Capítulo 6 : Todas las personas tienen secretos

Jessica

Dormía tranquilamente en mi cama, cuando de pronto, el odioso ruido de una sirena invadió mis oídos, me levanté de golpe cuando comenzaron a tocar mi puerta .

— ¡Jessica despierta! Vete a buscar la alarma —Dijo mi padre.

—Que desgracia —.Me levanté de mala gana y abrí la puerta, cuando lo hice vi a Terry bajar las escaleras con un bate en la mano, el odiaba esa alarma tanto como yo, busqué mi celular y me puse los audífonos, estaba muy cansada como para buscar una alarma por toda la casa, dejé que la  música de Shawn Mendes invadiera mis oídos, fui a la cocina y hoy quiero cereal con leche, saqué el cereal de la despensa, ahora el problema era el plato, el estante era muy alto para mi , desventajas de no ser tan alta, me puse de puntillas para intenter alcanzarlo y cuando estaba a punto de agarrarlo, unas manos lo hicieron por mí y me quitaron los audífonos .

—Buenos días linda —Dijo Joshuad

—Hola...Ya veo que apagaron la alarma.

—Sí y Terry destruyó la sala en el proceso.

— ¿Dónde estaba?—Pregunté mientras servia mi desayuno, dandole la espalda. 

—En mi habitación.

—Guao, ¿quién lo diría?

—No fue agradable ver a Terry entrar a mi habitación con un bate.

—Ah—Dije comiéndome mi cereal.

—Ah—Dijo Joshuad.

— ¡Buenos días! ¿Cómo amanecieron?—Dijo Terry sentándose en el desayunador.

—Bien —Dijimos Joshuad y yo al unísono.

— ¿Qué hay de desayunar?

—Abre la nevera y averígualo —.Le respondí,

—Buenos días mis niños, ¿Cómo amanecieron? —Dijo Irina, entrando a la cocina.

—Bien.

—Me alegro, ¿Qué quieren de desayunar?

—Yo ya estoy desayunando, gracias—.Respondí.

—Yo quiero hotcakes —dijo Terry.

—Está bien déjame prepararlo —Salí de la cocina y me dirigí a la habitación, hoy es viernes y por desgracia tengo que ir al colegio, estaba buscando mi uniforme cuando alguien entró a mi habitación.

— ¿Qué quieres?

— ¿Estas molesta conmigo?—Preguntó Joshuad.

—No, ¿Qué te hace pensar eso?

—Amaneciste muy borde conmigo.

—Claro que no, apenas me estoy levantando.

—Entonces son imaginaciones mías.

—Así es.

— ¿Por qué no me miras mientras te hablo?

—Ay no Joshuad, ¿te acuerdas lo que te dije ayer sobre que nuestros padres llegaron y tienes que dejar de venir a mi habitación?

—Sí y yo te dije que eso no iba a ocurrir, todo está claro.

Bueno, no le voy a mentir, si estoy un poco borde con él, todo lo que está pasando entre nosotros me ha puesto a pensar si lo que sentimos es real.

—Joshuad quiero preguntarte algo, ¿si lo hago me dirás la verdad?

—Si

— ¿Tu me escondes cosas?

—Sí, todas las personas tienen secretos.

—Pero algunos de esos secretos... ¿me pueden hacer daño?

—Yo nunca haría algo que te dañara Jessica —Lo abracé, desde que lo conocí una series de sentimientos han nacido en mi interior y tengo miedo de dejarlos fluir completamente.

—Bien, ¿Me llevarás al colegio hoy?

—Si así lo deseas, por supuesto. —

Después de sacar a Joshuad de mi habitación, me cambié, busqué mi mochila, me despedí de mi familia y Joshuad me llevo al colegio.

Pasaron las horas, terminó el colegio, mi padre me fue a buscar y de un momento a otro estábamos en el colegio de Terry, esperando a la familia Gutiérrez para la reunión.

—Ay no, la siento, ya viene —Dijo Irina imperactiva. 

—Amor, tranquila sólo será una reunión después te prometo que no las vas a volver a ver jamás —Le dijo mi papá.

—Ahí vienen —Mire hacia donde Irina veía y vi a una mujer alta , con cuerpazo de revista, extensiones a más no poder, del brazo de un hombre flaco, cabello rizado, moreno y con esmoquin , más los dos demonios que tenían por hijos atrás.

—Irina cuanto tiempo, ¿Cómo has estado? —Dijo la que se supone que es la némesis de mi madrastra.

—Marisol, Federico, déjeme presentarle a mi esposo Henry, y mi hijastra Jessica, ya a Terry y Joshuad los conocen—dijo Irina sonriente.

—Te volviste a casar y no nos invitaste a la boda.

—Fue algo muy íntimo y familiar, no digo que ustedes no sean de mi familia, al menos Federico si lo es .

—¿Todavía me guardas rencor por cansarme con tu mejor amigo?—preguntó Marisol haciendose la inocente.

—No, cada quien cava su tumba de la manera que quiere— ¡Boom! Mi madrastra sabe responder.

—Buenos días —Dijo la secretaria de la institución —Veo que ya llegaron las dos familias, pasen a la dirección la directora los están esperando —Marisol, Federico, Irina, los dos demonios, Terry y mi papá entraron a la dirección, Joshuad y yo nos quedamos afuera.