El estaba ahí. Cuando mas egoista me porte.
Mi vigésimo cumpleaños cada vez se acercaba mas.
Y ahora veia a Charlie cada vez menos.
Pero sin embargo, apartabamos tiempo para vernos de vez en cuando.
Esta era una de esas ocaciones.
Charles se iria una semana a partir de mañana y llegaria justo a riempo para mi cumpleaños.
"Devin" me llamo. "Te traje tu obsequio" me extendio una caja de regalo.
Podria decir que era lindo que tu amigo de la infancia fuera el unico que se preocupara en regalarte algo. Pero se tornaba tedioso cuando recibias exactamente lo mismo durante diez años seguidos.
"Es una sudadera, ¿Verdad?" dije sin abrir siquiera la caja. "Verde limon. Como siempre"
"Tengo que decirte algo" me dijo con un tono conbinado de ansias y susto en su voz.
Rodé los ojos sin preocuparme en disimular ni un poco el desagrado que habia provocado Charles con sus acciones.
"¿No crees que ya estamos algo grandecitos como para que me sigas haciendo lo mismo? Charles. ¡Ya ni si quiera me gusta ese color!"
"Pero yo pense que-"
"¡Nada, Charles! Fue un accidente de parte de sonrisas. Y fui yo el culpable al no cuidarlo lo suficiente"
No recuerdo que le haya gritado a mi mejor amigo antes de ese dia. Pero ya estaba cansado de lo mismo. Le arrojé el regalo a sus manos.
"No lo quiero" declaré. "Ni un año mas, Charles". Él solo tenia la mirada baja, como si derrepente las baldosas del suelo fueran mas interesantes.
"Esta bien" se limito a decir y tomo la caja. Se dio media vuelta para dejarme ahí.
"Y algo mas."grite "no quiero verte en la celebración" no habia pensado en lo mucho que me arrepentiria despues de eso, al ver los ojos de Charles haciendo el maximo esfuerzo por no derramar sus lagrimas de las que yo mismo fuí responzable. Y es que no existe mayor pecado que provocar lagrimas en un rostro que te regalo millones de sonrisas.
"Aun asi no creo llegar a tiempo..." susurro al viento.