CAPITULO 4
Jeremy recorrió con la mirada el lugar donde Ellie lo llevo evitando su mirada.
Ella lo miraba con insistencia desde que se le escapo el... ¡No! de manera tan sentida.
No podía ni imaginarse a Ellie en brazos de alguien mas que no fuera el.
Ella era su sirena, su mundo mágico.
Ellie nado de un lado a otro sin saber que hacer.
Su situación era complicada.
Si regresaba a palacio temía que su padre la encerrara y la obligara a casarse con ese tritón que el creía digno de su hija.
Y si se quedaba con su humano, temía que su padre los descubriera y lo matara.
―Ellie... ¿que harás?
Ellie lo miro sin saber que responder.
Sentía apego por ese humano, pero no podía quedárselo como pensó porque su vida corría peligro.
―Tendré que llevarte a donde te puedan encontrar humano Jeremy Milles.
¿Separarse de Ellie?
¡No podía hacer eso!
―Aun no...quiero...yo quisiera conocer mas tu mundo― no se le ocurrió nada mas que decir.
Ellie lo medito un momento y luego sonrió.
―Humano Jeremy Milles, ¿quieres conocer mi mundo?
―Si
― Bueno...cuando padre se calme lo haremos.
Jeremy sintió como si fuera a morir de la felicidad, cada momento con ella era mágico y no quería perderse nada.
Ellie miro a Jeremy y le dijo seria.
―Pero tendrás que mantenerte muy cerca mío porque el océano es muy peligro, mucho mas que tu fuego.
Jeremy pensó que si ella supiera de su fuego interno se asustaría pero tenía que ser muy cuidadoso con eso para no asustarla.
Sin embargo era difícil contenerse, era demasiado hermosa, e inocente el sueño de cualquier hombre.
Desvío la mirada del cuerpo flotando en las aguas azules y suspiro, eso seria muy duro sin dudas.
―Humano Jeremy Milles... ¿estás bien?― pregunto Ellie― otra vez tu rostro tiene ese color extraño.
Jeremy se dijo que su rostro mostraba lo que su boca callaba con fuerzas.
―Estoy bien― murmuro
― ¿Porque tu rostro cambia de color?
Jeremy rió
―Por mis malos pensamientos...
―Malos pensamientos― se intereso― ¿y cuáles malos pensamientos son?
―No puedo decirte pues te asustaras
―Yo no le temo a nada― dijo orgullosa de si― ¡soy una princesa y una sirena!
Jeremy la observo por un momento y luego le sonrió.
―Lo se...no hablemos mas de esto ¿de acuerdo?
Ellie lo miro y asintió.
― ¿Tienes hambre humano Jeremy Milles? Puedo traerte algas si lo deseas.
―No te preocupes, comí antes de que tu padre se enfadara... ¿crees que le durara mucho el enojo?
―No lo se― se encogió de hombros a veces le dura bastante y otras no...pero creo que esta será de las que duran.
― ¿Y que haremos mientras tanto nosotros?
―Nos quedaremos aquí claro.
Jeremy se puso pálido.
Una cosa era resistir durante un tiempo pero otra era hacerlo de manera constante.
¡No podría hacerlo!
― ¿No piensas regresar a tu hogar entonces?
―Por ahora no...el me obligara a contraer matrimonio como hizo con mi hermana Alani― movió la cabeza con fuerza― yo no quiero estar cautiva en mi habitación hasta que eso suceda... ¡yo quiero ser libre!
Parecía que se pondría a llorar y esto inquieto a Jeremy, no le agradaba ver llorar a las mujeres y ahora mucho menos a su hermosa sirena.
Así que se sentó cerca de ella y le sonrió, la miro y volvió a notar lo poco común de la perla que llevaba en el cuello.
―Que bonita es esa perla, nunca antes he visto una de esas.
―Es que esta perla es especial― le dijo Ellie tocándola con los dedos.
― ¿Especial, como?
―Te contare una historia de mi gente...
Jeremy la vio acercarse a el y apoyar la cabeza en la roca a su lado.
No podía dejar de admirar su bella y larga cola, su espalda desnuda y su cabello de un negro profundo.
No podía negarlo, el estaba hechizado por ella, estaba enamorado de esa preciosa criatura de los océanos.
―Hubo un tritón que se enamoro de una humana, no es lo que suele suceder pero de vez en cuando si― rió bajo y sus ojos de volvieron de color rosa como cuando el la tomo de la muñeca en la isla para evitar que se quemara.
―Esa humana era muy hermosa y tenia una sonrisa que cautivaba, parecía una sirena sin la cola y el triton no pudo evitar sentir amor por ella, pero eran muy diferentes, el pertenecía al océano y ella a la tierra, un mundo los separaba...
Ellie lo miro a los ojos fijamente y Jeremy se estremeció.
Ella era todo lo que jamás imagino y le estaba contando una historia que podría ser la de ellos, solo esperaba que no tuviera un final trágico para los amantes porque eso lo desalentaría por completo.
― ¿Que sucedió con ellos?― pregunto de pronto el final de su historia era demasiado importante para el.
―El tritón iba cada año en la misma fecha hasta un lugar donde ella pasaba el verano con su familia solo para verla, quería hablarle pero temía asustarla, así que solo se limitaba a mirarla en la distancia.
"En cierta ocasión ella salio a navegar con sus padres en mar abierto, hubo un problema en la nave en la que estaban y este se lleno de eso que tu llamas fuego...fue horrible según supe...― se estremeció― todos se lanzaron al mar para salvar sus vidas, pero la joven al parecer no sabia nadar así que el tritón fue hasta donde ella estaba y le dio el aliento de la sirena para que lograra salvarse, así fue como se conocieron por fin después de que se salvo del naufragio ella paso un tiempo con el tritón fascinada con la naturaleza del, incluso se entrego a el y creyó amarlo pero al final decidió irse con su gente pues no era feliz con el bajo el mar. Ella extrañaba demasiado su tierra y su gente, ella deseaba regresar a su mundo así que después de dar a luz a la niña que nació de ese amor se fue sin mira a atrás, sin fijarse en lo que abandonaba. Desde entonces esta prohibido estar con humanos ya que ellos no tienen amor con el corazón".