Cuando llegó la noche, Nick, Stiven, Zheng y Mei Lin se dirigieron juntos hacia el festival del pueblo. Las calles estaban llenas de puestos coloridos, música tradicional y gente disfrutando de la celebración.
"¡Wow, este festival se ve increíble!" exclamó Stiven, mirando a su alrededor con asombro.
Mei Lin les sonrió y les tomó de la mano.
"Vengan, les voy a enseñar algunas de las tradiciones de este festival" dijo, emocionada.
Los guió a través de la multitud, mostrándoles los diferentes puestos de comida típica, las danzas y las exhibiciones culturales.
"Miren, esta es una danza muy antigua que se baila durante el festival" explicó, mientras una troupe de bailarines ejecutaba un número colorido y enérgico.
Nick y Zheng observaban fascinados, mientras Stiven intentaba seguir los pasos, riendo cuando se equivocaba.
Mei Lin también les hizo probar deliciosos platillos, como dumplings y fideos fritos, y les contó historias sobre el significado de cada uno.
"Esta comida es una ofrenda a los espíritus de nuestros antepasados, para honrarlos y agradecerles" les dijo, con orgullo.
Conforme avanzaba la noche, los cuatro amigos se relajaron y disfrutaron de la alegría y la calidez del festival. Bailaron, rieron y compartieron momentos llenos de diversión.
"Gracias por mostrarnos todo esto, Mei Lin" dijo Nick, mientras observaban los fuegos artificiales iluminando el cielo nocturno. "Es realmente maravilloso".
Mei Lin sonrió, feliz de poder compartir sus tradiciones con ellos.
"Me alegro de que les haya gustado. Este festival es una parte importante de nuestra cultura, y es genial poder celebrarlo juntos".
Stiven y Zheng asintieron, sintiéndose afortunados de poder vivir esa experiencia.
Mientras se alejaban del festival, los cuatro amigos se sentían renovados y listos para enfrentar los desafíos que les esperaban. El festival les había brindado un merecido respiro y una oportunidad de conectar aún más con la cultura local.