El hombre lobo del bosque oscuro

04

Desperté y sorprendentemente estaba en mi cama, la ventana estaba intacta, y yo estaba cambiada, mi ropa no estaba rota.
Trate de solo olvidarlo, pero no podía, era muy difícil.
Puse música relajante y intente dormir un poco, pero los malditos pensamientos no paraban y me causaban jaqueca y mareos, hasta nauseas tenía.
Me acosté, me arrope bien, eh intente dormir.


MINUTOS DESPUES



No podía dormir, escuchaba susurros alrededor de mi habitación que decían mi nombre y eso me aturdia la cabeza, de repente un pitido se escucho, y mis oídos comenzaron a sangrar, no entiendo porque, pero era tan doloroso, comenze a ver sombras por todos lados, cerraba los ojos, pero era peor, la sombras eran pequeñas, tenían ojos blancos, como luces, pero las sombras eran obscuras, eran pequeñas sombras, como fantasmas de niños. 

Las voces aumentaron al igual que fueron añadidas unas cuantas carcajadas y gritos, pero por más que tapaba mis oídos, los sonidos no cesaban, me estaba volviendo loca. 

De repente en medio de los susurros, comenze a alucinar, veía sombras corriendo para todas partes, al igual que sombras corriendo hacia mi. 

Tenía mucho miedo, me oculte bajo las sabanas mientras podía ver que una sombra se acercaba, después la sombra desapareció, me destape y vi como algo salía de debajo de mi cama, era espeluznante, era un hombre gigante, portaba sombrero, un bastón, vestía de traje, y tenía una sonrisa demasiado diabólica. 

Se quedó en una esquina de la habitación y de repente sentí como el colchón de la cama se hundía en la parte donde estaban mis pies... 

—Hola.—Dijo el hombre.
—Veo que ya conociste a mis amigos, verdad?.—Dijo el hombre con voz gruesa y los niños rieron de una manera que me hizo erizar.
—Tranquila, no pasara nada malo, a menos que quieras.—repitió y yo solo me quedé paralizada.
—Ah?, ahora no hablas?, me frustran las personas calladas, y más si es por miedo, eso es de mala educación.—Respondio aquel hombre.
La voz de el hombre era tan gruesa que al momento de hablar, sentía las vibraciones en mi pecho que estaba sobresaltado.
—Que quieres de mi, déjame en paz, por favor.—Supliqué llorando del miedo.
—No es obvio?, me fascina verte asustada, sabes que me alimento de tu miedo, cierto?.—Dijo con ironía.
—Callate, no existes, tu no existes, todos ustedes nos existen.—Grite mientras tapaba mis oídos, y pensé que desaparecerían pero mo fue así.
—Si que lo somos, no desaparecermos, ahora somos de aquí.—Dijo el gran hombre.
—No, no existen, déjenme en paz, por favor!.—Grite.
—No importa todo lo que grites y supliques,nadie te escuchara, nadie vendrá a rescatarte, y mucho menos, nosotros no nos largaremos de aqui.—Dijo el hombre. 

El hombre y los niños se pararon, al igual que a todos se les pusieron los ojos en blanco, era tan tétrico todo, el hombre tenía tatuajes con tinta roja, que parecía ser sangre, los tatuajes eran de la  famosa estrella satánica, y el triple 6.

Me perturbe, no sabia quien era, no sabia que estaba sucediendo.

Pero definitivamente no era algo bueno, no se que pasaría después, nose si desaparecerían en algún momento, pero lo que si sabía es que no tardarían mucho, o eso esperaba.

De repente el hombre miró a los niños y los niños rieron causandome escalofrios.
Se empezaron a acercar y yo me hacía para atrás, tenía miedo, y cuando estaban ya muy cerca, solte un grito y  ..desaparecieron.
Sin dejar rastro.





 



#606 en Thriller
#225 en Suspenso
#172 en Paranormal

En el texto hay: lobo, terror, miedos

Editado: 21.02.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.