En la casa de la familia Graham
Rosa: como saben la magia no es un juego. Siempre deben de controlar sus poderes para que eviten perder el control, porque ninguna de ustedes puede perderlo.
Artemisa: estamos conscientes de que no podemos hacerlo y tampoco podemos desear algo para que no se haga realidad. Eso fue lo que me pasó a mi.
Rosa: en la historia de la magia y la hechicería está completamente prohibido. Pero siento que hay algo diferente entre ustedes que todavía no puedo explicar.
Diana: el destino los unió de esa manera y para el amor no existe ninguna explicación. Debemos dejar tranquila a mi hermana para que disfrute su felicidad y ella debe de sentir que todo lo que está viviendo es de verdad y no una simple ilusión.
Artemisa: lo que estoy viviendo parece un hermoso sueño. Aunque también se puede considerar así, porque lo conocí de esa manera y desde ahí no he dejado de soñar con él.
Rosa: tendrás tu historia de amor. Además, nosotras solo estaremos un tiempo en nuestro mundo y después regresaremos, ya que veremos lo feliz que serás.
Artemisa: muchas gracias por no dejarme sola. Este mundo sin ustedes no sería lo mismo, pero estoy segura de que él es mi verdadero amor y sobre todo mi corazón me lo dice.
Rosa: antes de dormirse necesitan practicar un poco su magia. Porque tienen poderes ocultos que todavía no han descubierto y si lo hacen más seguido lo descubrirán.
Ellas se despiden de su abuela para dirigirse a sus recámaras. Artemisa cuando llega toma asiento para decir tengo el poder de la vida y tiene el poder de controlar el agua. Pero a través de sus manos empieza a fluir el agua cuando empieza a cantar, ella al tocar sus flores que estaban marchitan vuelven a florecer y ese era el único poder que le gustaba. Ella deja de practicar su magia y se levanta de su asiento, ella toma su pijama que estaba en su cama y a los pocos minutos se la pone, Artemisa se acuesta en su cama para después quedarse dormida.
En el sueño de Artemisa
Leonardo: mi hermosa prometida es una persona demasiado especial. Eso lo puedo percibir con solo verte y el día que pida formalmente tu mano en mi matrimonio te daré tu anillo de compromiso.
Artemisa: entonces estaré esperando a que me lo des. Ahora quiero que me digas que te pareció haber conocido a mi abuela y también a mi hermana, solo quiero que me digas la verdad.
Leonardo: son personas que te quieren mucho. Pero la manera de cuidarte la esperaba, ya que estoy seguro de que tu familia quiere tu felicidad.
Artemisa: ellas me quieren y nos tuvimos que adaptar a esta ciudad cuando mi padre nos mandó. Además, vivir aquí fue lo mejor porque tuve la oportunidad de conocerte.
Leonardo: yo me siento afortunado de haberlo hecho. El verdadero amor únicamente lo tenía que encontrar a tu lado y siento que mi corazón te reconoció.
Artemisa: en la vida existen amores inolvidables y me pregunto si el nuestro será así. Debe de entender que no puedo cuestionarte por todo y mucho más por lo que no entienda.
Leonardo: sabes que puedes preguntarme por todo. Porque estaré encantado de responder las dudas que tengas y me imagino que las tienes.
Artemisa: no entiendo algunas cosas ya que son desconocidas para mi. Solamente que no es lo mismo leerlo en los libros si no logro entenderlo.
Leonardo: si te gusta leer te regalaré todos los libros que quieras. Necesito saber que tipo de lecturas lees para poder regalartelos y me puedo imaginar que te gustan las novelas románticas.
Artemisa: me gusta mucho ya que me hace soñar con el amor. Aunque tú representas todo lo que siempre había querido y me doy cuenta que no debí de haber dicho eso.
Leonardo: mi prometida puede hablar conmigo de todo lo que quiera. Recuerda que estoy aquí para escucharte y sobre todo soy el único que puede entenderte.
Artemisa: tendré la vida que siempre había soñado contigo. Me gustaría que nuestro matrimonio fuera hermoso y se que lo tendré gracias a ti.
Leonardo: por supuesto que lo tendrás. Porque haré realidad los hermosos sueños que tienes y nuestro amor será para siempre, así que lo único que nos espera es ser felices.
Artemisa: llevamos poco tiempo de conocernos y ya me convertiste en tu prometida. Solamente que al principio me parecías un hombre demasiado serio y sobre todo me daba la impresión de que te molestaba cuando aparecías en mis sueños.
Leonardo: mi personalidad es así delante de los demás. Jamás pensé que me vieras de esa manera, pero seguramente no sigues pensando lo mismo.
Artemisa: me has demostrado ser completamente diferente. Debemos de despedirnos, porque muy pronto amanecerá y será otro día más.
Leonardo: tan siquiera es nuestros sueños estamos más tiempo juntos. Además, me gustaría que esto pasara en la vida real y no nada más aquí.