Nathalie
—¡Despierta Nathy! —escuché a mi hermana gritar— ¡Llegaremos tarde!
—Ya voy, ya voy —dije cansada de sus gritos— Ya no sigas gritando ya desperté.
Poco a poco fui abriendo mis ojos, odio los lunes, pero este en especial por ser el primer día de clases. La verdad, me arrepiento de haberme ido de fiesta ayer; tengo una resaca horrible, el dolor de cabeza me está matando, y definitivamente los gritos de Oriana no ayudan.
—No tengo la culpa de que a mi brillante hermana se le ocurriera salir de fiesta, emborracharse y llegar en la madrugada justo el día antes del comienzo de las clases —dijo con tone de reproche—Apúrate, son las 7:15 y entramos a las 8:00. No pienso llegar tarde mi primer día de clases.
—Está bien, ahora sal hermanita y termina de arreglarte, yo haré lo mismo.
Pude notar que rodó los ojos, la quiero mucho pero la verdad me está sacando de mis casillas, ¿Por qué carajos me despierta? Total, el primer día nunca se hace nada, y menos cuando estás en tu último año —como es su caso— ya debería estar cansada del instituto. Apenas salió entré al baño e hice mi rutina diaria, con la diferencia de que lo estaba haciendo con toda la flojera del mundo, estaba considerando volver a acostarme y quedarme profundamente dormida, pero sé como es Oriana y si tardo quince minutos más va a venir a buscarme, estoy segura que si vuelvo a dormir me va a matar; terminé mi rutina y me dispuse a vestirme, me puse un blue-jean, un top blanco y una camisa a cuadros encima con unos converse blancos, al terminar me maquillé un poco y salí, gracias a Dios, porque ya Oriana caminaba hacia mi habitación, lo supe porque apenas me vió resopló y giró sobre sus talones para empezar a bajar las escaleras.Cuando vi a Oriana me quede sorprendida ¡Está hermosa! Llevaba un blue-jean con un top negro de encaje y unas botas del mismo color. Cómo se nota que ya no es una niña, voy a extrañar a la niña que me pedía consejos para todo, la que me veía como un ejemplo a seguir, ella ahora es igual o mucho mejor que yo, pero me queda la satisfacción de que yo estuve junto a ella en cada momento, cada vez que me necesitó y voy a seguir estando para ella siempre, no la dejaré sola en ningún momento.
No sé como no ha tenido novio, hay muchos chicos que mueren por estar con ella, es hermosa, inteligente, carismática y muy buena persona, pero ella no quiere tener novio, he visto como los rechaza y odia que la acosen-como ella misma lo dice- en su grupo de amigo sólo hay un hombre y es gay, si como dije, es gay, pero bueno ella sabe con quien se junta, además se que es muy buena persona, he compartido mucho con él desde hace bastante tiempo y sé que la quiere mucho, a pesar de ser un humano común y corriente no nos tiene miede no nada por el estilo y nos trata igual que a todos, es el único que sabe nuestro secreto y así se quedara por mucho tiempo.
—¿Me estás oyendo? —me dice Oriana haciéndome salir del trance en el que me encontraba, niego con la cabeza y agacho la mirada para que entienda que no fue mi intención— Te estaba diciendo que desayunes rápido, son las 07:45 y por más que te quiera, si llegamos tarde te voy a matar Nathalie.
Apenas dijo mi nombre me asusté, ella nunca me llama Nathalie, siempre me dice Nathy o hermana así que lo que dice va en serio. Terminé de desayunar lo más rapido que pude y salimos casi corriendo al Instituto; por suerte está sólo a dos cuadras de nuestra casa, por lo cual llegamos justo a tiempo.
Pero la suerte hoy no estaba de mi lado, cuando estábamos a punto de entrar chocamos con un hombre de uno 20 años aproximadamente, no lo puedo negar, es demasiado guapo, todo un Dios griego. Ya Nathalie deja de pensar esas cosas.
No lo pudo evita osea éste hombre debe tener a todas las chicas a sus pies, y yo me uno a ese grupo de chicas.
—¿Nathalie verdad? —pregunta con una sonrisa en el rostro. Dios mío que sonrisa, si sigue así me voy a derretir aquí mismo...Pero, ¿cómo carajos sabe mi nombre? Debió haber notado mi confusión porque enseguida empezó a hablar— Nos conocimos ayer en el Bar The Mop ¿no lo recuerdas?
—Si ya te recordé Samuel, discúlpame pero tengo memoria a corto plazo -le digo con una sonrisa apenada
—Tranquila, no hay ningún problema —me dijo con una sonrisa sincera.
—Okey discúlpenme por meterme en una conversación ajena pero voy tarde y tu tienes mi horario Nathalie —dijo Ori algo enojada— ¿Me lo puedes entregar?
—Si claro Ori —dije y saqué su horario de mi mochila— Te toca Literatura
—¡Agh! Empecé mal el año, voy a tener que aguantarme otra vez a la vieja Nancy ¡NO LA SOPORTO!
—Pues entonces que bueno que renunció y tienes a tu nuevo profesor de Literatura en frente —dijo Samuel con una sonrisa divertida en el rostro— Aunque creo que te voy a bajar unos puntos en mi materia por expresarte asi de los demás profesores.
—¡No por favor no lo vuelvo a hacer! Pero...¿En serio serás el nuevo profesor de Literatura?—preguntó Oriana sorprendida, Samuel solo asintió —Pues mucho gusto, soy Oriana Adams, hermana menor de Nathalie, pero apúrese que los profesores deben ser puntuales, se supone que son el ejemplo a seguir —dijo y empezó a arrastrarlo hasta el salón.
—¡Adiós Nathaly! —gritó Samuel para que lo escuchara, una leve risa salió de mis labios al verlo asustado por la actitud de mi hermana.
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Editado: 30.10.2022