El Gran Reinicio Parte I : Despertar

Capítulo 46 : Una Voz Misteriosa

 

Estoy en una situación muy desfavorable, al igual que con Lionach, he permitido que me ataquen desde el comienzo, analizo mucho a mis oponentes, como resultado dejo de preocuparme por mi seguridad enfocándome en detectar la forma en como implementan la Magia, los rayos del Sol apenas pueden ingresar a este domo formado de huesos y carne putrefacta, mi cuerpo comienza a ceder por mi propio peso, la herida de mis pies no solo ha provocado que pierda una cantidad considerable de sangre, un veneno ingreso en ese lugar, mis síntomas son los siguientes, debilidad muscular, visión borrosa, disminución del equilibro, dolor punzante el cual es más agudo por cada segundo que transcurre, la reacción de mis músculos es menor, finalmente, provoca que la sangre no coagule, provocando que mi pérdida de sangre sea mayor, otro punto importante es el color esmeralda que está presente en ambas dagas que perforaron mis pies, están empapadas en ese líquido, con estos antecedentes puedo concluir que usaron extracto de una flor llamada Descanso Del Hada, destinada a relajar los músculos y vasos sanguíneos al dilatarlos, pero solo en concentraciones menores, hay que filtrar el aceite producido por esta flor mediante alquimia y runas, cuando el color blanquecino original del aceite cambia a uno esmeralda significa que se a refinado correctamente, el uso de este extracto está prohibido en varias dimensiones incluida esta, debido a que es un extracto destinado a torturar.

Estoy completamente rodeado, no tengo escapatoria de este lugar, la activación de su Hechizo es algo cuestionable, solo elevó su mana pero no hubo el proceso de canalización o transformación de este para producir un efecto mágico, con el tiempo suficiente es posible invocar un Hechizo sin canto alguno, en su caso debió de haberlo preparado con anterioridad deteniéndose en la última etapa, solo esperó a que iniciara el combate para activarlo, aunque no existe regla alguna que prohíba esta práctica, no es momento de divagar, necesito concentrarme en esta situación, debo expulsar el veneno de mi cuerpo y salir de este domo, eso es lo primero, el extracto sigue presente en mi torrente sanguíneo, no es algo convencional pero lo eliminare, creo un pulso de mana que recorre mi cuerpo, debo buscar donde está dado que se distribuyó por mi torrente sanguíneo, luego de unas milésimas de segundo, encontré los lugares donde se halla hasta la última partícula de este extracto, concentro moléculas de agua, tan diminutas que penetran mi piel y vasos sanguíneos, el veneno se ha alojado en algunos órganos internos, además de que esta interfiriendo en el proceso de sinapsis, esto provoca que mis músculos no reaccionen como lo deseo, el centenar de esqueletos comienza a acercarse rápidamente hacia mí, no tengo tiempo de ser cuidadoso, gracias a mi dominio en el control del mana puedo hacer esto en un plazo ínfimo de tiempo, las partículas de agua llegan hasta el distribuido extracto, lo envuelven para aislarlos, esto provocara una serie de desgarros en mi piel y músculos, pero debe salir de mi cuerpo antes de que el efecto sea mayor, en palabras sencillas lo expulso de mi interior, esto me provocara mucho dolor, pero no tengo tiempo para dudar.

El público no tiene una visión clara de lo que está ocurriendo en el interior, las pantallas tampoco pueden captar lo que sucede dentro del domo, luego de unos segundos de que se formara esa estructura de huesos y colgajos de carne, el público queda aterrado con un hecho, de un momento a otro, en el borde de ese domo abruptamente sangre sale expulsada, los blancos huesos y la negruzca carne se tornan de un color carmesí, las gotas de sangre se deslizan lentamente hasta llegar al suelo, había extraído el veneno de mi cuerpo tan bruscamente que sufrí las consecuencias, mis sentidos siguen afectados por los efectos del extracto, esos esqueletos están a solo metros de mí, no puedo usar demasiados Hechizos, podrían haber más de esos lunáticos dentro del público, percibo rastros de mana muy leves proveniente de las paredes del domo, son runas, aunque no sé exactamente cuales, la mejor opción en mi estado actual es volver a depender de él.

– “Invocación, Vátra” – El calor que desprende no me afecta dado que soy su invocador, hablo a su mente. – Incinera a esos esqueletos. – Vátra no cuestiona mis órdenes, solo se limita a obedecer.

No puedo visualizar exactamente que está ocurriendo, pero al momento en el cual noto como todo se torna de un color azulado, también aparecen pequeños rastros de mana, deben de ser los núcleos que están dentro de los esqueletos al momento de ser destrozados, si tan solo pudiera percibirlos seria otra mi estrategia, pero al tener limitada mi visión, solo puedo depender de Vátra, luego de unos segundos ese color desaparece.

– Amo, ya he eliminado a todos sus enemigos, el problema es esta estructura de huesos, al momento en el que mi fuego hizo contacto con las paredes, lo absorbió, Amo está muy lastimado, su sangre está presente en toda su ropa y el suelo, no es por cuestionarlo, pero debería invocar a Melíades de inmediato. – Vatra me habla vía telepatía.

– Tengo la sospecha de que hay enemigos observando este encuentro, no puedo revelar mis Hechizos o invocaciones al azar, Vátra, dependo de tú vista para indicarme lo que está ocurriendo, primero que nada, ¿el suelo sigue de color negro en su totalidad? – Pregunto a Vátra.



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En el texto hay: tragedia, gore sangre accion, romance

Editado: 04.08.2019

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