Capítulo 3

—Señor Linares, ¿qué hacemos?.-uno de los asistentes retrocede, alejándose del vidrio

El animal se mueve de manera furiosa dentro de aquella habitación, gruñe y muestra sus afilados colmillos. Está listo para atacar, sin embargo, la confusión también está presente en su mirada.

—Activen el collar.-responde el lider y mira al hombre que tiene el control.

El beta titubea y niega incapaz de presionar el botón. No quiere ser el primero en lastimar a tan hermosa y rara criatura.

—Su comportamiento es normal, recién despierta y debe de estar confundido. Señor Linares, no se precipite, el animal se calmará en unos minutos.-una mujer se acerca y bloquea el paso del Alfa, agarrando ella en control.

—Mantenga la...

Linares se lo arrebata, mira fijamente a la mujer y presiona con firmeza el botón. Sonríe felíz y gira a ver al animal, éste se retuerce por las descargas.

Los presentes en la habitación gritan y le reclaman al lider. Sin embargo, los minutos pasan y nadie impide sus acciones.

El felino cae inconsciente. Linares sonríe una vez más y le lanza el control a la mujer. Se retira del lugar y camina a paso apresurado hasta su oficina. Al llegar a su escritorio, saca la carpeta con la poca información que tienen del animal.

//INFORME//

Nombre Asignado: A45

Ser vivo encontrado en zona glaciar del norte, a unos 5000mt aproximado de profundidad.

Especialistas creen que su estado en congelamiento le permitió sobrevivir más de diez mil años.

(No confirmado)

Sus signos vitales, al igual que sus demás órganos, comenzaron a funcionar a los segundos de haberlo sacado del hielo.

Especialistas calculan que despertará en dos o tres meses.

Si bien, A45, tiene similitudes a la familia de los felinos, su altura y complexión física son mayores a los felinos encontrados hasta el momento.

CARACTERÍSTICAS FÍSICAS.

♦️Pelaje negro con marcas de tonalidad doradas opacas.

♦️Colmillos sobresalientes, afilados y firmes, con capacidad de perforar el hueso de cualquier otro ser vivo.

♦️Ojos color escarlata.

ESTADO FUERTE Y SALUDABLE, SIN HERIDAS.

.....

Linares cierra la carpeta de golpe y la lanza sobre el escritorio. Gira la silla y se levanta, cruza sus brazos y mira las fotos pegadas a un lado de la pared.

—-No sabemos nada de esa bestia, pero ahora que despertó podremos hacerle muchas pruebas. -susurra y una sonrisa se posa en su boca. Ya podía ver en su mente todo el dinero que ganaría gracias a ese animal.

....

—¿Ethan?- la anciana entra a la habitación y ve al Omega soltando un bostezo, se acerca y se sienta a su lado.

—¿Me puedes contar de dónde vienes, cariño?

Ethan asiente y frota su ojo derecho con el dorso de su mano. Su cuerpo ya no duele tanto y después de dormir en ese cómodo lugar, se sentía con más fuerza. Ya había contado muchas veces su historia, ¿por qué no hacerlo otra vez?

—Nací en un pueblo, no recuerdo su nombre. Mis padres son betas y mamá siempre dijo que yo también lo era, me lo afirmaba todos los días sin falta al despertar y cuando me iba a dormir. Papá no me quería, dijo muchas veces que no era su hijo y que sólo se quedaba por mamá.-sorbe su nariz y limpia una traicionera lágrima que baja por su mejilla.

—Estuve todo el tiempo en casa, no me dejaban salir ni asomarme por las ventanas. Mamá decía que un hombre malo robaba niños y por eso no dejaba que me mostrara.-sonríe y baja la mirada.

—Una noche desperté bañado en sudor y tenía mucho calor, llamé a mis padres gritando por el dolor en mi abdomen. Mi madre lloró mucho y me dijo que era un Omega, lo que me pasaba era mi primer ciclo de celo. Luego de que terminara, ellos dijeron que debía irme.-desvía la mirada y atrae las rodillas a su pecho.

—Unos hombres fueron a buscarme, mamá ya había preparado mi maleta... Mis padres, ellos me dieron la espalda. Al llegar aquí estaba aterrado, solo y perdido. Nunca había visto tantas personas. Durante estos meses, dormí dentro de la estación junto a tres chicas, quienes me explicaron muchas cosas. Ayer traté de conseguir empleo, pero se hizo tarde y cuando estaba llegando a la estación, un hombre apareció.-cubre su rostro con las dos manos y solloza, la anciana limpia sus propias lágrimas sin decir nada.

—Tra-traté de defenderme, lo juro, pe-pero era mas fuerte... Yo... Yo...-el nudo en su garganta impide que siga hablando.

—Está bien, tranquilo.-la Omega lo aprieta fuerte contra su pecho, acompañando al niño con su Ilanto y susurrando palabras tranquilizadoras.

Luego de unos minutos, la anciana es la primera en separarse. Acaricia la mejilla del pequeño y acomoda un poco su cabello.

—¿Intentaste pedir ayuda?.-pregunta bajito

—Me ignoraron, les conté lo que ocurrió, pero no me creían y me veían extraño.-responde cerrando los ojos y alejándose. Después de recibir tantas miradas de disgusto y desprecio, ya no se siente capaz de ver a alguien a los ojos.

—Nunca había visto a alguien que tuviera colores distintos. Son hermosos y tú también, pequeño. Dice con un tono.-lleno de cariño. Besa la frente de Ethan y sonríe.

Avergonzado por lo dicho, el Omega baja la cabeza con sus mejillas ardiendo.

—¿Quieres vivir conmigo, cariño? Te adoptaré como mi hijo. - Sonríe y el Omega asiente varias veces sin pensarlo mucho.

—Muy bien. Vamos a comer algo, estás muy delgado. Más tarde iremos al médico.-Se pone de pie y le tiende la mano.