Vergil

Guardo la calma porque cuando Thomas sepa que tengo una fotografía con Lena, va a odiarme toda la vida. Hay una cosa que ellos no saben, al menos Dorian si y nos ha dicho que tenemos que ir a Liverpool, pero, la chica Wolfgang…vive en Londres. No sé en qué lugar, pero, un día la vi en un hotel. Me sorprendió que me reconociera…porqué yo no lo hice, me sentí sumamente incómodo. 

━⊰❖⊱━ 

Salía del elevador para ir en busca de mi habitación, llevaba una caja de cervezas claras, y me percaté que una joven de cabello negro, con una sudadera azul marino, me veía, la miré de reojo y por mis lentes oscuros, la observé, mientras nuestras miradas dejaron de cruzarse, seguí mi camino y ella también.  

Entre a mi habitación y me cambié de ropa porque ese día el trabajo era más temprano de lo habitual. Para mi desgracia nuestro objetivo estaba en ese hotel, llevaba días siguiéndolo para guiarlo a mis hermanos. Cuando regresé de completar la misión, fui por mis pertenencias. En el elevador estábamos varias personas esperando que bajará y en ese momento, escuché que una voz femenina me nombró. 

– ¿Vergil? –Dijo. – ¿Eres tú?  

Giré la cabeza viendo a la misma chica de la tarde, ahora con el cabello ondulado y mojado. Pasé unos segundos en silencio antes de deducir de quien se trataba. 

– Hola. –Saludé. 

– No me recuerdas ¿verdad? 

– No. – Me ruboricé.  

Ella sonrió un poco. 

– Disculpa. 

– Soy Lena, te conocí en el bar de Liverpool. – Comentó.  

Levanté la ceja y vi sus ojos azules. Algo me decía que ya había visto unos ojos parecidos a los de ella, porque eran sus ojos. 

–¡Oh! – Exclamé. – Lena…si, la chica detrás de la barra que nos regaló unas cervezas esa noche. 

– En realidad fue Joshua porque yo trabajaba ahí para tener dinero… 

– ¿Y qué haces aquí? – Entramos al elevador.  

– Vine a un recital. – Suspiró. 

– ¿Tu sola? 

–Mmmm no, pero mis amigos fueron a un bar… 

– ¿Por qué no fuiste? – Pregunté interesado.  

Tener una charla común y corriente era algo agradable cuando se presentaba. 

– Iré a verme con mi abuelo, tengo que subir a cambiarme, no me querrá con esta ropa. – Señaló su atuendo y reí. – Él vive aquí…y quiere que hablemos de mi estancia en la capital mientras estudio la universidad.  

Afirmé con la cabeza y después se presentó un silencio incómodo, no sabía que decir y no me gusta cuestionar tanto a las personas, por otro lado, recordé a mi hermano. 

– ¿Y Joshua? 

Ella me miró con un brillo en sus ojos y sonrió. Luego torció la boca y miró el suelo encogiéndose de hombros. 

– Iba a preguntarte lo mismo… – Respondió con un tono de voz desilusionado. – Hace un mes que no sé nada de él… 

– Así es…– «Yo no lo vi por cuatro años» – Desaparece mucho tiempo, pero, regresa, no te preocupes. – Dije tratando de animarla. 

– Gracias. – Me miró. – Y cómo agradecimiento, te daré una foto conmigo para que no te olvides de mí cuando vuelvas a verme. 

Comencé a reírme, las puertas del elevador se abrieron y los dos salimos en el mismo piso. Le dijo a una persona que pasó por el pasillo, que si podría tomarnos una fotografía con su móvil. Después me la pasó por bluetooth. Caminamos cada quien, hacia su habitación, íbamos en la misma dirección y al llegar ella corrió a su cuarto, la mía quedaba a lado. 

– Somos vecinos. – Dijo.  

Sonreí, no le iba a decir que ya me iba.  

– ¡Hasta luego! – Se despidió. 

━⊰❖⊱━ 

Agradecí que después de todo nunca preguntó que hacía en un hotel, si ella sabía que vivía en Londres. Y no sé por qué después de tanto tiempo busco la fotografía en los documentos de mi computadora. Espero que no entre Thomas…porqué nadie lo sabe. No cometeré el error de platicarle ese pasaje de mi vida como lo hizo Jarvis. Qué todos ya sabemos esa historia; después Lena vio a Joshua una semana posterior de topármela en el hotel.  

Miro la fotografía, su sonrisa de medio lado y el brillo de sus ojos azules es hipnotizador…