Tras atravesar el intrincado laberinto de senderos, Mei Lin guió a Nick y Stiven hasta una pequeña pero elegante casa de estilo tradicional chino, oculta entre las frondosas montañas.
- Hemos llegado. Aquí vive mi abuelo, él podrá ayudarnos a encontrar la cura que necesitas - dijo Mei Lin, volviéndose hacia Nick.
Al entrar, fueron recibidos por un hombre de avanzada edad, de aspecto sereno y mirada sabia. Sonrió con calidez al ver a su nieta acompañada por los dos jóvenes.
- Bienvenidos, detectives. Mei Lin me ha hablado de ustedes y de su búsqueda. Pasen, por favor, y siéntanse como en su casa.
Los condujo hasta una amplia sala, donde varias personas de diversas edades los observaban con interés.
Nick, aún débil pero intrigado, preguntó:
- ¿Quiénes son todas estas personas? ¿Acaso son parte de su equipo?
El anciano sonrió con serenidad.
- No temas, detective. Ellos son como nosotros, gente que busca preservar el delicado equilibrio de estas montañas y proteger los secretos que en ellas habitan. Algunos son cultores de antiguas artes místicas, otros simplemente guardianes de la naturaleza. Todos están aquí para ayudarnos en nuestra misión.
Mei Lin se acercó a Nick y Stiven, hablando con voz suave.
- Mi abuelo es el guardián de este lugar sagrado. Él conoce los secretos de las montañas y sabe dónde encontrar la cura que buscas. Pero el camino no será sencillo. Deberás probar tu valía y superar las pruebas que se te presenten.
Nick asintió con determinación, sintiendo cómo la esperanza volvía a llenar su corazón.
- Estoy listo para lo que sea. Haré lo que sea necesario para recuperar mi salud y detener a quienes nos han hecho esto.
El anciano, complacido por la resolución del joven detective, levantó una mano en señal de asentimiento.
- Entonces, que así sea. Mañana, al amanecer, partiremos juntos hacia el lugar donde se encuentra la cura. Pero esta noche, descansen y prepárense, pues les aguarda un viaje lleno de retos y peligros.
Dicho esto, los invitó a acompañarlos a la gran mesa, donde compartirían una cena repleta de sabiduría y camaradería, forjando vínculos que les servirían de guía en los desafíos por venir.