CAPITULO XI "Porque Scott Lung es el asesino que buscamos"

Breve introducción:

-Si estas leyendo esto espero que no seas Scott Lung, en ese caso, que te follen, pero en el caso de que seas Morales o Sean, lee este libreto tu solo, aprendelo, memorizalo y plasmalo en tu mente exactamente como está aquí escrito, con pelos, detalles y toda la letra pequeña que el contenga. Haz de este libro tu best seller personal, no lo enseñes a nadie hasta que tu mismo estes convencido de lo que el contiene y dice y alejalo del propio Lung o como lo llamaré más adelante: el periodista infernal.

Usa las bien destacadas palabras del libro para aprender no para acusar, lo cual harás más adelante, cuando hayas revisado cada letra de él. Usalo para encarcelar a Scott Lung pues el intentará asesinarme, es más si estás leyendo esto es muy probable que ya esté muerto, en ese caso, suerte, y usa bien lo que tienes: investiga a ese capullo de la forma más discreta, pues si descubre algo, por muy mínimo que sea, te encontrará, te torturará y te matará como me ha hecho o hará a mi, nadie puede detenerlo más que tu y con este libro.

Haz justicia, y si eres tu el que lees esto, Scott, QUE TE DEN POR EL CULO.

Con esperanza,

el Comisario Weyland, encargado  y jefe general de la comisaria de Mellyng.

Jueves 3 de enero de 1997:

- Ha sido un día normal y tranquilo, primero la inspectora llegó, se instaló y se puso rauda manos a la obra, sin embargo Scott sigue con su extraño temperamento, hace muchas preguntas, lo cual no es del todo bueno; es como si ese chico estuviera dentro del caso, o quisiera estarlo, pero ¿por qué? Es un simple periodista, un periodista y nada más.

La mayoría de veces nuestros caminos en la investigación se separan y pierdo de vista a Lung, quizás tenga que echarle un vistazo más de cerca, esto me huele muy mal.

Debajo del texto del primer día que Weyland anotó en su cuaderno destacaba una frase de color negro intenso, a la que Jason se dirigió tras leer los parráfos previos. Decía así: "Cabe destacar que en los inicios de este libreto (la primera parte) se sospechaba e investigaba sobre Scott Lung desconociendo la culpabilidad de este, que no sería delatada hasta la segunda mitad del libro".

Viernes 4 de enero de 1997

- Todo es muy confuso y apenas he dormido, por eso me resulta extraño contar todo esto y saber si fue ayer u hoy cuando ocurrió: Scott plasmó su mano en la caja de muñecas, ¿por qué hacerlo? 

Según él fue para conseguir un mejor ángulo a la hora de fotografiar el fenómeno, si es así, todas sus huellas están en esa caja, y es más estupido de lo que creía.

Pero, ¿y si no es así? ¿Y si movió aquella caja por algo en especial? 

Puede que la caja tuviera algo que el no quisiera que vieramos, algún pelo o algo que pudiera delatarle. Veo pocos avances en el caso, pero Scott Lung me está ayudando a acabar con él asesino.

Jason cerró el libreto dejando entre medias, por la página en la que se encontraba, aquel mechón de pelo que tenía en su bolsillo y que llevaba a todas partes, y saltó hacía el salón de zancada en zancada para agarrar su cuaderno; entonces comenzó a anotar su propio resumen de "Porque Scott Lung es el asesino que buscamos".

Sábado 5 de enero de 1997

- En la comisaría el ambiente es turbio, la gente se altera y se cuestiona si él o alguien de su familia puede ser el siguiente en ser asesinado; recíbimos allí una llamada del laboratorio de analítica (se instalaron en un viejo solar que alquilé para ellos a un excelente precio): como toda la comisaria esperaba, las únicas huellas encontradas fueron las de Lung, pero yo, no satisfecho con la escasa información, me he dirigido hoy a la nave en busca de una respuesta.

Antes de partir Scott me preguntó hacía donde me dirigía, a lo que respondí con un seco "hacía mi casa", pero partí hacía el solar, quizá demasiado grande para un laboratorio llevado por cuatro personas cualificadas. Era espacioso y, como era de esperar, colores blancos, pálidos y verdes abundaban por doquier. 

Me recibió el más jóven de los cuatro, dejando así a los otros tres observando, de brazos cruzados, la caja de muñecas; la cual para mi sorpresa contenía huellas de Lung ¡en la parte contraria de donde él la tocó! 

El hecho mismo de encontrar huellas del periodista en un lugar que según Jason y Sean no había posado su mano, me ha hecho pensar que igual es Scott Lung, el periodista mudo, el asesino que andamos buscando.

Domingo 6 de enero de 1997

- Esta noche ocurrió un fenómeno extraño que merece ser nombrado y narrado con detalle, exactamente como Angela, la protagonista que sufrió los hechos, me lo ha descrito a mi. Procedo y como es así, desde el nombre de la inspectora de Angela Murkoff, la historia será contada en primera persona, metiéndonos en la piel de la jóven. Procedo:

"Media hora no bastó para darme cuenta de que esa noche no podría conciliar el sueño, fue por eso por lo que decidí dar un paseo, por eso y por el ensordecedor zumbido de un motor de coche viejo. Caminé unas pocas calles abajo siguiendo el retumbante sonido, el cual encontré al fondo de la calle paralela; el vehículo se encontraba ahí parado y, como deduje, era antiguo y de color negro y marrón claro en abundancia: fuera quien fuese la persona que conducía el vehículo, el cual avanzó calle arriba en cuanto me vió, no se dejaba ver, pues en el interior del vehículo no se lograba ver a nadie. Entonces, el coche se deslizó desde mi izquierda hasta perderse por mi derecha, sin apenas detenerse ante mí; el coche desapareció. 

Tras perder de vista el coche, el silenció inundó las calles del pueblo cuando una voz de mujer jóven ahogó un chillido de socorro; con arma en mano, me dirigí hacía allí lo más rápido posible donde pude ver el 36 de Pont Bery echando ardientes llamas de fuego sin detenerse ni un instante.