Capítulo 1. Amnesia

La luz del sol entraba por medio de la ventana en un bello atardecer, un suave olor a alcohol rodeaba la habitación, un cuerpo inmóvil yacía sobre una cama de hospital.

Lentamente Anelix abre sus parpados, reflejando el sol a través sus bellos ojos cafés claros, en su despertar solo hay incertidumbre. ¿Qué sucede?, ¿dónde estoy?, eran sus primeros pensamientos, un dolor en su cabeza la hizo forzar cerrar los ojos, ¿cómo llegue aquí si hace un momento estaba en mi departamento leyendo?.

Anelix, una mujer trabajadora, trabajaba en una empresa reconocida luego de mucho esfuerzo y vivía sola en un pequeño departamento cerca de su trabajo, era todo lo que podía pagar, su vida a veces era un infierno, pero ganaba lo suficiente para mantenerse sola, así que no lo podía dejar. Estaba leyendo un libro en su habitación y……eso es todo lo que recuerda.

¿Cómo terminé en un hospital?. Las costillas le dolían demasiado y tenía moretones por todos lados, parecía que estaba aquí por esa razón. Mientras luchaba por intentar recordar alguien abre la puerta de la habitación. Un hombre alto, guapo, vestido de traje azul y con una canasta de flores entra sin aviso. Al verla consciente, sus ojos se abren de par en par, al instante deja caer la canasta de flores y corre para abrazarla fuertemente: “Al fin despiertas, te extrañe demasiado”.

Anelix: “…???”

Anelix no sabía que ocurría y con la poca fuerza que tenía empuja al hombre lejos de ella: “¿Quién eres?”

El hombre queda sorprendido, le dice: “Amor, soy yo, tu esposo, ¿por qué actúas de esa forma?”

“A…a..mor…. ¿de qué me hablas?, estas confundiéndome con otra persona, yo no estoy casada”

Hombre vestido de azul: “!!!!!. ¿Que?”

El hombre pone una cara seria, frunce el ceño y le pregunta: “¿no puedes recordarme?, no bromees con eso amor, me estas asustando”

Ella contesta: “ya te dije que no sé de qué hablas, yo….yo…..estaba en mi departamento, no sé cómo llegue aquí, pero estoy segura de que no te conozco”

Aquel hombre pone una cara sombría, a tal punto que erizaría la piel de cualquiera, con una voz profunda llama: “Erick”

Otro hombre contesta desde fuera de la puerta: “diga mi señor”

“Llama al médico de inmediato”

El hombre de afuera se aleja de la puerta a grandes pasos.

En poco tiempo el doctor llega con una enfermera a revisar los signos vitales de Anelix, en la puerta se queda vigilante el hombre que lo fue a llamar, es alto, fornido, vestido de negro, daba un aura algo sombría y se podía ver una cicatriz en el lado izquierdo de su frente.

Anelix le pregunta al doctor por su situación y como llego a estar ahí, claramente todo es muy real como para estar en un sueño, así que desistió de esa idea.

El doctor empieza a hablar: “tuviste un accidente de auto, te quebraste 3 costillas, pero aparte de eso solo sufriste heridas leves, nada porque preocuparse. Al parecer el sistema de seguridad de tu auto es muy bueno, ¿recuerdas algo de lo que paso?”, Anelix niega con la cabeza, el doctor continúa: “Tal vez el trauma te hizo olvidar algunas cosas, pero no presentas contusiones en la cabeza, quizás esto sea solo temporal, ¿me puedes decir hasta donde recuerdas de ti misma?”

A lo que ella contesta: “mi nombre es Anelix, tengo 25 años, vivo sola en un departamento en el centro de la ciudad, trabajo como administradora, no sé cómo llegue aquí”

El hombre de traje replica: “¿25 años?, tienes 33, trabajas en mi empresa y vives conmigo. ¿Doctor que sucede?”

Con la mano en la barbilla el doctor dice: “Parece ser un caso de Amnesia Disociativa, le haremos más pruebas para estar seguros, pero por el momento no supone nada grave, debería recuperarse pronto, por suerte la niña está completamente bien, solo tiene rasguños exteriores pero no hubo daños graves, puede ser dada de alta hoy mismo”

Anelix estaba pasmada con todo lo que escuchaba, nada tenía sentido. “¿Ya tengo 33 años?, no es posible, me están diciendo que no recuerdo 8 años de mi vida?, y de que niña hablan?”

“Amor, soy Antony, soy tu esposo desde hace 5 años y tenemos una hija de 3 años”

“No…..”, Anelix se pone en un estado estérico, “una hija?......estás loco, ni te conozco, no sé qué pasa aquí!! aaaahhhggg”, se coloca las manos en la cabeza y comienza a gritar.

Antony se acerca a calmarla pero el doctor lo detiene: “señor no puede forzarla ahora, debe dejarla reposar, una vez que se calme puede intentar hablarle pacientemente”. Antony se aleja a regañadientes, la enfermera le pone un calmante a Anelix y todos salen de la habitación.

Anelix estaba muy confundida, ¿esto es real?, no podía dejar de dudar en su cabeza, esta sucesión de eventos era muy irreal, si nunca recordaba esos 8 años…. ¿cómo podría volver a la normalidad de su vida?. Anelix cerró los ojos intentando buscar alguna memoria que la ayudara a comprender la situación, pero todo lo que encontraba era vacío. Era como si una parte de su vida hubiera sido borrada sin dejar rastro. Las palabras del doctor resonaban en su cabeza: "Amnesia disociativa." ¿Cómo era posible que su mente hubiera bloqueado ocho años enteros de su vida? Y lo más perturbador de todo: ¿una hija? Anelix no podía siquiera imaginarse como madre. Se sentía abrumada y perdida en un abismo de incertidumbre.