(Voz femenina)
Todos alguna vez han encontrado un amor que les ha vuelto el mundo de cabeza, aquel amor que por más daño que nos hace, nos mantiene allí, presentes, dándolo todo sin esperar nada a cambio, eso hace preguntarnos si el amor existe, interrogantes que tienen una difícil respuesta. Nunca nos daremos cuenta del daño hasta que sea demasiado tarde.
Hyun-Ae había corrido muy rápido al ver a Dong-Sun besarse con aquella chica, las lágrimas salían cayendo inmediatamente al suelo, la imagen era demasiada clara en su cabeza, ella había abierto su corazón de una manera cómo nunca lo había hecho, no podía creerlo, el ardor del pecho le recordaba la desilusión del pasado, repetía constantemente –soy una tonta- lo decía una y otra vez, llegó hasta la estación, se quedó de pie en la entrada, posó su cabeza en la pared mientras continuaba llorando.
Hyun-Ae no le prestó atención y caminó hacia los trenes, el objetivo era dejar allí a Dong-Sun, pero el joven continuó tras ella.
Dong-Sun se acercó intentando abrazarla.
Dong-Sun sintió como el mundo se posaba en sus hombros, la presión era demasiado fuerte, pero debía soportarlo, no podía quebrarse, respiró profundamente antes de hablar.
A pesar de estar enfadada, Hyun-Ae escuchó todo lo que Dong-Sun le estaba contando, era aquella historia de cómo obtuvo su habilidad, una historia que el joven nunca le había contado a nadie. Luego de varios minutos diciendo la verdad le contó lo que ella vio en el parque.
(Luego de besar a la yojeong)
La yojeong había usado una esencia de flores con la cual se volvió irresistible para el joven, Dong-Sun no conocía de eso y tampoco había notado la presencia de Hyun-Ae, en cambio Hwa-Young se había percatado que la chica se acercaba por lo tanto hizo toda esa escena a propósito, para que Hyun-Ae se alejara de Dong-Sun, lo que el hada no imaginó fue la reacción del chico después del beso.
¿Por qué dices eso? –Preguntó extrañado- ¿cómo sabes que eres el amor de mi vida?
El hada notó el error que había cometido, al mismo tiempo vio correr a Hyun-Ae, alejándose del lugar, Hwa-Young tuvo un momento desesperado queriendo el afecto de aquel chico. El rostro de Dong-Sun mostraba confusión y desentendimiento.
Ella pensó, se encontró en una encrucijada, no podía escapar de esta situación, suspiró en señal de que su tiempo de felicidad había terminado.
El joven no pudo decir nada, se quedó callado por un instante, regresó a la banca para sentarse y pensó detenidamente sobre sus momentos juntos, notó que todo fue una farsa, un engaño, todos los momentos agradables fueron manipulados por el hada ya que conocía previamente todo lo que a él le gustaba.
Editado: 02.03.2019