Amor y dolor

Ahora la espina y la rosa se vuelven una misma porque ella controla la herida que estaba llena de toda barrera que la protegía para que no saliera lastimada, pero mientras ella mejoraba él por dentro empeoraba, todo se guardaba, no quería preocuparla y poco a poco el vacío se extendió.

Cada vez que él intentaba protegerla ella terminaba lastimada de la única persona que amaba porque de la nada dejó de amarla, de mirarla de la misma forma, mientras ella se acercaba él tomaba distancia.

Sola con su sombra dónde la pesadilla de la vida la despierta porque ambos podían sanar, pero, así como el dolor los unió los separó.

Esa espina que al principio poco a poco iba sobrellevando de nuevo volvió a consumirla, ese sufrimiento de nuevo se apoderó de su cuerpo porque mientras él le daba dolor, ella le daba amor y juntos se complementaban. --Aunque me rompió el corazón hizo que saliera del caparazón.

Moraleja: las personas rotas llaman a otras igual de rotas y en lugar de que esas piezas corten sus bordes encajan porque los dos entenderán el dolor y el sufrimiento por lo que ambos han pasado, porque de eso se trata el dolor que aunque no haya color te acerque al amor.