Capítulo 56: ¿Por Qué No Podemos Detenernos Aquí?

Chen Hao volteó y vio a Yang Xia con indiferencia.

-Yang Xía, nunca olvidaré las cosas que dijiste. Fue
precisamente porque no me diste la espalda que sentí que aún había un poco de esperanza en mi vida.

¿Lo sabías? Me había prometido muchas veces que te daría todo de mí.

Hace un tiempo, cuando me dejaste, siendo franco, ese dolor que sentí aún no se ha desvanecido, y
lo sigo sintiendo ahora. ¡Siempre te desearé lo mejor!

»¡Siempre ha sido así y así siempre será! ¡Espero que tengas una buena vida!

Después de los sucesos de ese día, nunca podría regresar con Yang Xia. Y no lo decía simplemente
por decirlo, en verdad venía del fondo de su corazón.

Después de escucharlo, Yang Xia dejó de comportarse de manera histérica. Solo estaba enrojecida.

Tenía razón. Había una vez un hombre que la amaba tanto que estaba dispuesto a sacrificar cualquier
cosa por ella. Sin embargo, ella solo quería a alguien de quien pudiera depender. Incluso ahora, no
se hubiese atrevido a decir que había llegado a estar enamorada por completo de Chen Hao. Porque en ese entonces solo quería estar con alguien que la amara a ciegas. Pero después vio a muchas chicas con novios guapos y adinerados, algunas ni siquiera eran igual de bonitas que ella. Por lo tanto, su corazón empezó a vacilar. Antes de esto solo había escuchado hablar de Lu Chen, pero no lo conocía. Sin embargo, cuando estacionó su BMW justo frente a ella y la invitó a salir, Yang Xia se había conmovido mucho.

Chen Hao no era nadla en comparación a Lu Chen. Mientras terminaba con él, igual se había puesto
triste. Pero cuando luego recibió el IPhone de parte de Lu Chen el dolor pronto se desvaneció. Ahora Chen Hao era un hijo de nuevos ricos y tenía mucha riqueza. Mejor dicho, su fortuna era una de las más grandes. Ahora sí que estaba arrepentida. ¡Había perdido la oportunidad de estar con alguien muy importante!

Además, las palabras que Chen Hao había dicho recién fueron muy claras. ¡No había oportunidad que ellos volvieran a estar juntos!

Sintió como si algo la hubiera desnudado y la hubiese tirado a la calle. ¡Qué vergüenza!

-Bien, ¡entiendo! -lo miró con ojos llorosos y apretó el puño, habló muy claro, una palabra a la
vez-. Pero será mejor que recuerdes esto Chen Hao. No dejaré que me desprecies por siempre. ¡Uno de
estos días te haré morder el polvo!

¡Pagarás por toda la vergüenza que he sufrido hoy!

Secó sus lágrimas y lo miro con ira. Después, se arrancó el uniforme y lo arrojó con crueldad a los pies de Chen Hao y se fue.

Chen Hao miró fijamente la silueta en retirada. Tenía sentimientos encontrados acerca de esto, en
especial después de ver lo determinada que estaba Yang Xia justo en ese momento. Solo tenía una
cosa que decir: ¡Te deseo lo mejor de lo mejor!

Fue un incidente muy inesperado. Zheng Yue, quien justo acababa de aguantar una bofetada, no se
atrevió a decir nada. Aunque fuera su ex novia, había sido la novia de Joven Amo Chen en algún
momento. Solo pudo tragarse su ira a regañadientes.

El grupo luego llegó al cuarto privado. El Director Huang de la Oficina de Administración de
Negocios y el Director Song del Buró de Educación se reunieron con Chen Hao con un objetivo ya en mente. Estaban aquí debido a algunos problemas con inversiones y fondos. No solo eso, también estaban ayudando a niños de algunos de sus trabajadores con los preparativos para la Escuela Primaria Esperanza y muchas otras cosas. Esperaban obtener ayuda de parte del Grupo Comercial Jin Ling. Estaban originalmente bajo la administración de su hermana, Chen Xiao, pero ahora, ella le había asignado estos proyectos y él entendió su propósito. Quería ganar su favor, así que firmo los contratos con gusto. Por supuesto que Huang Weimin y Song Qiusheng estaban muy agradecidos.

Hay que considerar que todos los contratos que firmó Chen Hao no eran para nada fáciles. Por
ejemplo, Jin Ling quería construir al menos veinte Escuelas Primarias Esperanza.
Claro que la comida procedió sin problemas. Chen Hao también había podido conocer a varios hombres
de negocios de Jin Ling.

-Joven Amo Chen, esta es mí tarjeta. ¡Si necesitas algo en el futuro, solo llámeme! -dijo Huang
Weimin antes de irse, luego tomó de Chen Hao de la mano y se despidió.

Nunca hubiese esperado que el Joven Amo Chen, quien era el epítome absoluto de los bíllonarios de
China, fuese una persona tan humílde. Era muy diferente a la persona que había Imaginado que era y,
además, le había ayudo bastante. Aun así, Chen Hao sabía que le faltaba desarrollar sus aptitudes
sociales, pero no había prisa, ¡podía tomarse su tiempo!

-¡Joven Amo Chen!

Una vez que los invitados se habían ido, Chen Hao se preparó para irse también. Al día siguiente
tenía el examen de conducir para obtener su licencia. ¡Debía regresar a practicar! En ese momento, Zheng Yue se acercó con el rostro enrojecido de vergüenza. Después de todo. justo acaba de aguantar una bofetada. Estaba un poco avergonzada de pie frente a él. Sin embargo, era Chen Hao quien estaba más avergonzado. Esta línda estudiante de último año siempre había sido muy cautivadora. ¡La última vez que la había visto casi se rinde ante su belleza!

-¿Qué pasó? -preguntó.

-Es así, Joven Amo Chen. No tengo más turnos por la tarde, me pregunto si lo puedo llevar a su
casa, ya que mi casa y la facultad están por el mismo camino -contestó acercándose a él a
propósito.

Después de haberse enterado de que Chen Hao era una persona tan humilde y reservada, aparte del
sentido de respeto hacia él que había crecido en su corazón, también se había vuelto más directa al
acercarse a él.

Después de todo si fuese a tener una buena relación con él, o hasta tener la oportunidad de
acostarse con él, estaba dispuesta hacerlo, aunque signlflcara1 convertirse en no más que su
instrumento de desahogo.