

Capítulo 27: Te superé.

Esto es simplemente maravilloso.
Hoy vengo a compartir mi progreso.
Llevaba una racha de altibajos, más bajadas que subidas.
Una parte de mí, la "maligna", ya sabéis la vocecita mala no paraba de repetirme una y otra vez, que me rindiese, que nada me iba a salir bien, que mejor me quedase en la cama.
Después de haber salido de todo aquel bucle de negatividad en el que me había estancado por años y del que pude salir.
¿Te crees que le hice caso a esa estúpida voz? Pues claro que no.
Esta vez, yo lo iba a conseguir.
No paraba de repetirme una y otra vez a mi misma, YO VOY A SER LA PROTAGONISTA DE MI HISTORIA, DE MI PROPIA HISTORIA, Y NO VOY A CEDERLE EL SITIO A PENSAMIENTOS NEGATIVOS, NI A LA ANSIEDAD NI A LA DEPRESIÓN. NO, ESO SE ACABÓ.
Empecé a ver, a sacar el lado positivo a todo, incluso a veces, me lo inventaba, pero lograba triunfar y tener un estupendo día.
Gracias a mí actitud, a las ganas que le he echado, a hacer cosas con miedo,etc.
He logrado un millón de cosas, metas que me he propuesto años anteriores y no podía lograr.
Y en este año, 2023, he logrado hacer la gran mayoría de todas esas cosas. Os pongo ejemplos, porque aunque parezcan cosas normales, depende la ansiedad o el problema que tengas son, digamos que cada uno tiene sus miedos y yo he logrado superar los míos.
Al igual que vosotros pedís respeto, espero respeteis mis miedos y como me alegro de haber podido al fin superarlos.
En primer lugar, he superado la ansiedad social, he logrado subirme sola a un tren, viajar sola, ir al gimnasio sola, pasear, bailar y cantar en la calle sin miedo o que me importe la opinión del resto.
Estas son algunas metas que he logrado completar, y me siento bien, puedo respirar tranquila.
¡Por fin!
Todo esto, he podido lograrlo, pensando en positivo, intentando una y otra vez, poco a poco, todo aquello que me asustaba, saliendo de mi zona de conford, respirando, amándome a mi misma, respetandome, sintiendo cada emoción y poniéndome como prioridad.
A día de hoy, he aceptado que la ansiedad no desaparece, esta conmigo todos los días y soy yo quién decide si domina o no en mi vida, he decidido que la que manda soy yo.
Gracias a eso, hoy puedo controlarla.
A veces, me dan ataques, en los que no puedo respirar o ataques de ira, pero pienso en positivo, en todo lo bueno que he conseguido, y en todo aquello que lograré si consigo apaciguarlo.
Digamos que la ansiedad es una llama, es fuego, la decisión es el botón de un encendedor/mechero, y tu dedo, eres tú.
Tú (el dedo) decide si apretar el botón (decisión) para que la llama se avive o se apague. Si la llama se queda encendida, tu sufrirás y la ansiedad ganará. Si la llama se apaga, tu serás feliz y conseguirás todo aquello que te propongas.
No sé tú lo que harás, pero mi elección será y seguirá siendo apagar la llama.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.