— ¿Destruir su reputación? ¿Qué tienes en mente? —Chen Hao no pudo resistir su curiosidad.
Cuando Zhuang Qiang se había acercado a la mesa de Bai Xiaofei hace un momento, Chen Hao se dio cuenta de que Zhuang Qiang estaba fingiendo ser educado, pero era claro que no estaban en buenos términos. Zhuang Qiang solo era educado porque tenía miedo del poder de la Familia Bai.
— ¡Te mostraré un video!
Bai Xiaofei sacó su teléfono y reprodujo un video que grabaron. El video mostraba una habitación con una cama de tamaño King. En el video, Zhuang Qiang sostenía a una mujer inconsciente en sus brazos y luego entró en la habitación. La mujer tenía alrededor de treinta años y era hermosa. La última parte del video era obviamente el acto desagradable de Zhuang Qiang. Por desgracia, el video solo duraba tres minutos y en ese corto tiempo, Zhuang Qiang ya había terminado de hacer lo suyo. Hasta Chen Hao estaba avergonzado por lo que veía y también por la duración de ese video.
— Pero esto no será suficiente para destruir su reputación. ¿No se considera normal? —dio una sonrisa amarga.
El comentario de Chen Hao hizo que Bai Xiaofei se sintiera avergonzado.
— Joven Amo Chen, nosotros jugamos con las chicas a menudo, pero el caso de Zhuang Qiang es diferente. ¿Sabes quién es esta mujer? ¡Es su madrastra!
— ¡¿Qué?! Los ojos de Chen Hao casi se le salen de la cabeza... esta sería una noticia impactante.
— ¿Lo odias tanto hasta el punto de investigarlo? —preguntó sin poder reaccionar más que solo sonreír.
— Fue la Familia Zhuang la que nos jugó sucio. Joven Amo Chen, cuando el restaurante Ming Huang fue subastado, la Familia Bai planeó comprarlo. Incluso hicimos la oferta final y lo ganamos. Tenemos una regla tácita para este tipo de grandes subastas donde no haremos ninguna oferta en los últimos tres minutos. ¡Pero la Familia Zhuang hizo su oferta de forma solapada! ¡Eso es imperdonable! ¡Ellos subieron la puja en el último minuto! ¡Nos hizo daño, así que quiero vengarme de él!
Chen Hao lo entendió ahora. Bai Xiaofei y los otros no se atrevieron a tomar su venganza porque temían que Li Zhenguo los castigaría si se enteraba. Después de todo, era el responsable de estos asuntos y los conflictos internos entre empresas estaban prohibidos.
— ¿Por eso necesitabas mi consentimiento?
— ¡Si! ¡Solo tienes que asegurarte de que el Tio Li no nos castigue y nosotros haremos el resto!
Chen Hao guardó silencio y tomó un sorbo de vino.
Bai Xiaofei lo entendió al instante. Le hizo una seña a un compañero y este cogió el teléfono.
— Muy bien, relájense y disfruten del espectáculo. Después de eso, se escabulló a los bastidores.
Cuando Chen Hao estaba en bancarrota, había sidotiranizado e intimidado. Pero ahora que tenía una fortuna, ¿por qué debería aguantar a esos agresores? Por lo tanto, se alegró de que Zhuang Qiang pudiera probar de su propia medicina. ¡Además, meterse con su propia madrastra fue un acto demasiado despreciable!
La ceremonia comenzó sin problemas.
Ya habían llegado a la última parte de la ceremonia, que era el corte de la cinta. Zhuang Qiang tuvo que unirse al escenario como el hijo del presidente del restaurante Ming Huang.
— ¡Yifan, ven conmigo al escenario! Con suavidad, Zhuang Qiang agarró la mano de Zhao Yifan. Esta escena dejó a la multitud envidiosa. En especial a Yang Xia. Se quejaba en su corazón por su desafortunada suerte de haber conoció a Chen Hao, ese perdedor primero, luego a Lu Chen, que era solo un descendiente común de una familia rica. ¡Si tan solo pudiera tener a alguien de alto estatus como Zhuang Qiang para ser su novio!
Zhao Yifan estuvo de acuerdo sin dudarlo. Subió al escenario con Zhuang Qiang de la mano. Cuando pasó por la mesa donde Chen Hao y el resto se sentaron, echó una mirada hacia Chen Hao. Intentaba decirle que no importaba donde se sentara, siempre sería indigno.
Zhuang Qiang también miraba complacido a Chen Hao. Se sentía satisfecho de haberlo humillado en público. Quería venganza porque en toda su vida, su orgullo solo había sido herido una vez y ese pobre perdedor, era responsable de ello.
«Tenemos un largo camino por recorrer. ¡Haré que te arrodilles a mis pies, y no será tan simple como ser pobre!» se burló en su corazón.
Chen Hao continuaba disfrutando de su vino cuando el compañero de Bai Xiaofei regresó. El compañero asintió hacia Chen Hao, señalando que todo estaba en orden. Solo tenían que esperar al espectáculo.
Chen Hao miró a Zhuang Qiang, que estaba de pie con gran energía en el escenario. Su padre y su madrastra estaban allí. Notó que la madrastra de Zhuang Qiang estaba inquieta al verlo sosteniendo la mano de Zhao Yifan.
— Damas y caballeros, me gustaría presentarles a mi novia, ¡Zhao Yifan!
Zhuang Qiang llamó la atención de la audiencia hacia Zhao Yifan quien estaba sosteniendo sus manos.
Zhao Yifan era impresionante. Incluso Chen Hao, que no le tenía cariño, tuvo que admitir que en verdad era hermosa. Zhuang Qiang se sentía aún más orgulloso.
— Yifan, ¡saluda a la audiencia! —con suavidad le recordó a Zhao Yifan.
— ¡Buenas noches a todos, soy Zhao Yifan! —saludó a la audiencia muy nerviosa.
— Oye hermosa, ¿cómo conociste al Joven Amo Zhuang? O debería decir ¿en cuál de sus encuentros, el Joven Amo Zhuang logró atraerla con éxito?
— ¡Sí, dinos cómo, tenemos que aprender de la experiencia del Joven Amo Zhuang!
En el suelo, había muchos chicos de dinero cuya familia no era tan distinguida. Sabían que no tenían oportunidad de hablar con los de suma riqueza como Bai Xiaofei, así que solo podían adular a Zhuang Qiang.
— Conocí a Zhuang Qiang cuando era joven. El Tío Zhuang y mi padre fueron viejos camaradas. Confirmamos nuestra relación cuando Zhuang Qiang regresó del extranjero e hizo algo por mí que me conmovió a fondo.