Morvan desapareció entre las sombras, dejando un rastro de bruma negra:
—Esto es solo el comienzo, niño del paraguas azul —dijo desde la distancia—. Volveré y traeré lo que nunca esperaste.
Ian respiró hondo:
—No podemos dejar que esto nos detenga.
—Debemos entrenar y aprender más sobre tu flauta —dijo Caelan—. Morvan no es cualquier enemigo; conoce la magia del paraguas azul y tus poderes musicales.
Clara apretó la mano de Ian:
—Juntos podemos enfrentarlo.
Editado: 12.11.2025