1: el comienzo

Todo estaba oscuro, ni una sola luz que ilumine la sala solo oscuridad absoluta, hasta que aparece un rayo de luz en la sala y solo logro ver una sombra con una hacha en la mano luchando con quien parecía ser uno de sus mejores amigos: Mauro también habían unas personas alrededor suyo que estaban tapados por una sombra, empezaron a atacar a la sombra y lo único que hacia esa sombra era defenderse, hasta poder atacar a mi amigo Mauro, después la escena cambia, el piso desaparece y empiezo a caer, todo queda oscuro y lo único que se logra ver es una luz encima de toda esa oscuridad, hasta quedar en el vacío, ahora si todo estaba oscuro no veía nada, de pronto tuve la sensación de que esa caída nunca acabaría hasta que…

-Julio despierta-dice una voz.

-Julio ya se hace tarde para ir al colegio-dice otra vez.

 Me despierto asustado por la extraña pesadilla que tuve y le digo a mi madre adoptiva que ya me desperté y que me iba a vestir.

-Y por lo menos José ya se levantó-dije un poco molesto.

-José ya se fue hace tiempo ya que se cansó de estar esperándote-dice mi madre adoptiva al escuchar lo que dije.

Yo al escuchar lo que ella dijo me fui a bañar rápido, a ponerme mi ropa habitual de siempre una camisa negra con un chaleco negro, un Jean negro y unos zapatos negros, de hecho, todo mi armario estaba repleto de ropa negra, después de eso me lavé los dientes y me dirigí al colegio.

-espero que todavía no hayan cerrado las puertas del colegio todavía-dije para mí mismo.

En el colegio.

Narra José

-No puede ser Julio no va a llegar temprano y si llega otra vez tarde lo van a expulsar de este colegio-dijo José para sus amigos.

-Pero no podemos hacer nada por el-dijo Mauro preocupado.

Esto me preocupo un poco ya que Mauro era uno de los más inteligentes entre mi grupo y al saber que él no tenía una idea me desconcertó mucho.

-Y si lo llamamos para ver por donde esta-dijo Gustavo sonando sarcástico.

-Ay cierto se me había olvidado de que el siempre trae su celular al colegio-dijo José nervioso mientras que en mi mente me estaba regañando por no haber pensado algo parecido.

Narra Julio

Ring ring.

Agarre el celular y conteste la llamada sin ver de quien era.

-Si hable y será mejor que empiece a hablar rápidamente porque no tengo tiempo-dije gritándole al celular

-Julio ya es tarde por donde andas ya mismo cierran las puertas-dijo José con un tono de asustado.

Al escuchar que era José decidí calmarme y seguir con la llamada porque si seguía enojado seguramente hubiera tirado el teléfono al piso.

-ya estoy a unas 2 cuadras del colegio-dije un poco exhausto por haber corrido desde la casa hasta el colegio.

-está bien llega temprano o si no te van a expulsar del colegio-dijo José intentando darme ánimos.

-ya está bien nos vemos en el colegio-dije colgando la llamada.

Al ver que faltaba poco para llegar empiezo a correr con todas mis fuerzas y logré llegar a tiempo, me detuve a hablar con mis amigos: Gustavo de 19 años, Craig de 18 años, Mauro de 18 años y José que en unos días iba a cumplir 19 años.

José llevaba un conjunto como todos los días de color verde, un jean y unos zapatos cafés, tiene ojos cafés oscuros y un cabello negro.

Mauro llevaba puesto un conjunto nuevo que era una camiseta roja, un jean y unos zapatos negros, tiene ojos y un cabello negro.

Gustavo llevaba una camisa negra tapada por un abrigo azul, un jean café y unos zapatos rojos, tiene ojos azules y tiene el cabello rubio.

Craig llevaba lo mismo de siempre una camiseta azul, un jean blanco y unos zapatos cafés, tiene ojos verdes y un cabello castaño.

Ya era hora de ir a los salones mis amigos y yo nos encaminamos al nuestro pero cuando entrabamos veo que alguien le pega a mi amigo Craig, yo me quedo quieto detrás de él y lo amenazo para que lo suelte, pero él no me hace caso, yo lo agarro del hombro y el al darse cuenta de que era yo quien lo estaba amenazando, lo agarro de su camisa y lo amenazo con soltarlo desde el piso en el que estábamos a lo que él responde.

-no por favor déjame vivir te juro que nunca más vuelvo a molestar a nadie de su grupo-dijo llorando.

-está bien, pero si veo que te atreves a pegarle a alguien más de mi grupo de amigos te voy a aventar desde el último piso-le dije amenazándolo.

Para mi mala suerte la rectora nos estaba viendo y me dice que me van a expulsar si no hacia lo que decía.

En mi mente solo pasaron miles de cosas hasta que en unas de esas cosas me viene un recuerdo que quise no volver a tener en mi vida ya que era muy doloroso para mí ver como perdía a mis padres y todo lo que me importaba.