14. Enfermero personal

El sonido de las alarmas en el hospital comenzaba a molestarme y ya no soportaba más estar postrada en esta cama sin hacer nada, queria regresar a trabajar o simplemente dejar el hospital.

Había soportado muchas pruebas capaces de hacerme perder la cordura sin ningún problema, pero ahora estaba segura de que si pasaba un día más en el hospital perdería la cordura por completo.

Solo un día había pasado desde que desperté del coma, pero sentía que había sido toda una eternidad la que he estado aquí.

¿Seré exagerada al odiar tanto a los hospitales?

Es todo el lugar desde el ambiente frío, hasta los sonidos de las alarmas y bueno, la comida es demasiado saludable para mi gusto.

De verdad necesito comerme una pizza o cinco hamburguesas con doble ración de papas fritas y queso extra.

El capitán Kai ha estado como mi enfermero personal e incluso ha sido muy atento, esta todo el tiempo preguntándome si necesito algo o como me siento y ha sido muy poco en realidad el tiempo que me ha dejado sola.

Luke vino a visitarme una vez que lo dieron de alta ¿por qué solo a él? Según Sebastian tuve demasiado aconitum en mi sistema y necesita seguir un monitoreo cauteloso para ver como reacciona mi cuerpo a pedido de Louis.

La teniente Olivia fue atrapada por el capitán cuando ella trataba de huir saliendo por el hospital y el terminó asesinando a la pelirroja cuando está intentó herirlo.

Otra vez gelatina insípida.

Estoy harta de comer esto, ni siquiera es un pastel es simple gelatina sin sabor, de no volverme loca con los sonidos o el ambiente, me vuelvo loca por falta de azúcar.

—¿No te gusta?— pregunta curioso mi capitán entrando a la habitación.

Niego con la cabeza y se sienta como de costumbre a mi lado.

—Desearía que fuera pastel de chocolate— respondo suspirando desanimada y dejo a un lado "el postre".

—Entonces supongo que te alegrará lo que te diré— suelta sonriendo y me muestra el papel que trae en sus manos.

—Ya puedes irte— anuncia entusiasta y sonríe feliz.

Me entrega el papel y lo leo con detenimiento revisando que este firmado y para mi sorpresa es mi alta firmada.

—¿Puedo regresar a trabajar?— pregunto ansiosa y me siento para tratar de levantarme de la cama.

—Más despacio— pronuncia y me sujeta sentándome de nuevo.

—Supongo que ya te dio las nuevas noticias mi adorado sobrino— menciona uniéndose a la conversación el doctor Seb.

Observo a mi capitán confundida ¿a qué se refiere con nuevas noticias?

—Tendrás que quedarte en reposo por tres días— responde ante mi confusión y observa a Seb en busca de ayuda.

Mi ánimo vuelve a ser el mismo y me acuesto desanimada en la cama.

—Necesitarás estar en reposo absoluto ya que todavía no sabemos con exactitud que efectos secundarios podrías presentar aparte de los mareos que has tenido— añade Seb tratando de hacerme entender.

Una enfermera entra en la habitación y comienza a quitarme las vías saliendo de la habitación a pedido del médico.

—Bien, entonces iré a casa— respondo con pocos ánimos y asiento forzando una sonrisa.

—Te cuidaré en mi casa— pronuncia de repente mi capitán y sonríe mirándome.

¿Qué?

Su tío Seb y yo nos miramos fijamente tratando de buscar alguna explicación o entender lo que dice.

—Necesitaras a alguien que te cuide, estás muy débil y Sebastian acaba de decir que no saben que efectos puedas presentar— añade poniéndose inquieto y se acomoda su uniforme.

Su tío continúa observándolo igual de sorprendido y su rostro refleja confusión absoluta al igual que el mio, creo que ninguno de los dos jamás había visto a Kai ser tan considerado con una persona que no fuera su amigo e incluso creo que ni con el capitán Cole era así ¿por qué hacia esto por un simple soldado?

—Pero tú tienes trabajo— suelto nerviosa y tratando de no ser descortés.

—Nos dieron dos semanas libres por el éxito en la misión ¿lo recuerdas?— responde indiferente y me mira como si fuera algo obvio.

Asiento, es claro que lo recuerdo y aún así seguía pensando que no debería tomarse la molestia, aunque tampoco queria ser grosera o descortés con mi capitán.

—No debe de tomarse esa molestia capitan, volaré a casa y mi familia podrá cuidarme— menciono tratando de no ser grosera y le sonrío con nerviosismo.

El capitán Kai se gira volteando a ver a su tío y le murmura algo entre dientes que no logro entender.

—Adeline, considerando todo pienso que lo mejor es primero tomes el reposo necesario y después vueles a casa— agrega Seb.

El capitán me observa como diciéndome que no tengo escapatoria alguna y término asintiendo derrotada.

Por favor, que mi mala suerte no se haga presente.

Los dos hombres salen de la habitación y observo a través del enorme cristal como hablan con disimulo mirando de vez en cuando hacía dentro.

—Bien, te ayudaré a vestirte— comenta la enfermera que vuelve a entrar para ayudarme a cambiarme y vestirme con la ropa que me trajo el capitán ¿es su ropa?

En realidad, espero que está sudadera no sea suya, porque no pienso devolversela y el buzo es realmente cómodo.

Salimos del hospital y agradezco que sea la hora de la cena ya que todos estarán en el área del comedor, no podría explicar el porqué mi oficial al mando me lleva abrazada y visto con su ropa.

No podía dar dos pasos solas sin tambalearme o que la vista se me nublara así que gentilmente se ofreció para que lo usara como apoyo.

—Adeline— pronuncia alguien a nuestras espaldas y observo a Ayla acercarse.

—Hola— mencionó incómoda y nerviosa al notar que detalla mi vestimenta pasando a observar mi apoyo.

—¿A dónde irás?— pregunta con curiosidad y analiza al capitán.

—Estaré en casa del capitán— menciono fingiendo desinteres.

Se acerca al capitán con su rostro completamente serio —Más te vale que la cuides bien— amenaza y el capitán me suelta para abrazarla dándonos privacidad.