Me siento de lo peor, la brisa invernal me choca contra el cuerpo con brusquedad y el miedo aún corre por mis venas. Mi respiración es agitada, los tenebrosos sonidos del bosque zumban en mis oídos y la oscuridad no ayuda mucho ya que es una de las cosas a las que le tengo miedo, pero ahora debo de enfrentarlo para salir con vida
Me pregunto que estará pensando mi abuela en este momento, no sé si se sentirá preocupada ya que llevo varias horas fuera. Ya ni sé que pensar sobre esta situación, ese hombre me causa mucha curiosidad al igual que interminables sensaciones que no había sentido nunca antes. Aún recuerdo cuando de niña jugaba muy feliz entre toda esta arboleda a ser Caperucita roja mientras que desde la oscuridad era observada por el famoso lobo feroz, ahora puedo entender mucho mejor esa parte del cuento y vivirlo en primera persona no me relaja ni un poco
Mi vista sube hasta el cielo atendiendo a las grandes y pequeñas nubes grises esparcidas por toda la atmósfera nocturna, no falta mucho para que comience a llover. Poco a poco comienzo a levantarme usando el árbol como ayuda, cada vez me siento más cansada y la pierna se me adormece al no moverla
Sigo caminando con mucho cuidado, apoyándome de tronco en tronco. No tengo idea de hacia dónde ir, estoy perdida y los truenos en el cielo comienzan a asustarme cada vez más. Las pequeñas gotas no tardan en caer haciéndose cada vez más grandes y aumentando en cantidad. Mi pelo se moja completamente, mi ropa queda toda empapada y el agua helada me recorre todo el cuerpo. Solo puedo escuchar el sonido de la lluvia chocar contra el lodoso suelo, los árboles se sacuden con brusquedad y yo solo intento poder mirar hacia donde camino pero mis intentos son en vano
No paro de temblar y el cansancio me juega en contra. Llego hasta un árbol donde me detengo a descansar un poco, alcanzo a ver como esta hueco y dentro de él cabe una persona. Sin pensarlo dos veces me adentro en el, no es espacioso pero al menos me protege de la potente lluvia
Ahora veo que el bosque tiene sus partes malas, puede ser bonito y atrayente, pero esa solo es una máscara para ocultar sus verdaderos lados oscuros. Miro mis manos pálidas, la lluvia se llevó mi calor corporal con ella. Quiero dormir pero siento que si cierro los ojos me perderé en la oscuridad y que algo me encontrará solo que no para guiarme, sino para atacarme hasta dejarme sin vida
En este sitio estoy sola, son las criaturas del bosque contra mí, una batalla que en este estado no puedo ganar. El olor a tierra húmeda me llega a la nariz, la tormenta no cesa y parece que seguirá así hasta que el sol se asome. Los párpados comienzan a pesarme como si me hubieran inyectado anestesia, mi respiración se vuelve lenta y mi cuerpo se relaja. Me dejo llevar dejándome descansar, mi cuerpo queda profundamente dormido pero mi mente vaga en un profundo mar de sueños y fantasías
Lo único que me preocupa es el no volver a despertar, solo me obligo a mi misma a dejar a un lado mis preocupaciones tan solo por unos momentos. Se que aveces soy muy negativa, pero no le puedo hacer nada, así soy yo y me gusta. Si llegara a morir aquí me repetiría que al menos pude ver a mi abuela una vez más aunque alla sido por un día. Me siento tan lejos de ella, daría todo por uno de sus cálidos abrazos y un "No te preocupes, yo estoy aquí contigo"
Si no hubiera salido estaría junto a ella en este momento, pero me importaba más Calvin que mi propio bienestar. A pesar del poco tiempo le he agarrado un gran cariño a ese pequeño
Solo espero salir viva de esta y no volver a encontrarme con ese hombre. Puede ser muy lindo y absorvente, pero yo sé que en su interior guarda un oscuro secreto que por mi seguridad, no me gustaría descubrir, es mejor dejarlo así que enterarme de algo de lo que me pueda arrepentir