Simples desconocidos que un día cruzamos miradas,
Donde las sensaciones de nuestro cuerpo, nos hicieron un llamado,
Anunciando de sobre manera que una hermosa amistad, estaba ya por nacer;
O eso es lo en un principio la perspectiva del ambiente nos decía,
Pero en realidad, todo esto termino convirtiéndose,
En un profundo amor.
Miro los días llenos de luz,
Al igual que miro los días tan llenos de turbulenta lluvia,
Y me alegro al saber, que no importa ya el tiempo en que me halle,
Pues mientras te tenga a mi lado,
Cada día será siempre muy hermoso.
Las lágrimas pueden que caigan con fuerza,
Y es verdad que habrá días llenos de molestias, donde el orgullo sea muy feroz,
Pero, cariño mío, siempre ten en cuenta que el amor, con una simple pelea,
No es capaz de destrozarlo, y por mi parte,
Yo lucharé por ti.
En la infinitud de mis secretos,
Hay uno que siempre al pensarlo, mi corazón con fuerza late,
Y es porque en el interior de ese misterioso silencio, se encuentra la joya más bella,
El poder decirte, que con gran fervor, que he nacido en este mundo,
Para amarte eternamente.