-¿Eh? ¿Este es el asistente que encontraste?
Las tres emisoras estaban un poco confundidas. Aunque Chen Hao tenía características delícadas, la
manera en que se vestía lo hacía verse desaliñado. En comparación a él, los asistentes que encontraron eran considerados como chicos bonitos quienes se vestían de manera brillante y elegante.
Uno de ellos era pretendiente de una de las emisoras. Conducía su camioneta para llamar la
atención. El contraste era muy obvio. Después de todo, era una transmisión en vivo al aire libre.
La gente la juzgaría basada en su apariencia.
Ahora que había un ñoño anticuado siguiéndolos, ¡degradaría definitivamente su estatus!
-Sí, no pude encontrar a un asistente a tiempo, ¡así que no tuve más opción que traer a uno de
nuestros compañeros para ayudar! -sintió vergüenza.
Era tan humillante.
-Jaja, puede ayudar a cargar las cosas al margen. No tengo ningún problema en sostener dos
teléfonos para grabar la transmisión en vivo -dijo en ese momento uno de los chicos que miraba a
Chen Hao y agitó la cabeza con una sonrisa irónica. Se escuchaba el desprecio en sus palabras.
-Creo que Huang Van tiene razón. ¡Será mejor que nos ayude a cargar las cosas! -sugirió una de las
linda emisoras.
-Estoy de acuerdo. Chen Hao, pásale él teléfono a Huang Van. ¡Solo tienes que cargar las cosas y
seguirnos desde lejos! -dijo con prisa Han Siyu.
Chen Hao estaba molesto y pensó: «Mierda, estoy aquí para ayudarte. ¡No me pagan por ser tu mensajero!».
Pero después de pensarlo un poco, no tenía ganas de regresarse ya que ya estaba allí.
«¡No importa! No me Importa si me miran con desdén. Cargar cosas será un trabajo sencillo para mí»,
suspiró.
-¡Qué tal mis seguidores! ¡Buenas tardes!
-¡Buenas tardes a todos mis bebes!
-¡Soy su amorcito! ¡Los extraño tanto!
La transmisión en vivo había comenzado. Las lindas emisoras dieron sus saludos de presentación.
-Huang Van, rápido, ¡apunta la cámara al auto de lujo! -la chica llamada Wang Xiaoti, q1Uien tenía
cabello rubio, llamó emocionada.
Han Siyu también se había acercado al Lamborghini. Estaban sonriendo y se divertían. Chen Hao
miraba desde un lado. Estaba aburrido, y sacó su teléfono para entrar a la sala de transmisión en
vivo de Han Siyu. Sin esperarlo, la popularidad de su transmisión en vivo era algo alta. Los comentarios estaban surgiendo muy rápido en la ventanilla de mensajes.
-Dios mío, ¿qué modelo es?
-¡Es un Lamborghini Reventon con las más lujosas especificaciones! ¡Cuesta más de 18 millones!
-¡Es cierto! El interior de ese auto, ;es de alta clase a nivel mundial sin duda! ¿Podemos echar un
vistazo al auto?
-Maldición, una vista completa del auto, por favor. ¡Déjanos verlo por completo!
-¿De quién es ese auto? ¡Seguro de un heredero adinerado!
-¡Qué auto deportivo tan padre! ¡Brrrum, brrrum!
Los comentarios no dejaban de llegar.
Las cuatro salas de mensajes estaban animadas.
En ese momento, nadie estaba viendo a las lindas emisoras. La atención estaba puesta sobre el auto.
Han Siyu y las chicas hacían su mayor esfuerzo para pedirles regalos a sus admiradores mientras
cumplieran con sus peticíones. Los dejaron ver el auto de todos los lados. Los regalos que recibieron eran abrumadores. ¡Había un tipo adinerado en la sala de mensajes de Han Siyu que le envió un regalo con un valor de 6,000! Levantó la popularidad de esa sala de mensajes al máximo.
-¡Gracias, Señor Jiang Jiu! ¡Te amo, besos y abrazos!
La transmisión en vivo procedió. Pronto, pasó una hora. Las cuatro chicas dejaron de moverse. Solo
siguieron su transmisión en vivo al lado del Lamborghini. Todas atraían a un buen número de audiencia en sus salas de mensajes.
-Vaya, ustedes no me están poniendo atención. ¡Su bebe va a tomar un descanso ahora!
Más admiradores solicitaban ver el auto.
El tener que levantar sus voces para interactuar con la audiencia en la sala hizo que Han Siyu y
las demás se cansaran.
-Cariño, ¡déjame tomar un poco de agua antes de seguir con la transmisión!
-Xiaoti, ¿tienes agua?
-No trajimos. Ve a comprar. ¡Mi garganta está seca!
-Sí, ¡Yo también tengo sed! ¡Tengo ganas de comer sandía!
Las chicas dijeron de manera juguetona.
-Bien entonces, Chen Hao, ve a comprar algo de agua y una sandía. ¡Apresúrate! -le ordenó Han Siyu.
Chen Hao estaba frustrado.
«¡En verdad están dando por hecho mi ayuda! Siendo honesto, también tengo sed y tengo ganas de
comer sandía después cargar tantas cosas», pensó.
No tuvo más opción que ir por esas cosas. Compró una docena de aguas minerales y una sandía y un
cuchillo para cortarla. Estaba cansado para cuando había regresado porque había cargado todo el
equipo consigo. Han Siyu y las demás seguían grabando su transmisión en vivo. Estaban mostrando una
toma del auto entero de lejos.
-Chen Hao. ¡rápido, corta la sandía! ¡Dios mío! ¿Por qué compraste una sandía entera? Imbécil, ¿por
qué no le pediste al vendedor que la cortara antes de regresar? ¡No sé qué decir! -gritó Wang Xiaoti siendo muy grosera y sin mostrarle ningún respeto.
«Mierda, si no fuera porque tenían prisa en comerse la sandía, hubiera esperado a que me la
cortaran. ¡Perras!», maldijo en silencio.
«Parece que tendré que cortarla yo mismo. ¿Dónde lo cortaré? ¿Seguro en el piso no se puede cierto? Mmm... ¡Ya sé! La puedo cortar sobre el capó que sirve de mesa. De todos modos, este Reventon no se daña con mucha facilidad», caminó hacia el auto.
¡Pum!
Lanzo las aguas minerales al capó del auto. Después de eso, puso la sandía y le dio una cortada afilada. Han Siyu y el resto estaban sorprendidas por completo después de ver el espectáculo. Las transmisiones en vivo se detuvieron a la mitad.