17. ¿Y esta? 2 misiones, dos semestres. El comienzo de un misterio...

No me quedaba de otra que llevarla a la casa, que bueno que el terreno es grande y tiene muchos lugares para esconderse.

deje a Akimi en uno de “los graneros”, no podía aparecerme y contarle todo a todos así de la nada. También tenia clases a las que asistir.

 No quería ir a mi cuarto y ver a Juro de la nada y tener que mirarla a los ojos, me fui al cuarto de Kaito, Lia había salido así que no había problema con que me quedé hasta la hora de irse a la academia. Me puse la ropa que me llevé para ponerme en el pueblo ya que la de Kaito no me queda, ciertamente… el es mas pequeño que yo de estatura.

Cuando nos íbamos la vi… ella me estaba mirando y Kirito estaba algo mas lejos de lo normal de ella, yo me sorprendí, pero mantuve mi distancia porque pensaba que ella solo se había peleado con el y que era una de esas peleas de 5 minutos, o algo así. A nosotros no nos darán mucha clase porque ya teníamos 3 años de educacion en casa, duraremos alrededor de 1 mes completando misiones que nos servirán como pruebas, de hay van a saber si estamos aptos para certificarnos.

Por otro lado, los mas pequeños (13, 15 etc…), tienen que durar años en sus estudios.

Al llegar nos dieron las misiones y teníamos que hacer grupos de 4, nos faltaba alguien.

De la nada apareció una voz muy conocida que decía – yo puedo ser la ultima de su grupo – me voltee y vi a Akimi detrás de mi, ella, al parecer, era una estudiante repetidora de la academia ya que su padre quiere que tenga la mejor educacion.

Juro acepto fácilmente, pero yo estaba algo preocupado, como siempre Juro y yo estábamos en el mismo grupo, esta vez estabamos Kira, Juro, yo y Akimi. De alguna manera ella conocía a Akimi, y parece que ella la conocía mejor que nadie ya que Akimi, según ella, estaba destinada a ser mi pareja predestinada. Con un pasado dudoso de nuestra relación ella la eligió para hacer ese papel, todos nos quedamos boquiabiertos menos ella y Akimi, parece que ella lo sabía, no se de donde esa chica lo sabe todo. Juro se vio algo incomoda luego de unos minutos de haber partido a la misión.

La misión consistía en rescatar a una chica de una especie de troles mutados que fueron creados por los Onis. Rivales de los espiritistas, y demonios nativos de acá, Japón. Resulta que la chica es esencial para ellos, ¿que representa exactamente? No lo se, pero eso no es importante según nos dijeron los informantes.

Partimos a la montaña Rio, donde nos dieron un mapa de el lugar. Fuimos al primer obstáculo en donde hicimos una supervisión del lugar, luego nos infiltramos y decidimos pasar sin hacer ningún alboroto por la capital del lugar. Íbamos muy bien asta que nos dimos cuenta de que nos seguían. Unos guardias se dieron cuenta de que no éramos de ese lugar porque todos, sorprendentemente, se conocen y saludan. Ellos no eran muy buenos con los que entraban a su capital sin ser nativos, así que les avise a las demás para caminar mas rápido a ver si los perdíamos, cuando comenzamos a caminar rápido ellos también lo hicieron, y hay nos dimos cuenta de que si nos estaban siguiendo. Al final terminamos corriendo sin darnos cuenta, como no teníamos de otra nos dirigimos a un área basia que había casi saliendo de la capital. Hay nos detuvimos y esperamos a que llegaran. Ya posicionados nos quedamos así asta verlos.

¿Listas? En tres… dos… uno…

Dije eso mientras veía que se acercaban.

La primera que ataco fue Kira, entro con una barrera distractora de doble espada mientras que Juro, impulsada por las alas de Akimi, noquea a la mayoría con un hechizo de ataque de segundo nivel, llegando mi turno yo decidí que iba a sacar uno de mis trucos debajo de la manga para acabar con todo este absurdo escenario. Moví mis manos en línea recta, ambas yendo en distintas direcciones, a su paso se podía ver un báculo de brillo saliendo de el movimiento de mis manos en señal de creación. Cuando termine de sacarlo lo sacudí y les lance una ola de energía, luego otra y luego otra. Y con esa secuencia de olas, mas los ataques de las chicas pudimos vencer fácilmente a esos guardias, que por cierto, eran demasiado flexibles y habilidosos como para ser guardias normales.

Cuando terminamos las chicas se tiraron al suelo y comenzaron a reír, yo, por otro lado, mire a mis alrededores para disimular la dirección que estaba viendo que era al techo de una casa de 3 pisos. En el techo habían dos personas que parecían muy siniestras y profesionales. Comencé a sacar mis propias conclusiones sobre lo que vi…

¿personas en el techo de una casa de tres plantas mirando una batalla en una ciudad tan tranquila? ¿guardias demasiado bien entrenados para el lugar tan deteriorado y sin importancia que ellos están custodiando? …

Hay sucedía algo muy sospechoso y estaba dispuesto averiguar que era.

Al salir de esa ciudad nos encontramos en un bosque casi desierto donde nos tendieron una emboscada.

• ¡Lo sabía! – grite.
• Ustedes no son guardias preocupado por el bienestar de su ciudad, ¿o me equivoco? – me miraron algo mal pero obtuve la respuesta que necesitaba para confirmar mis sospechas.
• No, no lo somos y ustedes no son pueblerinos que vienen de lo mas profundo de este lugar – me agrada esta chica.
• Estas en lo cierto, no, no lo somos – no tenia de otra que revelar parte de nuestra identidad, aunque no planeaba ser yo el que revele nuestros planes.
• Oye, ¿guardias falsos? ¿chica extraña que nos hace una emboscada? ¿Ángel sonriendo?, ¿qué pasa aquí? – no entiendo como Juro no se dio cuenta de nada al principio, y mucho menos como puede preguntar eso estando amarrada y tirada en el piso frente a unos completos extraños.
• Lo que pasa aquí es que nosotros somos espías del otro lado, y ustedes vienen con nosotros para que nuestro jefecito este feliz porque… – ¿okey? – tonto no le digas tanto – asta yo le daría un buen puñetazo a ese estúpido.
• Pero ella quería saber – si será idiota…
• Gracias por la información, pero tendremos que irnos –
• Si fuera tu no lo intentaría, la soga es… - Juro intento quemar la soga con sus poderes, pero lo que termino haciendo fue quemarse a ella misma con una descarga electro energética que hizo que se quedara inmóvil con solo acceso a mover la cabeza.