El lago de cristal- Los inicios de una Cristalícense

Capitulo 9: Sekkat

Anoche no pude pegar ni un solo ojo, tenía miedo de que una lunática intentara matarme con una lanza y creo que no hace falta decir el nombre de la lunática por suerte ya estamos de vuelta a la casa de los mellizos y pude descansar un par de horas al menos antes de que los gritos de Jace me despertaran

-¿Qué se supone que te pasa?- le pregunto alterada

-Joan ¡NO! No otra vez ¿Por qué? No puedo seguir así ¿lo sabes verdad? No soy tu puto niñero

-pues déjame tranquilo, solo es una batalla de entrenamiento no te alteres, tenemos que estar preparados para lo que sea

-amm… ¿me podrían explicar qué ocurre?

-Joder pero ¿tenía que ser él? Siempre te descontrolas- y fui ignorada como ya es de costumbre, no sé ni porque pregunto

-cálmate hermanito, cualquier cosa tu estas aquí

-a eso es a lo que me refiero ¡No soy tu niñero! Ya eres un adulto com…- las palabras de Jace fueron interrumpidas abruptamente por un estruendo, la nieve se levantó creando una ligera cortina blanca de donde salió un chico moreno a gran velocidad para atacar a Joan- ¡genial! Destruyan la casa no me importa y olvídate que te ayudare cuando no te puedas controlar eres un adulto ya debes aprender tus limites- me toma de la muñeca y literalmente me arrastra de vuelta a la casa

-oye- me quejo- eso duele ¿Qué te ocurre?

-Volx y Joan son lo que me ocurre- respira profundo y se calma- pero eso no importa… por ahora, ven no has comido nada

-oye ¿a qué te refieres con el por ahora?

-a nada solo come y luego sal

-¿perdón?

-que salgas, no se da una vuelta, solo te recomiendo que te alejes un rato esto se va a poner desagradable más tarde, despéjate necesitas tiempo para ti además ya has avanzado, cualquier cosa ya sabes el hechizo de repulsión y eres más rápida eso debería de ser suficiente por ahora

-pero yo no quiero

-no es una pregunta lo que te dije, no tienes otra opción querida debes creerme cuando te digo que no vas a querer estar aquí más tarde por lo tanto es una orden

-tú no eres mi padre

-pero soy uno de tus guardianes así que comes y te largas

-que grosero

-perdón… solo has lo que te dije ¿sí? ¿Podrías?- creo que debería lo veo muy preocupado

-está bien

-gracias querida

-ni me lo recuerdes pero me debes una explicación

-por supuesto

Y tras haber acordado que me explicaría porque me tengo que ir y de comer me fui, no sé exactamente como pero trato de llegar al lugar secreto de los mellizos, tampoco es como que me quisiera perder como Hanzel y Gretel

Después de varias vueltas logre encontrarlo ya me estaba asustando

-perfecto… ¿ahora que se supone que haga?...

Invoco mi báculo, la verdad he mejorado ya soy más rápida

Lo veo detenidamente y me siento en la fría nieve

-¿sabes?... esto es raro se supone que tú eres el reflejo de mi alma, así que de alguna forma tú eres yo o algo parecido… estoy confundida solo hace unas semanas atrás yo sabía quién era pero ahora ya no se siquiera quien o que soy, fue un cambio muy rápido y todo aquí es tan diferente, no se… jaja estoy mal, perdí a mis padres, me perdí a mi misma y ahora estoy hablando con un objeto inanimado, ja, vaya he caído muy bajo… supongo que para reencontrarme necesito entenderte, pues… vamos, seamos uno solo, enséñame lo que tengo que saber

Me levanto y respiro con calma mientras sujeto el báculo con ambas manos, se comienza a formar una luz alargada a un par de metros de mí y de ahí sale una serpiente negra  muy parecida a una cobra, la verdad no lo sé nunca había visto una y mucho menos negra ni tan grande… me atrevo a decir que es más grande que yo

Retrocedo lentamente esto no me gusta ¿Por qué utilice esta cosa sola?

-¿Q-que haces? No te me acerques… no te quiero lastimar- sostengo con fuerza el báculo como si eso me fuera a proteger del animal que se me está acercando amenazante

~pues yo te veo muy decidida~ escucho una voz pero no veo a nadie

-¿Quién dijo eso?- digo sin dejar de ver a la cobra que cada vez se me acerca mas

~dijiste que querías reencontrarte, entenderme, que quieres ser uno solo contigo misma, por lo tanto yo te ayudare y terminaremos siendo un solo ser

-¿fuiste tú?- le digo a la cobra que se ha detenido muy cerca de mí- ¿c-cómo?

~en efecto fui yo, no necesito hablar para poder comunicarme contigo después de todo yo soy parte de ti, soy una fracción de tu ser

¿Una fracción de mi ser?... un momento ¿esto es como la mascota de Jace?

~no somos mascotas, somos parte de ustedes, podrías llamarnos consejeros o guías

-¿¡puedes leer mis pensamientos!?

~ ¿Cómo crees que me comunico contigo? Es por la mente~ pone una expresión de fastidio~ yo soy una fracción de ti por lo tanto no me puedes esconder nada ¿ya entendiste?

-si…

-sé que no entendiste casi nada pero no importa poco a poco se llega lejos~ oye… eso no es verdad, si entendí… o al menos la mayor parte…~ ¿segura?

-se me olvido que podías hacer eso

~dime, exactamente ¿Qué entendiste?

-yo… amm…

~habla pues

-tú eres una parte de mí, vendrías siendo como guía

~así es, por lo tanto te ayudare para que comprendas todo con mayor facilidad y descubras quien y que eres realmente, te ayudare a superar todos tus miedos y cruzar cada obstáculo, nos volveremos más unidos y más fuertes, sé que aún no confías en mi pero tendrás que hacerlo ya que somos un mismo ser

-lo sé solo necesito tiempo

~por supuesto

-por cierto ¿Cómo te llamas?

~soy un Sekkat pero no tengo nombre, tu deberías escogerlo

-¿yo?

~si

-pues me gusta ese que has dicho, Sekkat suena poderoso

~en ese caso me llamo Sekkat, y tu Anna ¿Qué sabes hacer?~ lo miro confundida, ¿a qué se refiere?~ me refiero a tu báculo ¿Qué sabes hacer?



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En el texto hay: amor juvenil, aventura, odio y venganza

Editado: 16.11.2021

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