El laberinto de Catherine Ross[completa]

Capítulo 26: {La isla Misteriosa}

Domingo 7 de Febrero del 2016, se termina otra semana, una semana en la que me han ocurrido muchísimas cosas, desde secuestrar a Lucas y tener que entrar a un edificio lleno de pruebas, a ver a mis padres hundidos, hasta conocer a una persona que ha dia de hoy no se porque, pero me llama la atención.
Y aquí estoy, me levanto de nuevo, quedo con Ismael y me voy a entrenar, esta vez por la mañana, quiero aprovechar bien el día, llegó al santuario y empiezo a entrenar a tope. Terminó el entrenamiento, Ismael se quedó con Raúl y vuelvo al piso del sector III, en ese momento mientras estaba abriendo la puerta…
—¿Vas a algún lado? —me pregunto una voz que me resultaba muy familiar que venía de la parte de atrás, me di la vuelta y en ese momento.
—¡Anda, hola! —le dije, era él, Enrique.
—¿Qué haces aquí? —le pregunté.
—Nada, es que te he visto a lo lejos y he venido a saludarte, ¿algún problema? —me dijo, mientras ponía una de sus manos cerca de mi cara.
—No, no hay ningún problema, solo que me ha parecido raro, solo eso —le dije, a la vez que me reía.
—Bueno, ha sido un placer, yo me tengo que ir, aquí te dejo mi numero de telefono por si me quieres llamar algun dia —me dijo Enrique mientras se marchaba.

Se fue y yo me quedé en la puerta de la casa, mirando a la nada, pensando en él. Me fui a mi casa y comí, a la tarde quería volver otra vez a entrenar, le había preguntado a Ismael si podía ir y él me dijo que sí.
Se hizo la tarde y me fui, iba andando por las calles del sector III, cuando me encontré un cartel, en el cartel decía:
—”¿Quieres pasar un fin de semana diferente? —salía una isla en el que se realizaban un montón de pruebas, era un torneo, el ganador recibirá un premio y era algo que me llamaba la atención.
Llegué al santuario, allí estaban esperándome Raúl e Ismael.
—¿Empezamos? —preguntó Raúl.
—Espera, quiero hablar con Ismael antes que le quiero hacer una pregunta —Raúl afirmó, y yo coji a Ismael y me lo lleve, me lo lleve bien lejos para que Raúl no me escuchase.
—¿Que quieres? —me preguntó Ismael sorprendido.
—Quiero apuntarme a un torneo en el que se realizan un montón de pruebas para saber si estoy preparada o no.
—le respondí mientras le enseñaba el cartel con el móvil.
—¿El finde que viene?, pero es aquí en este mundo en una isla perdida, no se porque, pero no me transmite mucha confianza. —me respondió a la foto mientras me daba el móvil.
—Hablo con mis padres y ya está, yo quiero hacerlo, te puedes apuntar tu, y nos vamos los dos, —le propuse a Ismael.
—Vale, estoy de acuerdo, asi me quedo más tranquilo, pero que conste que no me hace mucha gracia, porque no sabemos lo que nos podemos encontrar, y más aquí, que está el desconocido y en cualquier momento puede aparecer —me intento convencer Ismael de que no era buena idea, a lo que yo le dije que me iba a arriesgar y ya está.
—Bueno, vámonos a entrenar y luego mandó las inscripciones —le dije mientras íbamos ya dirección el santuario.
Estuvimos un par de horas entrenando, como siempre, y además esta vez tenía el objetivo de ganar aquellas pruebas. Llegue a mi casa, estaba agotada, cene y mientras estaba cenando le propuse a mis padres lo de las pruebas, ellos no pusieron trabas, lo único que me dijeron, era que si valía dinero que me fuera olvidando, yo les dije que era gratis y me dejaron ir, hable aquella noche con Ismael y envíe las inscripciones.
Lunes 8 de Febrero. De nuevo me levanto y recibo un mensaje en el móvil.
—”Enhorabuena, has sido seleccionada para participar en la “Isla misteriosa”, para confirmar tu asistencia sólo tienes que responder a este mensaje con un sí.
En ese momento respondí al mensaje y acto seguido le escribí a Ismael por whatsapp si le habían escogido, a lo que él me respondió de que no le habían dicho nada.
Horas más tarde recibió la notificación…

 




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