*narra Axel*
Acababa de terminar de follar con una chica de la universidad, que a cada rato se me insinuaba y pues no podía desaprovechar la oportunidad.
Me levanté de la cama y me vestí rápidamente para poder irme.
Salí de la casa para poder irme a la mía, ayer tuve una fiesta fenomenal a la que fui con Ian mi mejor amigo, apuesto que el ahora debe estar en las mismas condiciones que yo.
Llegué a mi casa, entre a la sala donde estaba papá bebiendo, como siempre.
Aún no supera que mamá nos dejó, pero ya pasó hace muchos años.
Yo tenía exactamente diez años cuando pasó todo, ella nos dejó ahí con la estúpida excusa que esta no era la vida que quería, dejándonos con el corazón roto a los dos, no le importó lo que sentíamos.
Me dolió tanto, recuerdo que llore muchas veces de pequeño preguntándome que era lo que había hecho mal, escribiendo por las noches en una hoja de papel todos los defectos que tenía para poder mejorar y cuando mamá regresará me podría amar.
Es por eso que no creo en ese estupido sentimiento del amor, ese sentimiento que te hace depender de la otra persona.
Por qué yo se lo que se siente, yo se lo que se siente llorar día y noche por qué tu mamá vuelva.
Subí a mi cuarto para poder dormir todo lo que me faltó la noche de ayer.
Llegué me metí en la ducha para bañarme y poder dormir relajado.
Me acosté una vez terminado de bañarme y ponerme unos boxers para poder dormir.
No habría pasado ni diez minutos que mi celular empezó a sonar, indicándome una llamada entrante.
Agarre el celular de mala gana y descolgue la llamada.
*inicio de la llamada*
- ¿Hola? - ni si quiera me fijé quien llamaba
- Que tal pásaste la noche - me preguntó Ian con un tono de voz pícara
- Ya sabes lo común, Yaritza me estaba coqueteando y pues no perdí la oportunidad - le dije como lo más normal del mundo, ya era propio en nosotros - ¿y tú?
- bueno también pero lo hice con Lorrey, dios la pasé súper bien - me contestó - oye te parece si en la tarde vienes a mi casa ya sabes hay que aprovechar el fin de semana.
- claro pero en la tarde, ahora quiero dormir - le contesté y era verdad en serio tenía unas terribles ganas de dormir
- ok, adiós
*fin de la llamada*
Bueno está tarde iría a la casa de Ian, tal vez juguemos videojuegos, es lo que siempre hacemos cuando estoy en su casa.
Lo bueno que la mayoría de tiempo sus padres no paran en casa solo están Ian y su sexi hermana menor Lía, aunque no se lo puedo decir ni de broma a Ian, es muy sobreprotector con su hermana, según el porque pueden jugar con su hermanita y tenerla solo por una noche igual que como lo hace él con las demás mujeres.
El cuida mucho a su hermana, creo que por eso la pobre nunca ha tenido novio.
Pero ese no es mi problema, sinceramente no me importa.
Lentamente empecé a sentir los párpados pesados, así que sin más me deje caer en los brazos de Morfeo.