Eigeroya

_Capítulo 3: Eigeroya_

Al día siguiente, Dave se despidió de los habitantes de Egersund y siguió a Liam hacia Eigeroya, el segundo pueblo. A medida que se acercaban, Dave pudo ver que las casas eran de piedra y tenían techos de metal, con máquinas y engranajes visibles en las calles.

Liam sonrió al ver la sorpresa en el rostro de Dave.

"Sí, somos un pueblo de inventores y innovadores", dijo. "Aquí, la tecnología y la ciencia son fundamentales para nuestra supervivencia".

Dave se sintió emocionado al ver las máquinas y los dispositivos que había en el pueblo. Conoció a una chica llamada Emma, que estaba trabajando en un proyecto de energía renovable.

Emma le explicó a Dave cómo utilizaban la energía del viento y del sol para generar electricidad y hacer funcionar sus máquinas.

Dave estaba fascinado.

"Es increíble", dijo. "Nunca había visto algo así".

Emma sonrió.

"Somos un pueblo de solucionadores de problemas", dijo. "Y siempre estamos buscando nuevas formas de mejorar nuestra vida".

Mientras exploraban el pueblo, Dave conoció a un chico llamado Mateo, que estaba construyendo un robot.

Mateo le explicó a Dave cómo funcionaba el robot y cómo lo utilizaban para ayudar en las tareas del pueblo.

Dave se sintió agradecido por la hospitalidad de los habitantes de Eigeroya y se dio cuenta de que había mucho que aprender de este nuevo mundo.

Al final del día, Liam lo llevó de regreso a la entrada de la caverna.

"Mañana irás a Midbrodoya", le dijo. "Allí, aprenderás sobre la magia y la espiritualidad de nuestro mundo".

Dave asintió, emocionado por la nueva aventura que le esperaba.