9

Belial hizo una pausa, una semana atrás fue su cumpleaños...Lena Wolfgang lleva una semana desaparecida y su amiga, murió por lo menos hace un mes. Parece que después de la muerte la escritora tiene control de tiempo, y si es verdad que hay vida después de la muerte, parece tener todo calculado. Se pregunta como estaría viéndolo Lena ahora. 

Esta parte de la novela, es algo que no esperaba...Wolfgang esta muerta igual que la autora de este manuscrito. Parece ser que ha predicho su propia muerte en párrafos y le gustaría saber cómo terminará la historia ¿Encontrarán a Lena? ¿Qué hará Joshua? ¿Zanna y Lena son la misma persona?  

Belial suspiró con dolor. El recuerdo del día que se enteró de la muerte de su amiga, cruzó su mente. 

 ━⊰❖⊱━ 

— ¡Nathan !— Exclamó con jubilo. — Es muy raro recibir una llamada de tu parte. 

Al otro lado de la línea hubo un silencio prolongado interpretándolo cómo una llamada que se marcó sola, mientras el aparato se movía de un lado a otro en el bolsillo de Nathan al caminar. Preguntó varias veces su nombre, pero, no obtenía respuesta. 

— Entonces...debo colgar... — Alegó el actor con una sonrisa de medio lado. 

— Lena... — Escuchó tras la línea. 

— Lena... — Repitió Belial. Otra vez silencio, un silencio que preocupó a Belial. Pensó lo peor en ese momento y más que nada, porque Nathan era el que llamaba. 

— ¿Está bien?, ¿pasó algo grave? — Insistió. 

— ¿Estás...grabando...? — Dijo en pausa. 

— No...¿estás bien? — Cuestionó.  

Fantaseó con la siguiente palabra del muchacho. “Murió” 

— Lena murió... — Articuló con dificultad. –No sé que hacer... 

Él tampoco sabía que hacer. Su mente estaba procesando las palabras que había dicho Nathan al otro lado de la línea. Se imaginó a la joven Lena, dormida profundamente en dentro de un ataúd, con su piel pálida, los labios morados, ojos cerrados y rostro endurecido, con una vestidura sencilla y sus manos una sobre otra en medio de su pecho a la altura de su corazón.  

Sintió un vacío en el estómago, un vacío que devoraba su estómago hacía adentro. Escuchó qué alguien mencionó su nombre, pero, al otro lado de la línea escuchó el susurro sepulcral de Nathan:  

— Es una pesadilla…  

— ¿Nathan? – preguntó Belial, mirando a la persona que lo había llamado. Levantó su mano y con los dedos pulgar e índice le hizo la seña, para que esperara. Al otro lado de la línea podía escuchar los sollozos de Nathan, que intentaba mirigarlos para poder hablar. 

— Tengo que colgar. – Concluyó el novio de Lena, cortando la llamada.  

Belial seguía con el móvil pegado al oído  y la persona, que estaba frente a él le hablaba para sacarlo del estado de shock en el que se encontraba. El actor miró a su agente que le hablaba una y otra vez, preguntándole si se encontraba bien; sin embargo, aquel hombre se sentía terriblemente mal. Nathan lo había dicho, es una pesadilla y él quería despertar, pero, ya se encontraba despierto en el set de grabación y su agente le llamaba porqué era momento de regresar a grabar la escena pendiente. 

— Tengo que volver a casa… Richard… – Atajó con dificultad. – Temo que está escena no quedará como se tiene planeada…– Dio unas palmadas en el hombro derecho de su agente y caminó sin mirar atrás, ignorando a quién le llamaba para regresar al set. Belial quería encontrar un lugar desolado y ponerse a llorar.