CAPITULO 8
Samy estaba emocionada porque ya había llegado la noche y todo en la casa estaba silencioso, eso significaba que estaban durmiendo y ella moría por ver la cola de Ellie.
¡Una sirena de verdad en su casa!
¡Que emoción!
Se levanto despacito para no hacer ruido, fue hasta la habitación de Ellie quien ya la esperaba sentada en la cama y la tomo de la mano para llevarla al exterior, donde estaba la piscina.
Ellie le sonrió y comenzó a sacarse la ropa.
Samy la miro un poco colorada pero Ellie le dijo que no se avergonzara, que todas las sirenas en el océano siempre estaban así.
De todos modos, Samy no la miro hasta que escucho el ruido del agua.
Entonces abrió los ojos que había cerrado con fuerza y miro hacia la piscina.
Por un momento se asusto porque no veía nada, entonces la vio.
La cola de Ellie estaba flotando por fuera mientras la sirena tenia el cuerpo sumergido.
Samy se acerco al borde y miro mejor.
Entonces la vio completa.
Ellie estaba metida en el agua y su cola era larga, de colores hermosos y nadaba feliz de un lado para otro.
El corazón de la niña salto de felicidad dentro de ella y suspiro encantada.
¡Era una sirena!
¡Una sirena nadaba en su piscina!
― ¡Oh, Ellie es hermosa!― le dijo Samy emocionada hasta las lagrimas.
― ¿Quieres que te muestre algo realmente genial?― le dijo Ellie y la niña asintió― entonces quítate la ropa y métete en el agua conmigo.
Samy dudo un momento pero al fin lo hizo.
Se metió en la ropa interior.
El agua estaba un poco fría al principio pero como hacia calor al final le gusto y se sintió bien.
Entonces Ellie le tomo el rostro pequeño y acerco su boca a la de la niña, esta se atemorizo pero cuando Ellie soplo en sus labios se relajo.
―Mete rápido la cabeza bajo el agua o te faltara el aire― le recomendó Ellie.
Samy algo dudosa así lo hizo conteniendo la respiración, pero luego de un momento en que le falto el aire quiso salir al exterior solo que Ellie la tenia bien sujeta para que no lo hiciera.
Samy se aterro pensando que se ahogaría sin aire sin embargo después de varios minutos se dio cuenta de que no era así, que podía respirar con facilidad, miro a Ellie y ella estaba sonriéndole.
―Es el aliento de la sirena, hace que puedas respirar bajo el agua.
―Y también puedo hablar― replico emocionada la niña― ¡esto es genial!
― ¿Creíste que quería ahogarte?― rió Ellie y Samy asintió― para nada eres mi mejor amiga humana, y te quiero mucho
Samy nado con Ellie durante mucho rato, reían y charlaban olvidando que debían mantenerse en silencio para no ser descubierta.
Ellie estaba tan contenta al poder volver a nadar que incluso olvido que ningún humano podía verla convertida en sirena.
Entonces las luces del patio exterior se encendieron y ambas miraron hacia arriba.
Estaban sumergidas en el agua y el rostro borroso de su tío se dibujaba en las olas que creaban al nadar.
― ¡Mi Tío!― replico Samy y salio al exterior.
Ellie la tomo de los pies y volvió a meterla bajo el agua.
― ¡No salgas así o te asfixiaras!― se acerco a ella y volvió a soplar en sus labios entonces la dejo salir fuera.
Samy miro a su tío quien estaba en shock mirando fascinado la larga cola de Ellie sin saber que decir.
Ellie nado hasta el borde de la piscina y apoyo la cabeza allí y lo miro.
―Puedo explicarlo― dijo pero Samy ya estaba fuera y le sonreía a su tío.
― ¡Tío es una sirena! ¡Una sirena de verdad!
Jeff camino como hipnotizado hasta el borde de la piscina y miro atentamente la cola de Ellie y su hermoso cuerpo desnudo, de pronto reacciono y quiso apartarse pero se le enredaron los pies y termino dentro de la piscina.
Ellie nado hasta el y lo tomo de la mano mirándolo fijo.
― ¿Estás bien Jeff?
Este no era capaz de decir una palabra, estas estaban congeladas en sus labios y sus ojos no se apartaban de su larga cola de sirena.
―Lo siento...lamento haberte asustado― decía Ellie.
Entonces Jeff le toco el rostro con un dedo, hizo esto varias veces hasta que Ellie se quejo.
― ¡Oye eso duele!
― ¿Eres real?... ¿o es que ya me volví loco y estoy alucinando?
Ellie comenzó a reír y se aparto un poco de el, se hundió hasta el fondo y dio un gran salto mostrándole toda la extensión de su figura de sirena.
― ¡Oh por dios! ¡Eres real!― replico Jeff sin aliento― si eres una sirena, claro eso explica todo lo que sucedió desde que te conocí― hablaba solo― el agua con sal, la comida, el que no conocieras nada...ay dios... ¡eres una sirena autentica y estas nadando desnuda en mi piscina!... ¿que hago ahora?...yo no se que...
Ellie se acerco a el y le toco el hombro sonriendo.
―Cálmate, creo que estas un poco conmocionado.
― ¿Conmocionado?... ¡eres una sirena!
―Shhh... ¡por favor no lo digas tan fuerte!
―Pero...
―Salgamos para que te explique...
― ¡No!
Ellie lo miro asustada ¿que significaba ese no tan efusivo?
―Quédate en el agua...― se sonrojo un poco― espera a que yo salga y luego tu...es que no estas...tu estas...
Ellie elevo una ceja y Jeff la miro con ojos lleno de tensión.
Entonces Ellie comprendió.
El se refería a su desnudes.
― ¿Porque los humanos siempre se ponen así al ver a una sirena?...sabes, ¡en el océano no sirve de nada la ropa!
―Lo se...pero yo...es que eres tan...ufff......
Se paso la mano por el cabello húmedo y desvío la mirada.
―Eres muy bella...― confeso al fin hundiendo la cabeza en el agua, para ver si el frío de la piscina lo calmaba pero fue un error ya que el cuerpo de ella estaba sumergido bajo el agua y el pudo apreciar su belleza por completo.
Abrió la boca consternado y el agua entro a sus pulmones obligándolo a salir tosiendo porque casi se ahogaba solo.
Ellie se rió de el y nado hasta el borde de la piscina para salir de todos modos.