Capítulo 30 : Evaluación Final

Al cabo de unos minutos poco a poco todos salen de este edificio, nos aglomeramos en la salida desde donde aparecimos, cuando yo termine Andy ya estaba esperando, cuando se percató de mi presencia rápidamente corrió hacia mí.

– ¡Maestro! – Corre muy rápido, se detiene de golpe al estar frente mío, toca mis hombros, acerca su cara y sigue con su elevado entusiasmo. – ¡Lo dije antes y lo repito ahora eres increíble estoy feliz de ser tu discípulo no solo un genio en lo teórico sí no que además con una cantidad de mana que supera por mucho el récord anterior ese es mi Maestro! – Gracias Andy por el apoyo, pero aun no soy tu Maestro, de hecho, el de nadie.

– Gracias Andy, también te felicito, posees una cantidad de mana que sobrepasa el promedio, debes de estar orgulloso de ti mismo. – Al escuchar esto Andy me observa sin pestañar.

– ¡Maestro tan amable como siempre el más poderoso, confiable y bueno de los magos ese es mi Maestro algún día voy a tratar de ser alguien como usted lo juro!

Si que tiene mucha energía desbordante el buen Andy, actualmente hay unos 28 Postulantes en las afueras del edificio, todos observan nuestro espectáculo, me agrada Andy, solo que el desborda mucha energía, bueno, así es el, aunque escucho murmullos, ellos comentan sobre mi elevado Atributo De Mana, comentarios espontáneos como.

– Es imposible que sea ya clase SSS, lo mas seguro es que esté realizando alguna trampa.

– Maldito fraudulento, no sé qué truco uso, pero no siento prácticamente nada de su mana, mas de 90000 casi 100000 de Atributo Mágico, cree que somos ciegos, es un completo farsante.

– Debe de ser una clase de mago experimentado, de alguna manera se ha rejuvenecido, todo para crear un mayor impacto, con solo 19 años es imposible que sea alguien de ese nivel. – Ya esperaba esas reacciones, pese a que lo comentan muy bajo, esos comentarios suman y suman cada vez más.

– ¡No cuestionen a mi Maestro él es increíble y punto siempre lo ha sido desde que lo conozco! – Andy suelta mis hombros y dice esa frase, el esta enfadado, encara a quienes expresan sus dudas contra mí.

– Escuchaste eso, dijo Maestro, así que el si era un fraude, lo sabía, es ilógico pensar que con solo 19 años ya sea clase SSS.

– ¡Te escuche maldito deja de cuestionar a mi Maestro! – O no Andy esta realmente molesto por los comentarios de los demás, debo tranquilizarlo.

– Andy no debes de enfadarte, esta bien, ellos son libre de pensar lo que quieran, así que hagan las pases. – El me mira algo mas relajado, pero los comentarios siguen.

– Solo es un farsante ocultando su verdadero rostro, lo mas seguro es que se este burlando de todos nosotros y de quienes confían en él, nos mira como simples basuras, no nos engañaras como a tu discípulo, farsante. – Andy nuevamente explota en ira.

– ¡Ya escuché suficiente de sus insultos contra mi querido Maestro vengan contra mí y les demostrare la fuerza del discípulo número uno!

No, Andy sí que está enfadado debo pensar en algo para tranquilizarlo, pero si los comentarios siguen será un ciclo que se repetirá siempre, piensa como calmar a ambas partes…y…si tan solo mato a quienes me insultan, no eso seria contraproducente, mi ingreso podría verse afectado, basta con que deje un poco lisiado a esas malditas basuras que están cuestionando mi…que…que mierda estoy pensando, no, yo no quiero eso, no quiero lastimarlos, no quiero volver a actuar de esa manera, no, no, para, tranquilízate, relájate, no debo permitir que me domine la ira, tengo miedo de mi mismo, si sigo de esta manera, terminare lastimando a alguien inocente, no quiero eso, no lo quiero, ayuda, alguien que me detenga, tan solo, ayúdenme.

– Dejen de gimotear tanto, malditas molestias. – Ese no fui yo, es, Anastasia, esta con su postura noble, observa a todos, cuando habló el silencio reino todo el lugar, ambas partes quedaron sin habla al escucharla, luego unos instantes ella comienza a caminar hacia nosotros, se detiene a un lado mío, mira mis ojos, suspira y me señala con su dedo. – Ahora presten atención, ustedes. – Mira a quienes me estaban cuestionando. – Dejen de llorar, solo se dejan en vergüenza cada vez más, no es que cuestionen su nivel, tan solo sienten envidia de este imbécil, con eso solo demuestran lo patéticos que son, con esa actitud solo les espera un destino, ese es ser por el resto de sus miserables vidas, unos simples estropajos sin valor dejen de chillar y vuelvan a comerse su propia mierda, cerdos sin valor alguno. – He espera, no te pasaste un poco, te agradezco el apoyo, pero ellos no se merecen ese trato, la miro y hablo.

– Anastasia no crees que. – Ella me observa muy enojada.

– Si te atreves a cuestionarme…sabes lo que te espera, cierto. – Mejor me quedo calladito, cuando observa mi reacción ella suspira, con su dedo estirado toca mi pecho. – Deja de preocuparte tanto por los demás, piensa más en ti, maldición tener que decirte algo tan básico como eso, ten mas confianza en ti, patético Humano.

– Lo siento. – Cuando dije eso, se enfadó aún más, agarra con ambas manos mi túnica.