Prólogo

16/1/2016

La tarde empezaba con un clima cálido, y lleno de vida, con los suaves sonidos  de la calle, las personas caminando a través de la avenida San Martín, con sus coloridos atuendos  y las risas de los niños viniendo de la nueva institución educativa a la que ella iría, todo sea por su madre, que nuevamente no le parecía una escuela decidió cambiarla y nuevamente era una extraña en un mundo nuevo que podría ser peligrosa a la vez que hermosa, había aprendido eso a medida que sus amigas la traicionan o le daban la espalda, y que a pesar de todo, la consideraban extraña y todo por una razón: ella nunca había sentido amor por un opuesto, por un hombre ni una sola ilusion, no sabía que es que  te guste nadie, era una persona muy aislada para los demás.

Pensando en ello mientras caminaba a la institución Madness, con la esperanza de no ser juzgada y hacer las cosas mejor, tratar de disfrutar la vida, sin preocupaciones sobre su futuro, no se dió cuenta que había llegado a la institución. Entro a ella, reuniendo su valor y mirando a las demás personas, a medida que avanzaba hacia su destino; noto la peculiaridad y hermosa arquitectura de tal sitio.

Se detuvo en el salón Gt134 yendo a noveno grado a los 13, se encontraba particularmente nerviosa por sus nuevos compañeros y su carácter. Pero no sé puso a pensar y se sentó en el medio de la clase para obtener una vista de todos y de todo.

Poco a poco el salón se fue llenando de figuras, risas y voces tan diferentes, todos hablando entre sí y ella siendo la única extraña en la vida de ellos. Un sentimiento afloro su pecho sobrecogiendola de una manera increíblemente angustiante.

Con una sacudida de manos decidió ser positiva y esperar lo mejor, sonriéndo amablemente a todos la pelicastaña vio como estos devolvieron la sonrisa con entusiasmo y alegría.

Finalmente y clichemente la maestra llegó y posterior tuvo que presentarse ante todos. Estaba nerviosa pero unas clases de actuación en verano le daban la práctica necesaria para aparentar seguridad y confianza, con un suspiro, que captó la atención de todos claro a parte del misterio que la envolvía .

• - hola, espero que tengan muy buenas tardes, y que estén bien. Mí nombre es Mónica Celeste Méndez y tengo 13 años y seré su compañera.
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• Todos  aplaudieron y posteriormente, cuando menos lo esperaba y todos se iban un par de chicas se le acercaron las cuales se presentaron como Stefany Melissa Cortez y Celine  Esmeralda Pineda, ambas hermosas, y divertidas y desde ese momento ella no encontró una cosa mejor que haberlas conocido, ya que la aceptaban como era y en cada receso la acompañaban y la protegían.
• Desde ese instante ellas se convirtieron en sus mejores amigas.
• Eran hermanas y nada cambiaría eso
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• Hola ! Aquí traigo la introducción a esta historia en proceso espero que os guste, en fin esta parte es la manera en que se hizo mejor amigas de las chicas y su llegada a Madness
• A partir del primero empieza la historia en el presente
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