El Inicio Del Fin

CAPÍTULO 15

—Dime.....ehhh.......niño. ¿Cuántos años tienes?

— Ocho señor.

—Puedes decirme Louis no hay problema.

—Está bien señor—contestó Bend mientras terminaba la enorme sandía que tenía entre sus manos.

—¿Hace cuánto no comías?

—Hace dos horas.

Louis lo observaba con algo de intriga, ¿sería él al que buscaba? Ver a un niño vivo actualmente era casi imposible. Era como ver a un pájaro. Ya no existían, y si aún estaban vivos serían escasamente pocos.

—Espérame aquí ¿si?

—Sí señor.

—Dime Lou... olvídalo.

Louis se adelantó hasta estar a la par con los hombres que caminaban delante.

—¿Qué dices?

—¿Sobre el niño?

—No idiota sobre la orgía que hubo ayer.

—¿Dónde?

Louis suspiró, al parecer su voz sarcástica no estaba perfeccionada del todo.

—¿Crees que el niño sea al que buscamos?

—¿Cómo saberlo? No hay muchos niños de los cuales escoger.

—Lo llevaremos de todos modos.

—Tú eres el jefe.

Louis se detuvo esperando a Bend. El niño seguía caminando mientras disfrutaba su sandía.

—Dime ehhh.. ¿Cuál era tu nombre? perdón pequeño lo olvidé.

—Bend.

—Bien, dime Bend cuando te encontramos en el bosque ¿Estabas con alguien más?

                     ◀◀◀      ▶▶▶

—Hijo de perra teníamos un trato.

—No fuí yo quién lo rompió.

Max tenía un machete clavado en su estómago. El mismo machete que Finn unos minutos antes había lanzado por órdenes suyas, mientras él y el hombre conversaban.

Para su sorpresa el hombre había previsto todo y girando rápidamente hacia un lado esquivó el machete que penetró con fuerza en el estómago de Max.

Finn yacía metros adelante, con una daga negra clavada en el cuello.

—Ha, hahahaha  ha ha.

—¿Qué es tan gracioso?

—Tú no eres Korái

—Nunca dije que lo fuera

—Eres, tú eres Jeremy. Argus estaba, aggg, Argus era quien debía capturarte. Al parecer no lo logró.
Pero no pienses que él se ha olvidado de tí. Él ya mandó otro, y ten por seguro que a éste no lo podrás matar. Él te conoce y sabe quién eres, él te tiene vigilado. Él sabe perfectamente quien eres.

Jeremy no reaccionó, se quedó viéndolo sin dar muestras de emoción alguna. No era un tipo que mostrase sus emociones, solo mantenía su mirada fría e indiferente.
Caminó hasta quedar frente a Max, se acuclilló y sujetó la cabeza de Max levanrándola ligeramente.

—Dime ¿Valió la pena realmente?

—Por tu bien te recomiendo no contarle a nadie lo que te dije.

—Me das asco.

Max sonrió ligeramente.

—Solo hice lo necesario para sobrevivir.

—¿Dondé está la resistencia?

—¿Qué?

—Sé que la conoces, ¿en dónde está?

—Eso es un mito, si hubiera alguna ya estaría ardiendo.

Con su otra mano Jeremy sujetó el machete que estaba incrustado en el estómago de Max y lo comenzó a ladear lentamente.

—¡AGGGGG!...es un mito pero sé en donde podría estar.

—Te escucho.

—Hace años encontramos un tipo, se parecía a tí. El punto es que fingió ser de los nuestros. Estuvo meses con nosotros, pero en realidad era un traidor. Solo buscaba información. Liberó a nuestros prisioneros y escapó junto a ellos con varias de nuestras armas. Eso sucedió hace dos años aproximadamente. Al conocer nuestros puntos de ataque y encuentro así como nuestras armas entre otras cosas, nos fué difícil seguirle el rastro.

—Por tu bien espero que haya un pero.

—Lo hay. Ellos no están en un lugar fijo, o al menos eso creímos.

—Menas.

—Así es, pero no son como las que tienes tú. Esas menas simples y débiles.

—Aún no escucho donde los puedo encontrar.

—No sé que gano yo diciéndote todo esto. Si no me matas tú el once lo hará.

—Eacaparás hasta entonces.

Max hizo un gesto de resignación.

—Las Cataratas del Iguazú.

                      ◀◀◀   ▶▶▶

—No, estaba solo.

—¿Y cómo sobreviviste? ¿Siempre estuviste solo?

— Mi mamá estuvo conmigo, pero ella ya no está aquí.

—Ya entiendo. No te preocupes. Con nosotros estarás a salvo. Buscaremos a tu mami ¿si?

—Gracias—respondió Bend con una sonrisa radiante.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.