Notas iniciales: Escrito en el 2008
El Fantasma de un Amor Imposible
By V.Bokthersa
Era la noche más oscura que yo hubiera visto. No había luna ni estrellas en el cielo. La escalofriante brisa que movía las ramas y escasas hojas de los funestos árboles me hacía sentir la cercanía de la muerte.
Caminaba perdida por ese bosque, mis sentidos alerta. Repentinamente vi una pequeña y opaca luz que provenía de una viejísima y desquebrajada cabaña oculta entre los altos árboles.
Me acerqué lentamente a la choza, pensé que al fin había encontrado un lugar seguro para pasar la noche, fuera del frío y las gotas de lluvia que comenzaban a caer… Cuan equivocada estaba.
Toqué a la puerta, casi instantáneamente ésta se abrió dando paso a un acogedor interior, pero me sorprendí al no notar presencia viviente en ese lugar. Creí que habían salido y dejado la puerta abierta.
Me interné en ese cálido lugar, lejos del frío y la humedad del bosque, pensé que los dueños de la cabaña entenderían que yo necesitaba un lugar para no morir de hipotermia. Por un momento me sentí como Ricitos de Oro en la casa de los tres osos, sonreí y me coloque junto al fuego. Lentamente sentí como el calor de la habitación comenzaba a ascender.
De la nada, la vivaz llama de la chimenea se hizo gigantesca. Creí que me alcanzaría, pero así como eso sucedió, repentinamente la llama se apagó, dejando aquella habitación en la completa oscuridad. Una brisa helada que calaba los huesos se hizo sentir entonces. A mi mente se evocaron múltiples imágenes de los cuentos de terror que compartíamos entre bromas con familiares y amigos, aquellos cuentos que nunca creí, y que ahora, perdida en medio de aquel desolado bosque, comenzaba a creer.
Escuché una voz llamarme por mi nombre e involuntariamente mi cuerpo se tensó y pequeños espasmos de terror y frío comenzaron a recorrerme. Era una voz de ultratumba.
La voz se fue haciendo mucho más fuerte y cercana con el paso de los minutos: ese ser se encontraba en la habitación. Sentí como un aliento helado se posaba en mi nuca, yo estaba petrificada.
Una guadaña se colocó en mi cuello, me sentí desfallecer. Esa tarde salí a recolectar algunas flores y a la noche me encontraba amenazada de muerte por un ser de dudosa procedencia. Sentía el filo contra mi piel, algunas gotas de sangre comenzaron a emanar de mí. Las escenas felices y tristes de mi vida completa pasaron ante mis ojos. El terror recorría mi cuerpo, el frío aliento a muerte sobre mi cuello. La muerte tenía que estar cerca. Me armé de valor y lentamente voltee, ya no importaba nada, de todas formas moriría y quería saber quién era mi verdugo.
Le miré a la cara y entonces me relajé, su rostro… su rostro era tan hermoso como lo recordaba. Me besó y yo correspondí el beso, no me importaba morir en manos de semejante hombre, después de todo alguna vez él fue mi prometido, pero lamentablemente murió antes de nuestra boda. Sentí cómo el helado veneno recorría mi cuerpo, me sujeté a él y le susurré al oído:
—¿Por qué tardaste tanto en venir por mí… amor mío?
Notas finales: ¿Y bien? ¿Qué les pareció?, espero sus comentarios ^^
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