El Llamado de la Sangre

Capitulo 37

Luke

—Hay que irnos —Levante a Oriana, Joshua y Maddie levantaron a Samuel que estaba mareado, pero podía mantenerse de pie, aunque no por mucho tiempo.

— ¡Ay Esta mierda duele! —Se quejó Samuel mientras lo levantaban.

—Jack y Nick desaparezcan el cuerpo, nos vemos en mi casa —Miré a los chicos de mi manada—. Ustedes vayan a mi casa, Maddie y Josh vendrán en mi auto y lleven a Sam.

Nos movimos rápido, dejé a Oriana en el asiento del copiloto y después me monté en el auto, Maddie y Josh ya estaban adentro con Samuel, que parecía más muerto que vivo, estuvo quejándose, pero ya no tenía casi fuerzas. Conduje lo más rápido que pude a mi casa, en el camino Oriana se despertó de golpe, vio su entorno y busco a Samuel el cual ya estaba muy mal. Demasiado.

— ¿Qué le pasa? ¿Qué tiene? —Lo revisó preocupada y verifiqué que los de la manada fueran detrás de mí.

—La herida es muy grave, enterró las garras demasiado profundo y... Por lo que veo eso no es lo único que tiene.

— ¿Y eso que significa? Maddie le temblaba la voz y su pulso iba a explotar

—Sam... e—él, tiene wolfbane en la herida.

— ¿Qué? ¿Cómo es eso posible? —Oriana temblaba y secaba la cara de Samuel con un mini pañito que tenía en su bolso.

—N—No lo sé...creo que el omega tenía wolfbane en las garras y al enterrárselas le hizo más daño del que creímos.

—Eso... ¿eso significa que puede morir? —Preguntó Ori, todos asintieron y ella se puso peor— ¡Pues hay que sacarlo! ¡Ya!

—No es tan sencillo —Hablo Josh quien era el más clamado.

— ¡¿Como que no?! ¡¿Y eso por qué?! —Estábamos llegando, estacioné como pude y sacamos a Samuel, al entrar en casa lo colocamos en el mueble.

—El wolfbane está en su sistema y se va expandiendo, no podemos detenerlo. —Le dijo Joshua a Oriana, pero ella se negaba y desesperada trato de hacer cosas que no servían, en el abdomen de Sam se veía como el wolfbane se expandía, debido a que sus venas se volvían negras y la herida empeoraba. Era triste que Samuel muriera así, era un gran hombre y fue un gran miembro de la manada, Maddie lloraba en el hombro de Josh y los de la manada miraban la escena triste.

— ¡Responde! ¡Mírame por favor! —Oriana lloraba, agarraba su cara entre sus manos y le hablaba, trataba de limpiar la herida y usaba un hechizo de curación el cual no le funcionaba— ¡Maldición! ¡Maldita sea! ¡Por qué soy tan inútil! —Gritaba, intente alejarla, pero me lo impidió.

—Luna por favor, deja de culparte, ya no puedes hacer nada, su corazón está dejando de latir, lo único que haces es lastimarte —Se soltó de mi agarre, negaba repetidas veces con lágrimas en sus ojos.

— ¡Hagan algo! — se agachó a la altura de Samuel— ¡No te atrevas a dejar de respirar! ¡Reacciona! —El teléfono de Oriana sonó, lo agarre y era Nathalie.

 ¡¿Dónde está Samuel?! —Habló tan fuerte que tuve que alejar el teléfono de mi oreja.

—Nath cálmate, estoy en mi casa con Oriana y Sam....— Me colgó de golpe— ¿Hola? —Trate de verificar si se había ido la señal, pero no fue así, me había colgado.

Y 5 minutos después una Nath despeinada y con cara de loca entro a mi casa y se acercó a donde estaba Samuel.

—No, no, no, no —sus lágrimas salieron como una cascada, se acostó en su pecho, el respiraba débilmente y su corazón latía cada vez más despacio.

—Hola —Su voz era apenas audible— No llores, hey...— Tomo como pudo la cara de Nath y ella lloro más. Sam trataba de verla, pero le era imposible abrir los ojos— Voy...a...estar bien...tranquila.

Oriana veía la escena desde lejos y se agarraba del cabello tratando de pensar a toda velocidad, pero ya era tarde, la mano con la que Samuel sostenía la cara de Nath cayó a un lado y todos escuchamos claramente como su corazón dejaba de latir.

— ¡No! No, No POR FAVOR, MI AMOR —Lo miraba con desesperación— No me dejes así. Por favor.

Oriana se acercó deprisa donde estaba su bolso y saco un diario antiguo, busco desesperada algo entre las paginas, hasta que lo encontró.

—Nath....Nathalie— Oriana le enseño algo del diario y al parecer Nath no entendió lo que Oriana le quiso decir.

—Hay que hacerlo, es la única forma de recuperarlo —Oriana agarro el cuerpo de Samuel y lo coloco en el suelo.

—Ori esta es una locura...no podemos— Nath seguía en shock, pero Oriana seguía concentrada en lo que hacía.

— ¿Luna, que pasa? ¿Qué planeas hacer exactamente? —Me ignoró y buscó velas y las coloco alrededor de Samuel.

— ¡Oriana esto es una locura! —Nath la sujetó de los hombros haciéndola entrar en razón, ella siguió ignorándola.

—Ya está todo listo, tu colócate ahí y pon tu mano ahí —Le señaló a Nath que se arrodillara y colocara su mano en el corazón de Samuel, Oriana se colocó del lado donde él tenía la herida.

—Oriana esto es muy peligroso, hermana por favor escúchame, podrías morir ¡Ambas podríamos morir!

— ¡Pues es mejor que no hacer nada! Si quieres, resígnate y quédate llorando en un rincón, ¡o me ayudas a salvarlo!

— ¡Esto es una locura! —Nath me miro a mi— ¡Has algo, no permitas que se mate!

— ¡¿Pero qué carajo quiere hacer?! ¡No entiendo! —Hablé desesperado.

—Quiere que yo haga latir el corazón de Samuel mientras ella lo cura —Miro a Oriana con suplica— Oriana, eres una bruja nivel uno sin el poder suficiente para sanarlo, entiende.

—Y tú eres una de nivel tres, con el poder suficiente para hacer latir su corazón....o al menos intentarlo —Le dio una mirada de perrito que hizo que se me derritiera el maldito corazón— Hay que intentarlo ¿sí?

—Incendia —Dijo Oriana, Miro a Nath y las dos empezaron a decir hechizos— Theyashfi aljisóma anavállo veleno.

—Gia anazoogónisi rytholpo cure —Dijo Nath. Ambas dijeron sus respectivos hechizos una y otra vez.

—AHHHHHHHH MIERDA —Corrí al lado de Oriana cuando grito de dolor, Nath seguía diciendo su hechizo y sus ojos eran blancos.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.