Después de un rato entra Althea y Deimos exhaustos, Althea volteo a verme y sonrió, rápidamente se acercó a mí y tomo mis manos las acerco a su rostro y me dijo que estaba feliz de que nada me haya pasado, mi corazón palpito y mi cara se sonrojo, Deimos noto mi reacción y en voz alta dijo.
-Althea no olvides que él es un humano y tu humano, no olvides que ella pertenece a este mundo
Althea se levantó y me miro sonriendo
-disculpa no nos hemos presentado de manera correcta, como ya sabes soy Althea protectora y guardiana del mundo de agrona, él es Deimos mi guardián y uno de los elegidos a ser mi esposo para gobernar el mundo de agrona, él es Lir mi segundo guardián y también elegido a ser mi esposo, este lugar es el bosque encantado de agrona donde la maldad no puede asechar, te hemos traído aquí al no saber dónde más poder sanar la herida que te ha dejado Manticora una de las criaturas malignas de este mundo.
Todo parecía un sueño, una completa locura y me pregunte a mí mismo, ¿Cómo es que yo puedo ser el protector del mundo humano si ni siquiera pude defenderme de esa cosa llamada Manticora?, me levante aun un poco débil y pedí una disculpa, Althea me pregunto qué porque me disculpaba y le dije que no podía ayudarlos, que era muy débil para pelear con criaturas así, Althea agacho la mirada y una vez mas dijo
-pero tú eres el elegido, Ethan por favor dentro de ti se guarda un poder asombroso yo sé que puedes encontrarlo…
- has dicho que solo yo soy capaz de proteger el mundo humano?
-si así es
- y si no lo hago el mundo se destruiría
- y no solo el tuyo el nuestro también, necesitamos enviar de vuelta a todas las criaturas malignas que se han liberado así ambas puertas se cerrarían y la paz en ambos mundos llegaría nuevamente
-eso quiere decir que..?
-los mundos no pueden estar conectados porque causa un desequilibrio en el espacio y tiempo del universo
Me quede pensando por un momento y dije, si he de morir que sea con honor y no por cobarde, acepte luchar con ellos y detener el catástrofe, proteger la tierra es mi trabajo, proteger a los que quiero, proteger a los que amo (pensé en Abie)
Mi cuerpo empezó a sentir una fuerte energía, quizá esa era la clave para liberar mi fuerza, Althea me ofreció una armadura especial para mí, ella junto a Deimos y Lir ya portaban la suya, viendo bien a Althea era una chica muy hermosa, parecía sacada de un videojuego de los que tanto me gustan, se veía fuerte, sin dejar de lado su sensibilidad y su bondad, me puse mi armadura y en ese momento se abrió un portal, Althea me tomo de la mano y dijo, empecemos con el juego.
Fue una experiencia asombrosa pasar por ese portal, pero que fortaleza tiene esta chica pensé, me sonroje una vez más, al llegar a la tierra Deimos y Lir me entregaron 2 especies de piedras preciosas jamás vistas antes aquí en la tierra, dijeron que eran 2 espadas que al tener resonancia conmigo se liberarían y podría utilizarlas a mi antojo se introdujeron en mis muñecas y esa noche comenzó la cacería de las bestias.
Al parecer todo estaba tranquilo hasta que encontramos a una criatura llamada Grifo, ya había leído antes sobre esta criatura antes según esto eran utilizadas por magos para custodiar tesoros, tienen la cabeza de un águila gigante junto sus patas frontales; el cuerpo y las patas traseras son de león, a lo que sabía eran bestias feroces y muy poderosas, comenzó la lucha contra Grifo Althea llamo a Deimos y Lir convirtiéndose en las piedras que ella portaba, me hizo pensar que ellos compartían su energía con ella para darle más fuerza y poder, sus movimientos eran asombrosos, su báculo inminente al parecer era como indestructible, intente concentrarme para manejar las espadas pero por más que intentaba no podía, ten confianza en ti mismo grito Althea, me desespere un poco cuando note que Grifo venia hasta mi Althea pronuncio fuerte mi nombre “Ethan” parecía que todo estaba perdido sin embargo no sentí dolor en lo absoluto, para mi sorpresa la que había recibido el golpe fue Althea, Grifo consiguió escapar y Althea cayó al suelo, de las piedras salieron Deimos y Lir, preocupados se tiraron al suelo junto a Althea.
-Althea porque no nos utilizaste par no recibir el gulpe (Lir)
-no iba a arriesgarlos chicos, ustedes son mi familia
-pero Althea es nuestro deber protegerte hasta la muerte (Deimos)
Me sentí un completo inútil, me acerque a Althea cuando Deimos me golpeo
-es tu culpa que Althea este herida (Deimos)
-basta Deimos no es nada grabe, nada que un buen ungüento de mandrágora no pueda curar, estoy bien tranquilo
Una vez más me acerque a Althea toque su herida como pidiendo disculpa y esta comenzó a sanar de una manera sorprendente, los 4 nos quedamos asombrados, Althea me miro y me pregunto que como había hecho eso, no supe contestar, no sabía que decir ya que ni yo lo comprendía, Althea dijo tu y yo tenemos más que una simple conexión de mundo, sé que existe algo más.