El hermano de mi hermano (completa)

Capítulo 33 : No te debes juntar con él *Capítulos finales*

Terry                                                                                 

No puedo ser novia de alguien que solo piensa en su felicidad.

Las palabras de Candy no dejaban de dar vueltas por mi cabeza.

Ya no tengo hermana, ni novia, ni mejor amigo, buen trabajo Terry, buen trabajo.

Le envié un mensaje a Trent

¿Estás? Entregado.

—Hijo, ¿por qué no comes?

—No tengo hambre mamá.

— ¿Paso algo con Candy? , no salió nada feliz de aquí.

—No fue nada, todo está perfecto.

— ¿y con David?, tiene varios días que no viene.

— No vale la pena que venga, está casa se volvió un caos desde que descubrí a Jessica y a Joshuad…ya nada será igual.

—Ay hijo, no puedes dejar que eso te afecte así, estamos haciendo todo lo posible para recapaciten, pero lamentablemente nada de lo que decimos parece ser suficiente.

—Inténtelo con más fuerza —mamá acarició mi cabello.

 —Corazón, estamos haciendo lo posible, pero no podemos evitar que se vean fuera, ni cortarle la comunicación a Jessica.

— ¿y qué haremos? ¿Dejar que sigan?

—Tu papá está pensando en mandar a Jessica fuera del país con su tía.

Escuchar eso no me agradó mucho.

—Fuera del país.

—Italia o España tal vez.

—Oh.

—No te agrada la idea ¿cierto?

—Si eso es lo que hay que hacer para que no estén juntos por mi se puede ir ahora mismo.

—Ay Terry, eres pésimo mentiroso —Mamá me dio un beso en la frente y se levantó de la mesa —iré a ver si tu hermana ya quiere comer.

Miré el puré de papas con queso que tenía en frente.

A pesar de todo Jessica es mi hermana, no puedo odiarla y no quiero que se vaya pero tampoco puedo aceptar que sea novia de mi hermano.

Todo esto es una jodida mierda. La pantalla de mi celular se encendió era un mensaje de Trent.

Para ti siempre estoy.

Rodeé los ojos divertido, leer mensajes así de Trent aún se me hacía muy raro, como podía decirme cosas así cuando años atrás todo lo que recibía era odio.

¿Quieres jugar hoy?

Solo si me cuentas que sucedió hoy, como para que decidieras escribirme.

Aún no confío del todo en ti, Trent.

Por favor, Turrón, dame una oportunidad.

Terry, me llamo Terry, bájale a tu coqueteo, tengo novia.

Y por qué no le vas a escribir a ella.

Trent, solo quieres jugar videojuegos, Quieres que seamos amigos ¿no?

Puede ser…contigo quiero muchas cosas.

Trent.

Ok, OK. Iré prendiendo la computadora, me avisas cuando estés listo.

Subí a mi habitación.

Cuando Jessica vino histérica a gritarme por no aceptar su relación, estaba hablando con Trent desde la computadora y él me preguntó si estaba todo bien, le dije que no, no quería estar en mi casa en ese momento, el dijo que estaba cerca y que podía recogerme, terminamos en su casa y me di cuenta que no es tan malo, mi mamá al saber mi paradero se puso histérica  y ahora estoy castigado.

Aún no sé si de verdad le gusto a Trent, no sé si de verdad cambió o solo está jugando conmigo, pero como las dos personas que más quiero están molestas conmigo y no puedo contarle lo que pasa a Sofía, no me queda de otra que hablar con él.

Empecé a organizar mi habitación, tengo que dejar de alterarme tanto o no tendré donde dormir, revisé debajo de la cama y encontré un suéter rojo, sonreí, este suéter no es mío, es de David.

Miré por la ventana la luz de su cuarto está apagada, ¿estará despierto? sería buena idea devolverle su abrigo.

Le envié un mensaje.

Tengo uno de tus abrigos, ¿puedes bajar al patio para devolvértelo?

David lo respondió enseguida.

Ahora bajo. Visto

Volví a mirar por la ventana, la luz de su cuarto se encendió.

Cogí el abrigo, está todo polvoriento y no sé si huele mal, pero no importa lo importante es devolverlo a su dueño.

En el pasillo me encontré con Jessica, nos miramos y ninguno de los dos dijo nada, me duele que ahora estemos así pero sé que ninguno de los dos cambiará su postura, al menos yo no, soy demasiado orgulloso para hacerlo. 

En el patio el aire frio impacto con mi rostro, se sentía bien, frio pero confortable, las luces del patio estaban encendidas y pude ver a David detrás de la valla, llevaba un poloche gris con unos pantalones deportivos negros, su pelo estaba rizado en la parte de adelante y las ojeras de su rostro se notaban más que sus ojos.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.