El Gran Secreto De Artemisa

Capítulo 3

1 año después

Italia, positano 2019

Me dirijo hacia mi nuevo trabajo en el bar de alta sociedad y comienzo a limpiar, servir tragos y atender personas hasta que veo los mocosos que hicieron que me echaran de mi antiguo trabajo.

flashback

Estaba limpiando la barra cuando llegó un grupo de estúpidos adolescentes hormonales y se me acercaron.

-Ciao hermosa, tienes muy lindos tatuajes- me dice el imbécil que se encuentra frente mío tratando de entablar una conversación conmigo.

-Gracias, pero en ningún momento pedí tu opinión sobre los tatuajes de mis brazos y espalda- Respondo tajante y fríamente dedicándole una mirada de desagrado, pero el muy estúpido sigue queriendo hablar conmigo junto con sus amigos.

-¿Qué tal si tomamos una copa y nos divertimos un rato preciosura?- me dice y sus amigos le siguen el coro. Pero explotó cuando veo que me toca y toma del brazo rápidamente sacó la Glock 35 40 calibre que tengo amarrada con una cinta en el muslo oculta y le apuntó en la frente.

-Si no quieres que te pegue un tiro entre ceja y ceja maldito puberto de mierda, mejor alejate tu y tus amigos de mi y salgan, déjenme cumplir tranquila con mi trabajo, si no quieren que mande cada una de las partes de sus cuerpos a sus respectivas familias y no me vuelvas a decir preciosura- quitó el seguro de mi arma y afianzó más mi agarre en su frente y ejerzo fuerza hasta que veo como el pantalón del calenturiento se humedece al parecer ya no es tan hombre.

-Lárguense si no quieren dar su último respiro en este bar- les digo con una sonrisa cínica y una mirada oscura. Corren como si hubiesen visto al mismo diablo y chocan unos con otros en la salida del bar.

Después de eso mi jefe me llama y me despide lindo¿cierto? 

Fin del flashback

Ellos se acercan a la barra sin percatarse de mi persona.

-Dame un whisky doble fuerte con un limón y un poco de sal- Me dice el chico que no se ha fijado todavía en mi pero sus amigos me reconocieron , uno le toca con el codo y me señala con la mirada y él levanta la mirada y me observa con detenimiento mientras yo preparo su trago con una sonrisa cínica en el rostro y cuando al fin me reconoce abre grandes sus ojos que hasta pienso que se saldrán de órbita y me mira aterrado cuando le entregó su bebida.

-Joder!!! eres la chica del bar- me dice tomando su trago con las manos temblorosas y creo que se le caerá la bebida.

-Tranquilo no te haré nada puedes disfrutar tu noche calmado y sin miedo tu y tus amigos- le comento mientras limpio y atiendo otras personas.

Termino mi ronda y me dirijo a casa en el BMW X5 último modelo y veo la hora 5:00a.m, me dirijo al cementerio donde se encuentran mis tesoros y hablo con ellos hasta que mi reloj suena anunciando que son las 6:30 de la mañana, me despido y ahora si me dirijo a casa.

Al entrar a casa veo a nana ya despierta preparando el desayuno.

-¡Hola Alondra!- saludo a mi nana antes trabajaba en la casa de mis abuelos y no quiso dejar de trabajar y le ofrecí hospedaje y trabajo en casa y desde que mis abuelos murieron ella trabaja aquí.

Se preguntaran ¿Porque trabajas si tus abuelos te dejaron su riqueza? pues simple no quiero utilizar su dinero hasta que no sea requerido mientras tanto trabajo y gasto mi propio dinero.

Me dirijo a mi habitación y me detengo cuando veo dos cuerpecitos asomarse por la puerta de mi alcoba restregándose los ojos y arrastrando sus respectivas colchitas.

Me agacho con los brazos abiertos y ellos al verme corren hacia mi.

-Mamma- gritan mis niños antes de estrecharse contra mi pecho provocando que caigamos al piso, yo con sus pesos en mi pecho abrazándome fuerte.

Adrian y Alessandro Lombardi Binini son mis pequeños ángeles y los hermosos regalos que pude tener, ellos son mi debilidad, trato de ser la mejor mamá y trato de darles todo lo que se merecen.

Me levanto y me dirijo a la habitación de los gemelos con ellos en brazos y me acerco a la cama que instale para casos como estos me acuesto con ellos y los acurruco en mi pecho, ellos han mantenido sus ojos cerrados hasta que se acurrucan más en mi pecho y me miran con sus hermosos ojitos, uno de mis bebes tiene heterocromía tiene un ojito verde precioso muy poco visto como el de su progenitor mientras que el otro es azul como el mar embravecido y mi pequeño Adrián los tiene azul tormenta como los míos.

El pediatra de los gemelos me dice que tienen unos ojos únicos ya que sus colores son muy poco comunes, también me dijo que la heterocromía de Alessandro no era peligrosa, ni tendría riesgos con la vista del ojo izquierdo.

Mis niños tienen ciertas características físicas de su progenitor, pero su parentesco no es tanto como el que tienen conmigo.

-Mamma Oggi verranno a cercarci i nonni Luigi e Gabriella?- me preguntan (Mamma hoy vendrán los abuelos Luigi y Gabriela a buscarnos?)traducción

-Si, vendrán a recogerlos para llevarlos al parque, mientras mami termina de empacar algunas cosas- les contestó mientras los abrazo fuerte pero sin lastimarlos.

-Ahora vamos a bañarnos y cambiarnos que en 30 minutos sus abuelos vendrán a buscarlos- les digo y me dirijo al baño con ellos.

Al terminar de alistarlos preparó un bulto con ropa de cambio, biberones, pampers, sus juegos favoritos y la ropa que tendrán para cuando vaya a recogerlos mañana.

Suena el timbre de la casa y se quienes son ya que son las 8:10 de la mañana, al abrir abrazo mis pilares de vida fuerte y les beso las mejillas.

-Cómo están?- les pregunto cuando se adentran a la casa. -Estamos bien regina y tú y los pequeños como van?- me preguntan

-Estamos bien, mejorando en el papel de madre- les digo sonriendo cálidamente, se que no quieren que me vaya pero no puedo seguir recordando todo lo que me hizo daño.




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