Imparable

( https://www.youtube.com/watch?v=xTZCwbfFWrg ) "Viva la vida" Coldplay 

Una melodía muy tenue hacia presencia, inaudible para muchos, sin embargo, a los pocos que la oían, les prometía una gran caída

Raro es ver un imperio caer con tanta facilidad.

Años de control y opresión, al fin habían dado resultado

El dictador miro lo que quedaba de su mansión, en medio de las cenizas estaba el cuadro pintado en óleo que había mandado a hacer con su imagen en él.

En un principio su intención fue buena, reconoció. Llevar la paz y prosperidad que su antiguo líder no había podido traer con mano blanda, él impuso de manera significativa a lo largo de largos años de mandato.

En un principio la gente lo adoraba, lo proclamaban como: el gobernante del pueblo para el pueblo. Pero al igual que las tropas de Roma al confiar en un general demasiado ambicioso, cometieron un craso error.

Desde el primer año se empezaron a restringir ciertas libertades, a los periodistas, a los escritores, incluso a los radiolocutores, pero la gente lo aceptaba porque el tamaño del beneficio que estaban recibiendo era mayor a la de las penas de unos cuantos, aunque sean estos beneficios insignificantes.

Pese a las restricciones en la libre expresión de llegó a esparcir un rumor terrible que no se asomaba si quiera a la realidad aún más demoledora: Sus hombres se estaban acabando el dinero.

Si bien, en un principio nuestro dictador lo tomó con calma, era notable el desasosiego que le producía la situación

Hasta que la canción llegó a sus oídos, la canción, la maldita canción.

Desde ahí todo, su vida, su nación empezó a pudrirse desde adentro

La canción continuaba reproduciéndose en su cabeza, modificando sus pensamientos con tal de evitar el futuro inevitable que esta misma profesaba, perdiendo la humildad y supuesto interés por mejorar la patria, perdió honor, perdió confianza de su pueblo.

Perdió inspiración.

De pronto vio que su imperio estaba construido sobre pilares de sal.

Cada tropa que enviaba a detener las revueltas de los revolucionarios sucumbía ante ellos

Pagó hasta a un religioso bastardo de alto nivel, pero igual no funcionó, “¿Es que de pronto todos los pobres se volvieron genios?” decía el gobernador al ver el dineral invertido en apaciguar a la población más ignorante y pobre.

Su mansión quemada llenaba de impotencia, la ya vacía alma que se ennegrecía dentro suyo, cada vez que mandaba a diezmar a las rebeliones.

La canción seguía en sus oídos, recordando lo que sucedería.

Las naciones vecinas que con tanto miedo lo miraron en un momento, ahora atacaron todos para destruirlo.

La canción se acercaba a su final, el ritmo y melodía tan dulce que la acompañaba se volvía cada vez más suaves a la vez que sublimes.

El dictador se refugió en una casa abandonada, cerca de donde su mansión volvía a arder.

Los revolucionarios pedían su cabeza.

La canción empezó su último in crescendo

Alguien tiro una bola de fuego por la ventana rompiendo el único vidrio completo que había en el lugar, la edificación comenzó a ser consumida por rosas inquietas de color rojo, naranja y amarillo.

La canción tomo un ritmo más tranquilo de manera repentina

El dictador hecho un ovillo comenzó a llorar por primera vez de manera desconsolada, las salidas fueron cubiertas por rosas y arrepentimientos, ya no había escape.

La canción cesó de manera suave, como si se fuese alejando de manera gradual.

Puede ser que la cordura abandono al dictador, segundos antes de ser asediado también por las rosas, pero en cuanto la música cesó en sus oídos se levantó tranquilamente, mientras aplaudía dijo sonriendo y llorando

—¡Que maravillosa pieza!

“El silencio es adictivo sabes” mencionpo

aquella feliz alma en pena