Andy ha liberado aquello que guardaba, sus ojos inflamados y enrojecidos siguen presentes en su mirada, aunque luce más sereno que antes.
– ¿Cómo te sientes? – Pregunto.
– La verdad es que aun estoy algo cansado Maestro.
– Entonces descansa, prepárate para continuar con el examen.
– …
Ante su silencio acerco mi rostro al suyo.
– No me digas que aun tienes dudas o miedo.
– … Maestro, y si vuelvo a descontrolarme.
Suspiro ante sus palabras, señalo a Yudis quien se encuentra a un lado de la Maestra Agatha.
– Esa mujer se llama Yudis Palfan, no es cualquier Maga, ella es una Demonóloga acreditada por la mismísima Universidad, he presenciado sus capacidades en persona. – Sonrío confiado mientras vuelvo a observarlo. – Creo en ella y en sus capacidades, además. – Con mi pulgar señalo mi pecho. – Vuelve a descontrolarte y solo tendré que detenerte otra vez. ¿Acaso ya olvidaste la paliza que te propiné?
– Maestro… – En su rostro y en el de los demás se forma una gran sonrisa. – Es imposible que olvide eso Maestro, si bien mis recuerdos son algo borrosos, sus golpes siguen presentes en mi cuerpo.
– Con eso en mente deja de lamentarte y céntrate en recuperarte para superar esta simple prueba, como mi Alumno espero grandes cosas de ti.
La mirada de Andy se ilumina, aprieta sus puños y con una confianza incuestionable en sus palabras dice.
– ¡Si Maestro!
Doy la media vuelta y me acerco a los demás.
– Este idiota a comprendido mis palabras, dejémoslo descansar, ahora despertemos al otro imbécil que sigue durmiendo.
– Un momento Alumno Griffin. – Dice el Director.
– ¿Director, que ocurre? – Pregunta la Maestra.
– Lo siento, aun no es el momento de hablar, primero aseguremos la integridad del Alumno Beckett.
– … Como usted diga Director.
Los demás no comprenden con claridad cuál es la intención del Director, aunque ya puedo hacerme una idea sobre lo que desea hablar.
Abandonamos la habitación de Andy, antes de cerrar la puerta volteo y digo.
– Es Jueves, tienes máximo dos días para recobrar fuerzas, no lo olvides.
No he dicho estas palabras con la intención de presionar a Andy, necesito que comprenda algo muy importante, por la expresión que demuestra es obvio que lo ha hecho.
Luego de algunos minutos de caminata en absoluto silencio llegamos hasta otra puerta, la mujer mas baja de los enviados por el Consejo estira su mano y desactiva las runas de la entrada, con Andy ya lo había hecho desde antes que llegara.
– Esta abierto. – Dice la mujer.
Sin nada mas que hablar ingresamos a la habitación donde se encuentra Joseph. Nos quedamos esperando a que Jurian realice la transferencia, estando a un lado de Joseph posa su mano en el estómago de mi amigo.
– “Transferencia De Mana, Nivel 10”
El estado de Joseph es incluso peor que el de Andy, es comprensible debido a que el recibió directamente mana de un agente externo cuando sobrecargué su báculo. Con una gran bocanada de aire y abriendo lentamente sus ojos Joseph finalmente despierta, observa a su alrededor, la Maestra y Bianca tocan mi espalda para que hable con él. Estando a su lado ambos nos observamos, es entonces que hago una sonrisa extremadamente burlesca.
– Estas hecho una verdadera mierda.
Joseph queda atónito por un instante, pero luego esboza una sonrisa.
– ¿Quién crees que fue el culpable?
– Eso es obvio, tu mismo por entrometerte donde no te llaman.
– Ninguna palabra de piedad para tu amigo.
– Claro que no, eso te ocurrió por ser un entrometido.
– Demonio sin corazón.
– Soy eso y peor.
– … Jajaja. – Reímos los dos.
– Veo que estás bien.
– No soy como tú. – Doy la media vuelta. – Recupérate pronto maldito inútil.
– Claro, amigo mío.
Ambos sonreímos y con ese simple intercambio de palabras demostramos la confianza que tenemos el uno con el otro.
– Es todo, no necesitamos preocuparnos por este par, dentro de máximo dos días ya deberían estar bien.
– No puedes estar tan seguro de eso. – Replica el sujeto más alto.
– Estoy seguro, puedo asegurarlo en base a sus ondas de mana.
Todos los integrantes del Lobo Negro sonríen a excepción de Liria.
– ¿He, en qué momento mediste sus ondas de mana? – Pregunta la enana de voz chillona.
– Ya me había olvidado de tu voz insoportable.
– ¡Como te atreves!
– Piensa en los pacientes, baja la voz imbécil.
– Eres mucho peor que antes. – Mira a su hermana. – Es como si fuera otra persona.
– Te sorprendes un poco por el cambio, pero te acostumbras muy rápido con su nueva personalidad. – Dice Guiliel con una sonrisa.
– ¡El cambio es muy brusco!
– Chillona deja de gritar. – Me observa con una mirada enfadada. – Mejor respondo a tu pregunta de inmediato. No es necesario tocar a alguien directamente para analizar su mana, basta con enviar una pequeña onda de mana y que esta rebote en el interior de un sujeto, así podrás analizar las variaciones que recibas, debes tomar una base y esperar un poco para enviar otro pulso, de esa manera comprenderás el estado de alguien.