CAPITULO 5

En la mente de nuestro protagonista solo recordaba los momentos en donde vio su tienda caer, la fábrica la cual con esfuerzo fue abandonado todo lo que hizo no fue para nada…

-señor??

Bell al escuchar esa voz poco a poco fue despertando y lo que vio fue ah una dama curando las heridas de nuestro protagonista y cuando despertó por completo la vio con más claridad, aquella dama tenía pelo obscuro ojos de color café caramelo, la dama al ver que Bell había despertado le limpia las heridas con cuidado:

-Qué bueno que ha despertado señor pensábamos que estaba muerto.

Bell al ver que lo estaba curando se levantó y se sentó en la cama y la miro:

-Gracias por curarme señorita, pero me puedo recuperar poco a poco, por cierto, ¿en dónde estamos?

Bell se levanta por completo y va hacia una ventana y lo que ve es un paisaje de una gran explanada y al frente de un gran edificio de color rojo con varias cupulas que brillaban con el sol.

-Estamos en Rusia señor oh lo que hoy se conoce como la Unión Soviética, y lo que ve por ahí es la plaza roja.

La señorita lo ve con una sonrisa sin embargo nuestro protagonista se veía confundido.

-Como es que llegue aquí?

La señorita se le acerca y lo mira:

-Llego aquí hace 1 semana atrás, los soldados lo encontraron herido, cuando llego aquí les pedí que lo trajeran a mi casa en esta parte del país me conocen por tener una mano curandera.

Bell la mira:

-Le agradezco por haber cuidado de mis estos días y por cierto no se su nombre.

La señorita le sonríe:

-Mi nombre es Lynar yo no soy de este país yo soy de Francia llegue aquí cuando solo tenía 10 años, aunque sé quién eres tú.

Bell mira a un lado y mira al frente:

-Si…mi nombre es Bell Golermoon, dueño y empresario de las empresas GolBell de echo una de tus telas tiene mi marca.

Lynar revisa y tenía razón las telas y su propia ropa tenían la maraca de Bell.

-Valla debo decir que sus telas son increíbles, pero no entiendo ¿cómo es que su empresa decayó?

Bell al escuchar eso suspira y se vuelve a sentar en la cama.

-La verdad creo que fue la guerra lo que hizo que terminara mi empresa ya que cuando fue ah, Francia, ah refugiarme vi mi fabrica hecha pedazos, mi fabrica ubicada en Alemania fue tomada por el gobierno y convertida en una fábrica de armas y tanques, en Inglaterra es la misma historia…

La señorita lo escucha y para consolarlo de un armario saca un sombrero y se lo da.

-Este sombrero le pertenecía a mi padre él quiso hacer una tienda la cual serian sombreros únicos pero ese sueño no se pudo cumplir ya que mi padre murió cuando era una niña…

Bell al escuchar eso lo toma y con su mano crea un hilo de oro y con una ajuga que tiene en su traje y con el hilo dorado le pone unos adornos y detalles con el hilo y cuando termina se lo pone. Cuando la señorita lo mira sonríe y le caen unas lágrimas y cuando Bell levanta la vista y la mira le toma sus manos:

-La memoria de tu padre estará viva, yo are que su sueño se cumpla ya lo veras.

Bell se levanta y sale de la habitación y del edificio, pero antes de irse fue a donde estaba el presidente del país y cuando le dieron el permiso de estar ah ese presidente le dio 3 lingotes de oro como agradecimiento por haberlo rescatado y sin decir nada se fue. 2 semanas después llegó a Inglaterra fue a los escombros de su tienda y lo único que tomo fue una pieza del molino, la guardo en uno de sus bolsillos y se fue de ahí sin mirar atrás, tomo un barco a un lugar que nunca pudo ir formalmente un país al que lo sigue mucho una historia de libertad y patria, aunque fue un hijo que se independizo del mismo país al que Bell lo conoció como hogar…

Una mañana mientras dormía comenzó a escuchar gaviotas, se levantó de su cama y fue afuera y lo único que vio fue neblina, pero después de un momento a un lado de donde pasaron vio a una gran estatua de color verdoso que sostenía una antorcha y de frente vio la gran ciudad a la que tanto esperaba la gran ciudad de Nueva York. Su plan era quedarse en América y empezar de nuevo pero con una nueva fórmula y aunque al principio le iba a costar era cuestión de tiempo para que se recuperara, fue al centro de la ciudad a buscar su nuevo lugar de trabajo, cuando llego al muelle desembarco y pregunto en donde podía conseguir un negocio cercas del centro de la ciudad y cuando le dieron la ubicación fue a verlo y busco al dueño del local saco un lingote de oro y se lo dio al señor y rápidamente busco material y más cosas para su tienda. Viajo por toda América para ver qué es lo que vendía tanto en especies, trajes y utensilios del hogar, cuando se preparó muy bien abrió su tienda un año después, y aunque empezó mal se le ocurrió una idea cuando vio el sombrero que le dieron asi que se puso a fabricar sombreros y los ponía en exhibición y rápidamente las personas comenzaron a entrar a su tienda, al fin las cosas para Bell fueron cambiando y con nuevo propósito uno que no traerá destrucción a el mismo.