El infiltrado ingles (enlazados3)

Siete

Ian

La vida te ofrece diversas posibilidades, desde ser un completo inútil o ser un de todito; yo me enfoque en lo segundo, según la situación que atravesara me adaptaba para sacar lo mejor de mí y aprender.

En la cafetería que tenía Kailam en provo, aprendí a hornear todo tipo de panes, panecillos, tortas y cafés en diversos estilos; eso lo hacía de día, en las noches era un chico universitario.

Hoy me plantearán formalmente el trabajo que voy a hacer con Fabricio; también conoceremos a julia la novia de este, ya que ella me enseñara el arte de la joyería, la despejar los nervios me pongo a hornear panecillos los que mas le gustan a Kai; para mi fortuna a todos les encanta.

Al termino del almuerzo Octavio me invita al despacho, junto a Fabricio y Gael

- Ian tengo que volver a preguntarte, ¿si aceptas infiltrarte en la empresa de Fabricio?, cabe resaltar que es un poco riesgoso – me enfoco en los 3 pares de ojos que me miran expectantes –

- Como te dije Octavio, acepto hacerlo; estoy consciente de los riesgos – Fabricio asiente –

- Hemos tenido pérdidas grandísimas Ian y si lo logramos estaría muy agradecido - me dice Fabricio –

- Cuéntame todo para hacerme un esquema mental de la situación – asiente –

- Ha habido robos sistemáticos en la escuela, en el último culparon a Julia; ella no les siguió el juego y se declaró inocente desde el mismo instante en que fue capturada, pero hubo vacíos, como que Julia no sabia el idioma y el sistema de seguridad esta en italiano y solamente lo maneja personas de confianza o nosotros como dueños, todo se les cae cuando mediante un juicio ella queda libre de cualquier acusación, el punto es saber quién está desangrando la empresa

- Entiendo ... ¿el sistema de seguridad es creado por Octavio? – asiente –

- Exacto – me levanto y camino por el despacho –

- Octavio puede colocar unas cámaras adicionales en los puntos llamados ciegos y todo puede ir directo a tu computadora – todos asiente - además ¿cómo voy a entrar a la escuela sin crear sospechas?

- Bueno ... la escuela tiene un área de misión social, donde los mejores joyeros reciben becas para tecnificarse; de esa forma entro Julia a la escuela y ellos los toman de conejillos de indias para hacer los robos, tu Ian entrarías de esa forma, además no estarás solo, tendrás un apoyo en Florencia

- Entiendo, pero yo no se nada de joyería – me encojo de hombros -

- Julia es experta en diseño y armado de joyería, ella te entrenara... en Milán; ¿te puedes ir con nosotros?

- Perfecto Fabricio – Octavio se levanta y coloca sus manos en nuestros hombros –

- Chicos ya está todo calculado, asi que que tal si mañana nos vamos a ver la Eurocopa que dicen

Un plan de hombres, espero que todo salga bien; antes éramos Kailam y yo para todo, ahora contaba con amigos que se conformaban en una familia, una que tanto soñé.

Nos las pasamos super bien en el estadio de Wembley, pasamos un rato agradable, era como una despedida de Londres, así lo miraba yo, ya que mi familia directa es Kailam.

Los mas tristes son los chicos, habíamos hecho un engranaje perfecto entre travesura y regaños, hasta Alaska me iba ser falta.

- ¿Estás seguro de lo que vas a hacer Ian? - me saca de mis pensamientos mi hermana –

- Kai ... si, para esto estudie y me apasiona la idea de poder ejercer – me abraza fuerte –

- Cuídate ... no quiero que te pase nada – frunzo el ceño –

- No va a pasar nada; que tal y encuentre a el amor de mi vida – se sonríe –

- Tienes razón, pero quiero que me llames todos los días – asiento –

- Ok – hago señal militar –

La mañana siguiente estábamos todos en el aeropuerto de Londres listos para abordar con Fabricio y Julia rumbo a Milán, tenía cierto nerviosismo, pero confiaba en que todo se iba a resolver.

Llegar a Milán fue algo rápido, me recibe con un clima templado y agradable; me presentan con Adriano, la mano derecha de Fabricio, con el me dirijo quien sabe para donde

- Ian, vas a estar en las afueras de Milán mientras te entrenas con Julia, el apartamento es de mi propiedad – me sonríe, es algo mayor que Fabricio –

- Ok, la verdad no conozco la ciudad – frunce el ceño-

- ¿Qué te parece si mañana cuando vayamos a la bodega donde funcionara todo, damos una pequeña vuelta por Milán? Llegamos

- Ok – aparcamos en un complejo de apartamentos sencillos, subimos y esta todo amoblado y pulcramente limpio –

- Bueno ... descansa y mañana temprano vengo por ti

- Bueno ... gracias, Adriano

Lo primero que hago es llamar a kailam y darle parte de tranquilidad, que llegue sano y completo. Me doy un baño y caigo dormido dado la expectación del día siguiente.

Me había dado cuenta de que en ese apartamento iba a estar de paso porque no encontré alimento por ningún lado, son 9 AM y no me aguanto el hambre tan voraz que tengo, siento que están tocando la puerta y me acerco a ver quién es

- Oye Adriano estoy muriendo de hambre, aquí nada más hay agua – entra de forma abrupta –

- Discúlpame, Ian ... vamos a desayunar que estoy en las mismas que tu -bajamos y nos vamos directo hacia la cafetería más cercana –

Entre tanta comida le comenté un poco mi vida, Adriano reflejaba confianza y me enteré de que conoce a Octavio desde su época de universidad, al salir nos dirigimos hacia el conglomerado. Al llegar una cabellera pelirroja me llama la atención, ella viene saliendo del conglomerado, lleva unos converse, jeans algo desgastados y camiseta y cabe resaltar que es terriblemente linda, mi exhaustiva escaneada es interrumpida por Adriano

- No la mires tanto Ian – bufo –

- ¿la conoces eh? – se remueve en su asiento –

- Si la conozco Ian, pero en estos momentos no estas para planes sentimentales; cuando todo esto acabe te la presento

- Yo eso lo sé, simplemente estoy admirando una belleza atípica




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