capítulo 17

Leonardo: debemos de casarnos, mi Artemisa. Ahora que hemos llegado hasta aquí eso será lo que haremos y solo faltaría unos cuantos minutos para que seas mi esposa.

Artemisa: entonces necesitamos casarnos antes de que mi padre aparezca. Porque siento que él no tardará en aparecer y sobre todo debemos de hacerlo.

Leonardo: nosotros no tuvimos otra opción de hacerlo así. Pero lo único que lamento es no darte una buena boda y eso lo corregiré más adelante.

Artemisa: me imagino que tendré una boda normal después de esta. Me gustaría tener bonitos recuerdos de ese día y por el momento nos tomaremos nuestra primera fotografía juntos.

Leonardo: no solo sería una sino que serán todas las que tu quieras. Será mejor que nos acerquemos para que el juez empiece a casarnos.

Él toma la mano de su prometida y a los pocos minutos estaban enfrente del juez y se sorprende al ver que era un amigo suyo que no había visto después de mucho tiempo. Leonardo le dice que puede empezar a casarlos y así lo hace.

Matías: sabía que al verte no sería una boda normal, así que te vas a casar con esta joven. Aunque a simple vista se ve diferente y estoy seguro de que te enamoraste de ella por esa razón.

Leonardo: sabes que la única razón por la que me casaría es porque estoy enamorado. Nada más que al fin la encontré y el siguiente paso es casarme con ella.

Matías: te ves feliz a su lado. Solamente que esta es la primera vez que te veo de esta manera. Pero como eres alguien impaciente comenzare a casarlos, Leonardo Reynolds O'Brien aceptas a la señorita Artemisa Graham Davies como tu esposa para amarlo y respetarla, en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe.

Leonardo: si, acepto. Porque ella es la mujer que siempre había esperado toda mi vida y ahora que está a mi lado prometo amarla para siempre.

Matías: Artemisa Graham Davies aceptas a Leonardo Reynolds O'Brien como tu esposo para amarlo y respetarlo, en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe.

Artemisa: si, acepto. Porque nos amamos y eso es realmente importante para mi, así que yo también prometo amarlo como mi esposo.

Matías: recuerden que cuando el amor es duradero ese sentimiento nunca se termina. Ahora los declaro marido y mujer, además llegó el momento de que beses a tu esposa.

Él se acerca a ella para besarla y como era su primer beso después de que se casaron tenías que ser hermoso. Leonardo se separa de ella cuando termina de besarla. Artemisa de repente escucha la voz de su padre en su mente y le dice que vaya a la casa de su abuela, ellos se despiden de Matías para salir del registro civil y cuando llegan a su auto la ayuda a subirse para hacerlo también.

En la casa de la familia Graham

Ezequiel: estoy seguro de que hicieron todo esto para distraerme. No puedo creer que Artemisa se haya casado así, ella siempre respeta mis decisiones y esto lo hizo para que nadie lo separará de él, pero en nuestro mundo esto no hubiera pasado nunca.

Diana: yo no sabía lo que tenía pensado hacer mi hermana. Sabes que no deberías buscar culpables y si se caso no podrás hacer nada, ya que será feliz a su lado, será mejor que no te hagas presente en donde esta ella, porque este no es tu mundo.

Ezequiel: me he estado controlando todo este tiempo para no ir a buscarla. No puedo creer que se haya casado sin que yo lo autorizará, esto no se quedará así.

Rosa: no dejaré que hagas nada. Ahora cuando ellos lleguen debes de estar feliz por su boda y sobre todo no quiero que se den cuenta de que estas molesto.

Ezequiel: me estas diciendo que los felicite por lo que hicieron. Mi hija a partir de este día pertenecerá a los dos mundos y mis nietos serán mestizos.

Rosa: aunque digas eso vas a querer a todos tus nietos. Recuerda que si quieres vas a tener la oportunidad de verlos crecer y eso no hiciste por tus hijas.

Ezequiel: no estuve presente en sus vidas, pero si estuve al pendiente de ellas. Eso lo sabes perfectamente y si quieres que esté tranquilo cuando lleguen no deberíamos de hablar.

Victoria: usted más que nadie conoce el carácter de su hijo. Él jamás se tranquilizará y más si ve entrar a nuestra hija al lado de su esposo.

Rosa: no es nada bueno provocarlo. Ezequiel cuando se enoja pierde el control y tú cómo eres la esposa de él puedes evitar que eso pase.

Victoria: tengo ese poder sobre su hijo porque me ama. Pero también las quiere a ellas y por más enojado que esté no les haría nada.

Rosa: el debe de hacer lo correcto. Seguramente no va a querer dejar de ver a su hija, Artemisa puede ir y venir a nuestro mundo las veces que quiera hacerlo, espero que no impidas que lo haga.

Ezequiel: no pienso hacer eso. Además, también nosotros podemos venir a verte y quiero enseñarles a mis nietos como deben de utilizar su magia, aunque no tengan el mismo poder al ser mestizos.