No... no me dejes, quédate a mi lado, quédate conmigo.
Mis lágrimas recorren nuestra historia. Te solía decir que eras mi vida, que te amaba, ahora dime: ¿mi sufrimiento, valió el dolor que me provocaste? ¿esto era amor o era un juego?
Ahora diré; mi vida es mía, ahora seré egoísta y te sacaré de mí. Romperé las cadenas, no importa si duele pero lo haré, sólo por mí, por salvarme de esta tóxica relación en la cual me ataste.
Idiota miserable.
Editado: 13.04.2019