Capítulo 98: Encuentro en la entrada de la Mansion de las Nubes

Chen Hao se puso de pie y se dio cuenta de que había mucha gente en la cafetería. Todos lo observaban con asombro en ese momento, sobre todo los que estaban hablando de la Mansión de las Nubes.

Al parecer, Chen Hao estaba muy absorto en su conversación y hablaba con Huang Yonghao que se le había olvidado dónde estaba. Como es lógico, sus palabras sorprendieron a la multitud.

¡Pff!

Alguien estalló en risas, rompiendo así el silencio que había en la cafetería.

• Me lleva ... ¿este tipo es un imbécil? ¿Dijo que quería ver la Mansión de las Nubes?

• Jajaja, ¿puede ser que su trabajo le esté dando demasiada carga y lo esté volviendo loco?

• ¡Hasta dijo que es una persona importante! ¡Seguro que quiso decir que recibe a la gente importante poniéndose de rodillas ante ellos! ¡Jajaja!

• Que tarado…

Todos se echaron a reír a carcajadas. Algunos hasta se burlaron de Chen Hao sin reserva alguna. Él solo se limpió la boca y negó con la cabeza sonriendo con amargura. ¡Era muy difícil poder explicarles la situación! Así que tomó un taxi frente a la entrada de la escuela y llegó al pie de la montaña, donde se encontró la sala de exhibición de la Mansión de las Nubes.

La entrada estaba repleta de autos de lujo. Hubo un flujo continuo de personajes de nobleza que entraban y salían. De pie al frente de la entrada, vio dos caminos evidentes que llevaban al

interior del salón. Uno de los pasillos estaba reservado para los invitados de honor, mientras que el otro era para los clientes comunes. Por supuesto, los clientes comunes eran extraordinarios por derecho propio. Solo era una cuestión de relatividad.

«¿Qué? ¿Dónde está Huang Yonghao? Pensé que había dicho que esperara frente a la entrada reservada para los clientes importantes», Chen Hao no vio a Huang Yonghao en ningún lado.

«¿Había otra entrada al fondo del pasillo exclusivo?», lo consideró por un momento. Entonces. levantó su pie y estaba a punto de entrar.

• ¿Chen Hao?

De pronto, una voz de mujer llamó detrás de él. Hubo un toque de sorpresa y duda en su voz. Se dio la vuelta y vio a una bella mujer vestida con un uniforme negro. Era alta y tenía un cuerpo sensual. Su rostro era hermoso sin comparación. No pudo evitar sentirse sorprendido.

• ¿Tang Ran?

¿Acaso no era la prima hermana de Su Tongxin? ¡¿La que le provocó tantos problemas durante el cumpleaños de la abuela de Su Tongxin?! Al saber que el Lamborghini le pertenecía, recordó que ella tenía una mirada bastante complicada. Al principio, luego de que terminara el incidente, pensó que no la volvería a verla por un largo tiempo. No sabía cuál iba a ser el desenlace de su relación con Su Tongxin. Hasta ahora ni siquiera estaba seguro. Solo había comido con ella de vez en cuando estos dos últimos días. Y de repente, se volvieron a encontrar en este lugar. Tenía una etiqueta en el pecho que decía: Directora de Diseño, Tang Ran.

«Maldita sea. ¿ella diseñó la Mansión de las Nubes?, sabía que Tang Ran era bastante capaz y estudiosa. Además, era distante y fría.

¡Pero no esperaba que ella fuese así de hábil!

«Espera, ¿cuántos años tenía? ¡Solo tiene 25 años!».

Como si estuviera satisfecha con la mirada de Chen Hao, Tang Ran sonrió de forma casual y dijo:

• Jaja, hoy es el día de la exhibición de la Mansión de las Nubes, ¿por qué estás aquí?
• Vine ...

• ¡No me digas que estás aquí para ver la exhibición! Puedes echar un vistazo, pero déjame dejar claro que nunca podrías permitirte esta casa. Sé que has ganado unos cuantos millones en la lotería y hasta te compraste un auto de lujo. Pero ni pienses en comprar esta Mansión. No sé cuánto dinero te queda. ¡Si estás pensando en comprar una casa, puedo recomendarte unas cuantas de precio normal!

Antes de que Chen Hao lograra terminar su frase, Tang Ran levantó sus gafas y dijo con frialdad. Sí, se impresionó cuando vio ese auto de lujo de veinte millones. Incluso llegó a sospechar que él era un nuevo rico. Al parecer, no lo era. Solo era un fracasado que se había hecho rico ganando la lotería. No podía creer que se sintiera muy arrepentida ese día por maltratarlo. ¡Ahora que lo pensaba, se sintió muy ridícula en ese momento debido a que en realidad quería competir con su prima por Chen Hao! ¡Qué asco! ¡Casi vomita con repugnancia!

• ¡Solo quería ver un poco!

Chen Hao sabía que había una pizca de desprecio en las palabras de Tang Ran. Él no quería involucrarse mucho con ella, por lo que solo pudo decir eso.

• Jaja, puedes echar un vistazo. Aparte de eso, tengo que advertirte. Después de todo, eres el novio de mi prima. Nunca te compares con esos nuevos ricos y aquellos que se les asemejan. Los negocios de sus familias valen, mucho ,más que los tuyos. Solo podrás quedarte sentado sin hacer nada hasta que tu dinero se acabe algún día. Sinceramente, con tus capacidades, dudo mucho que seas capaz de mantener a mi prima.

Tang Ran estaba tan orgullosa como un pavo real: «¡Claro, tuviste suerte! Ganaste decenas de millones e incluso te paseaste en un Lamborghini de 20 millones».

Pero después de una investigación exhaustiva, solo pensaba que era un in1bécil, ¡un completo idiota! ¡No tenía sentía nada más que eso por él después de lo ocurrido! Así que, cuando se encontraron, ella no le ahorró un sermón. Por fin se vengó de la última vez que su orgullo había sido herido.

• Tang Ran, ¿él es el cuñado de quien nos hablabas? ¿El que ganó la lotería y compró el Lamborghini? ¡Es bastante guapo! ¿Por qué se está comportando así?

• Parece una persona cautelosa. Me temo que nunca ha presenciado una ocasión tan grandiosa ni ha visto a tanta gente hasta ahora. Es lógico. Fue muy pobre durante mucho tiempo y había vivido toda su vida en el campo. Por supuesto que nunca tendría este tipo de conocimiento y experiencia. Es inevitable que, con tanto dinero, tuviera la mentalidad de un advenedizo.

• Sí. Sin duda se va a arrepentir luego de haberse gastado todo su dinero. Para entonces sería demasiado tarde. Hay otras maneras de gastar ese dinero, como usarlo para superarse, pero él gastó cientos de miles para participar en este tipo de evento de alto nivel. ¿Acaso tiene que llegar a tanto?